Parte 29 Todo es tu culpa

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Max seguía con su rutina de divertirse en solitario por cada una de las actividades que la isla ofrecía, pero continuaba observando si Oscar tenía suerte con su encargo.

El famoso día de las choco monedas había llegado, Oscar provocó a Susie, lograron recolectar las insignias y la fiesta en el estanque de choco monedas se había llevado a cabo.

Max a sabiendas de lo que pasaría decidió espiar a Oscar a pesar de recorrer tantos bucles hasta la fecha no sabía de qué trataba esa maldición y por qué era tan poco comentada.

— Quiero que cures a mi hermana — Oscar exigió a Susie.

— No pides demasiado —expresó Susie— pide otra cosa algo más amigable —

Oscar se arrodilla a los pies de Susie — Haré lo que sea, si hay alguna forma de ayudar, lo que sea — Expresó Oscar muy seguro de si.

Susie ya estaba trabajando en diferentes posiciones pero ver a Oscar recordó una cruel y muy rara poción — La poción del caballero del corazón roto — Susie comentó en voz baja — Esa poción requiere un ingrediente raro, y al elaborarla es realmente complicado—

— Lo que sea Susie — Oscar seguía ofreciendo.

— Tu hermana te odiara, te golpeará y te dirá palabras hirientes, ella sabrá todo de ti y sus palabras te dolerán como cuchillos ardientes — Susie expresó convencida — pero no puedes contarle nada, es parte del proceso.

— Pues son tus lagrimas las que se usarán —Susie expresó calmada — Los sentimientos son un catalizador muy poderoso Oscar y claro no olvidemos que te va a doler y mucho—

Oscar pensó un momento — Hazlo Susie—

— Bien pero recuerda no debes de contarlo a nadie o la maldición se debilitara— Susie sacó una de sus varitas y le comenzó a susurrarle unas palabras que Max no podía escuchar.

La varita de Susie se veía como se tornaba negra y como a poco espinas cubrían su contorno y en la punta el capullo de una futura flor.

— Última oportunidad, una vez que empiece no podré parar — Susie expresó seriamente —

— Estoy listo — Oscar comentó.

— Bien quítate la ropa — Susie Ordenó —

— Que? — Oscar estaba sorprendido.

— Te dije que no puedes interrumpirme — Susie lo regaño.

Muy apenado Oscar se desprendió de lo que usaba y observó como una pequeña burbuja los comenzaba a rodear distorsionando la vista.

— Es para el ruido — Susie expresó antes que no se escuchara nada.

Max tenía dudas quería saber que pasaba pero solo tenia imagen de una vista borrosa, pero si noto que esa varita negra la recargo en su pecho y pequeñas lianas comenzaron a cubrirlo en casi todo su cuerpo.

Todo se veía normal hasta que miro como Oscar se retorcía de dolor, no podía ver que pasaba dentro de esa burbuja solo sabía que Oscar está sufriendo, el chico se retorcía tras unos segundo de agónica vista se notó como la varita estaba enterrándose en su pecho, Max estaba realmente preocupada casi estuvo por intervenir pero antes de que supiera ya había terminado, Oscar tirado en el suelo aún quejándose del dolor, aunque no dejaba rastros de daño a la vista a sus ojos no la engañaba el dolor que acababa de presenciar.

— Que carajos — Max no sabía que eran capaces de algo tan cruel.

Susie le dio de beber algo — Esto ayudará con el dolor — Y le ayudó a levantarse, ve a dormir Oscar mañana será un infierno.

Y efectivamente la maldición estaba rindiendo frutos y se repetían la violencia verbal y física contra Oscar, al igual que la la primera vez Max se arrimo para darle fuerza a Oscar y animarlo a continuar.

Todo parecía ser normal cuando un incidente sucedió.

Oscar ataco a Pepper.

Oscar estaba furioso golpeando al pequeño panda que no hacía más que cubrirse de la tremenda golpiza que este atormentado campista le estaba diciendo.

