- Prólogo - Sueño

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Mis manos sudaban, el sudor frio recorría mi frente como una cascada, estaba asustada seguramente también pálida, mi visión se perdía al igual que mis otros sentidos, no sentía, no veía, ni escuchaba y eso solo alimento mi desesperación, tenia miedo. Muchas preguntas rondaban en mi cabeza a pesar de mi estado.

Sabia que esto ocurriría, solo que no pensé que iba a pasar tan rápido, pero ¿Qué hacer? Esta es una situación que se me escapa de las manos, los nervios no me dejaban analizar y mi falta de sentido tampoco ayudaba, estaba perdida. Lo sabia.

Mire al frente, pero aun así no veía nada. Las voces salían distorsionadas, provocando que me confundiera, las cosas no estaban bien y no me gustaba para nada, tenia miedo y muy poca energía como para ayudarme.

De repente, sentía como algo se escurría por mis ojos y mis oídos, espera....¿Sentía? ¡Maldita sea sentía!.

-¿Qué pasa princesita?, no haz despertado aun - se burlan de mi lo se, pero aun tengo miedo de ver quien lo hace, oigo su voz pero no tengo valor suficiente como confirmar.

-¿Por qué no despiertas, Princesita? ¿Asustada? - No tengo que abrir los ojos para saber que sonríe son suficiencia, ganador se que así se siente, había logrado su cometido - Al parecer no eres nada sin tus poderes, princesita - Ríe.

''Tranquila'' - Oigo en mi mente, un alivio recorre mi cuerpo, pero aun así no lo demuestro - ''Te sacare de hay, Confía en mi Jess''. - Lo hacia, mas que nada en el mundo. - ''Te quiero, ¿Lo sabes cierto?'' - Sabia que donde quiera que estaba sonreía, siempre lo hacia cuando pronunciaba esas palabras, que me hacían un manojo de nervios, mi corazón se aceleraba al escucharlas, y los elefantes hacían fiesta, sonreí para mis adentros.

''Lo sé, yo también te quiero'' - respondí. ''Es bueno saber eso, nos vemos en un rato'' - Y hay se fue la conexión.

Desperté sudando, y agitada como si hubiera corrido una maratón, mire hacia el espaldar de mi cama, el atrapa sueños de mi madre, no lo había puesto donde siempre y por eso tuve la pesadilla, lo busque con la mirada y lo encontré en mi puerta, concentrada en el, lo atraje hacia mi, una vez en mis manos lo enganche en el espaldar, y volví a cerrar los ojos con la esperanza de así tener un buen sueño esta vez y con eso en mente, caí en brazos de Morfeo.

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Historia Corta...

Espero la disfruten.

Besos,Gaby

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