Parte 19 Escapemos juntos

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La última vez que Max había estado en la sala del director por mala conducta fue hace años, igualmente se había peleado con un jugador del otro equipo rival cosa que le había costado la suspensión de varios partidos oficiales y hoy nuevamente estaba a la espera junto con Erizo y Oscar quienes para ella habían sido sus héroes.

Justamente este par estaban divertidos y platicando como cada quien había sometido a su respectivo contrincante, Erizo le contaba a Oscar que lo primero que le se ocurrió fue morder la cabeza de ese chico y tratar de golpearlo en la cara lo cual fue relativamente cómico para ambos, incluso Max recuerda su expresión y era realmente delirante.

Mientras que Oscar habló de cómo aprovechar el impulso para aplicar un movimiento digno de un luchador profesional, claro la caída dolió pero su contrincante se llevó la peor parte del golpe y claro someterlo ya fue pan comido.

El único que aún seguía en emergencias era el otro chico, la patada en la entrepierna de un deportista semi profesional no será algo que se ignore con facilidad.

Y hablando de malos momentos, la señorita mimada estaba haciendo un berrinche tan grande que terminó llamando a su padre en ese mismo momento poniendo en un aprieto realmente grande a las brujas o sobre todo a Susie.

Al final vino la pregunta que Max quería evitar.

— Que paso en el comedor — Preguntó Oscar

— Si cuéntanos, cuando vimos que te atacaron no lo pensamos dos veces y nos lanzamos contra sus atacantes — Erizo festejaba — Y fue tan emocionante —

Máx les tenía confianza, pero hasta a ella le apenaba un poco la causa — Me hicieron enojar — Max contestó con reserva.

— Max entra ahora mismo — Exigió Susie entre quejidos susurro — Odio a los niños —

Max había pasado a lo que sería la cocina, ahora oficina de Susie.

— Sé que eres toda una celebridad de donde vienes, pero este lugar créeme no es tu liga — Susie la reprendió.

— Tenemos a un niño al que literalmente tendremos que usar magia en sus pelotas por que casi se las rompes — Susie se rio — Aun así es gracioso, pero eso es malo, algo que decir respecto a este herido—

— Fue en defensa personal — Alegó Max en voz baja.

— Ya veo — Susie se mostró más seria — Ese chico no es problema un poco de magia y olvidará que una vez tuvo usar hielo en la entrepierna, el problema es Lucy, su padre dona literalmente millones a este campamento y justo en este momento su niña consentida habla de como un patán le rompió la cara — Susie tomó un respiro — Que tienes que decir respecto a este incidente —

— Ella comenzó todo yo solo me defendí — Max se sentía algo intimidada.

— Quiero que te quedes en tu cabaña, en lo que solucionamos todo — Susie usó su varita y desapareció a Max.

— Oscar y Erizo — Susie solo gruño — Tenían que también estar involucrados —

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Max estaba recostada en su cama leyendo el manual que le habían dado y comenzó a leer distintos temas de interés en general.

— Espero que estén bien — Max sonaba preocupada — dejó caer el libro en su rostro —Au— Se quejó levemente

Parte de sus notas mentales era no hacer enojar a su amiga Erizo ella parece tornarse algo violenta cuando está peleando lo que en cierta forma le daba risa, — No todo fue malo — Pensó Max — Es bueno saber que alguien te respalda sin siquiera pedirlo — Comento algo apagada.

Max comenzó a revisar su maleta y se encontró ese par de vestidos para el campamento que por cortesía a su madre ella había decidido traer consigo.

— Tanto lio solo por la apariencia — Max se quejo mientras se miraba en el espejo— Y si me dejara crecer el cabello?... pfff... ja ja ja ... me estorbaría en los campeonatos —

Max no tardó y volvió a dejar la ropa donde estaba y regresó a su usual look — Mucho mejor — Ella estaba mas cómoda así.

Los minutos habían pasado y Max se estaba aburriendo, cuando alguien, más bien Oscar abrió la puerta de repente.

— Max tenemos que salir de este lugar — Oscar exclamó preocupado — Rapido junta tus cosas, los monstruos nos van ayudar a escondernos unos días en su casa —

— Oscar tranquilo, primero explícame que te pasa — Max le exigió al alterado Oscar

— Me tocó escuchar que Susie te va a correr del campamento — Oscar dijo preocupado — Escúchame no puedes irte de esta isla, no aun —

Max se dejó caer en la cama — qué más da, fue divertido pero nada es para siempre —

Oscar se veía preocupado por lo dicho de su amiga — Max tienes que confiar en mí, tengo que esconderte, es muy importante que no salgas de esta isla —

— Es por que soy un vampiro, eso ya no importa — Max se quejo — He vivido mi vida así y siempre será igual qué importa eso ahora —

— Max porfavor — Oscar se puso de rodillas y sus lágrimas estaban por salir — yo no quiero que te vayas—

— Ya Oscar vas hacer que también me ponga triste — Max se quejo — Solo dime por qué es tan importante —

— es por que, ammm, jure no decirlo — Oscar se sentía devastado —

— Vez Oscar si no tienes el valor de decírmelo es que no tiene importancia, Oscar conoceras mas gente, levántate vamos tu disfruta el verano —

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En ese momento del suelo de madera se estaba abriendo un túnel que había hecho el monstruo Mortimer — Ya están listos? el refugio está aprovisionado y alejado de la vista de las brujas —

Oscar se levantó y como la mano de Max — Por Favor escapemos juntos mientras se calman las cosas —

Max se soltó de la mano de Oscar — Oscar ya me estas cansando, no iré a ningún lado si no me dices que tanto te importa que yo me quede, si ya se que me gustas y que me vaya a ir no lo cambiara, podemos ponernos en contacto al final del verano—

— Max tu estas enferma — Oscar comentó apagado — mi hermana esta enferma y es por las brujas que ustedes se están recuperando de su enfermedad —

Max de inmediato recordó las palabras de la vampiresa — Es broma verdad, sigo me siento sana —

— ese era el secreto que juré guardar — se lamentó Oscar — es por causas mágicas y solo se puede tratar en la isla —

— Genial, no me digas que no enfermamos de algo en esta isla— Max comentó escéptica.

— Max solo se que mi hermana estaba enferma mucho antes de venir a este campamento, esa es la causa de por que se aísla de todo el mundo, soy su hermano y único amigo, y desde que llegamos a esta isla fue una bendición, Erizo no se a vuelto a enfermar —

— Vaya — Max exclamó atenta

— Mira ahora estarás sana pero pasara el tiempo y enfermeras, Erizo estaba tan mal que un año estudio en casa, que crees que te pasara a ti si sales de este lugar, debemos negociar de una manera u otra pero por nada abandonar la isla.

Max dudó un poco pero tomó la mano de Oscar y lo siguió al túnel de escape que había hecho su amigo.

Mi nombre es MaxDonde viven las historias. Descúbrelo ahora