Afortunadamente Max estaba cerca y logró separar a Oscar y hasta cierto grado detenerlo, lo tenía abrazado para evitar que siguiera con tu ataque.

— Oscar tranquilo — Max trataba de calmarlo mientras la mayoría solo miraba la desconcertante escena.

En poco Oscar dejó de moverse para calmarse un poco.

—Oscar tranquilo que te pasa — Max estaba angustiada.

Oscar por su parte estaba realmente molesto — Vas a ver cuando te atrape Pepper —

— Qué te pasa Oscar — Max sabía del estrés que era la maldición pero nunca lo había visto así de molesto, que lo orillaría a ser tan violento.

— Pepper tiene varios días mintiendo una y otra vez sobre Max — Oscar grito enojado.

Max estaba confundida — Pero si ni le he hablado, todo el tiempo he estado contigo Oscar—

— El estuvo convenciendo a Lucy que me estaban maltratando, a a los demás campistas que eres una mentirosa y abusiva— Oscar apenas podía articular.

— Pero es cierto él está obligando a Oscar hacer cosas sucias está abusando de él yo vi cuando lo forzó a besarse — Pepper comento aun quejándose — él es una mala persona—

— de que hablas? — Max entró en razón de todo y comenzó a reír como si no hubiera otro día — En serio crees que soy un chico? — Max se quitó la gorra alborotando un poco de su cabello — Mi nombre es Maxim, haaaa una chica— comentó en tono burlón.

— Pero nadie más sabe que bese a Oscar — Max exclamó enérgicamente

Oscar estaba aturdido — Me planeabas besar? —

— Haa? si pero no ahorita — Max se levantó, se puso la gorra y camino directo al panda para extenderle la mano—

Pepper se resistió unos segundo pero le extendió la mano a Max levantándose y sacudiéndose un poco la ropa —Yo creo que me equivoque — Pero su rostro cambió al ver la cara de Max o realmente su puño.

— Pequeño pedazo de basura, todo esto es tu culpa — Max le gritaba a Pepper mientras esta lo golpeaba enojada y llena de ira; no dejaba que cayera al suelo solo continuo su ataque.

— Todo es tu miserable culpa, que te hice maldita basura — Max sin querer tenía los ojos llorosos — Te vi morir a ti a Lucy, y todo por que?? — Max le reclamaba entre lágrimas mientras seguía arremetiendo a un ensangrentado panda.

Todo mundo reaccionó y trataron de calmar a Max, ella estaba furiosa, quería desquitarse de Pepper, todo el daño que ha provocado y todo por que? ... Max le reclamaba al panda quien era auxiliado por otros campistas — Es que acaso me odias — Gritó Max mientras trataba de zafarse.

— A pesar de estar varios sujetándola no podían detener su paso, poco a poco se acercaba al panda que solo estaba asustado y tembloroso ante el ataque de ira de Max.

Max finalmente se cansó y rompió en lágrimas, tenía ganas de golpear a ese panda hasta que solo fuera una mancha en el suelo.

Pepper aprovechó un momento para salir corriendo del lugar.

— No detente — Max volteo a todos lados — Oscar detén a Pepper o todo se va a perder—

varios chicos le cortaron el paso, a vista de todo mundo este par querían lastimar al pequeño panda, Oscar fue atrapado.

Max estaba desesperada pero no podía hacer nada — No de nuevo — Max se quejó, odiaba saber que en este bucle alguien más moriría.

Al poco tiempo llegó Susie regañando a todo mundo, Max y Oscar trataban de explicarle que debían detener a Pepper el cual había escapado no hace mucho.

tuvo que pasar para poder comprender el asunto un poco, pero era tarde puede que Pepper ya viajara en el tiempo nuevamente ahora esto se hacia más incierto.

Betsy apareció junto a Susie — Pepper ha colapsado— Ambas brujas desaparecieron.

Mi nombre es MaxDonde viven las historias. Descúbrelo ahora