Soy Diferente

- Capitulo 16 - Luna Azul o Noche de sangre

Jess abrió los ojos horrizadas las ver a Aarón convulsionando en la parte trasera de la camioneta, sus ojos estaban perdidos en algún punto de la oscura noche sus dedos ahora estaban decorados de unas inmensas garras marrones oscuras y el pelo era muy, pero muy notable se notaba crespo y rizado encima; para ser más específicos en el techo de la camioneta se encontraba Blake retorciéndose de dolor, Taylor tuvo que suspirar y mover sus manos continuamente para no ir y desamarrarlo.

- Vamos chicos, actúen con la mente abierta - dijo Stella mas que nada a Jess y Taylor.

- Es hora de empezar - Wilson aplaudió y dijo - suerte.

Las chicas le vieron como si fuera un monstruo peor de los que aparece en el planeta sueño, la mirada de Jess corrió a detrás de Wilson no dio un grito al ver el lobo simplemente actuó.

Hizo uso de unos de sus poderes la levitación, el lobo salió volando por encima de sus Cabezas y Ashley primerizas en esos temas soltó un grito que varios pájaros salieron volando de las copas de los árboles. 

- Chicos, creo que el plan no será llevado a cabo - intento bromear Wilson y miro al lobo que no está para nada contento. 

- No me había dado cuenta genio - ironizó Ashley, un aro de fuego se creó a su alrededor y al final sus gloriosas hadas y traje fantástico rojo y negro salió a la luz.

- No era necesario tanto fuego - opino Dora y shasqueo los dedos su flamante cabello se volvió un moño lleno de piedras azules parecidas al zafiro y su traje fue cambiado por un pantalón corto y una pieza de traje de baño. - Eso atrae a los vampiros.

- Es bueno que una de ustedes este informado - opino una voz rasposa de entre los árboles. Jess tuvo la necesidad de voltear pero lo evito tenía que ser fuerte y mantener su vista en aquel lobo que lo único que hacia era secar sus dientes grandes y afilados.

El bello del cuello de Dora se erizo al reconocer aquella voz; sus ojos se nublaron de las lagrimas moral en dirección hacia los árboles donde aquel sujeto estaba recostado cuando sus ojos se encontraron, Dora no fue capaz de aguantar su sollozo. 

Jess que tenía la vista fija en el lobo tuvo que volver a romper su promesa de matar y hacer justamente eso matar al lobo para fijar su vista en Dora; Ella lloraba mientras mantenía su vista en aquel sujeto. Wilson se acercó tratando de consolarla, Dora se alejo.

- Matías - susurro y lo miro. 

El chico dejó escapar una suave risa y dejó a conocer su rostro, para tener una voz ronca y profunda era bastante guapo y su apariencia era de un chico de 25 años, su cabello anaranjado brillaba bajo la luz de la luna azul y las constelaciones y sus ojos eran marrones rojizos, su piel bronceada y sus definidos brazos se podían ver debajo de aquel jersey azul oscuro y camisa blanca. 

- Es bueno verte Dora. - dice - Te vez hermosa - sonríe.

- ¿Que quieres y quien eres - preguntó Wilson molesto.

- De ti, nada - dice el chico un rayo de luz anaranjada le atravesó la iris - Solo vine a buscar lo que me pertenece - miro a Dora y sonrío con cariño - Vine a buscar a mi novia, a mi chica, Dora. - Ella ya había dejado de llorar y ahora sonreía mientras se encaminaba hacia Matías. 

- El lado oscuro nos espera, al igual que Jared - comento. Justo en ese momento un rayo planteado cruzó el cielo cayendo sobre Blake, este dejo de moverse y Aarón hace un rato se había convertido en un lobo de pelaje negro y ojos profundos.

Entre tanto aturdimiento, Jess había jalado el rayo de luna azul y pequeños polvos azules brotaban aun en el collar. Sin ya esperar mas cogió las pastillas una de oro y otra de plata y se acercó sin miedo alguno a las dos bestias uso control de cuerpo y les abrió la boca observo las pastillas plateada a la boca de Aarón y la dorada al cuerpo de Blake.

Los gritos le pusieron los bellos de puntas pero sin importarle quedo viendo aquel lobo, como sus partes humanas salían a la luz. 

- Díganle algo a Jared y es que nunca caeré bajo su magia negra tengo bastante razones para no unirmea el - miro a Dora que se encontraba abrazada a Matías - Lamentablemente, una de esas razones no era mas que una falsa con alas - usando su mente mando a volar a Dora y Matías sus gritos desgarradores se escucharon desde la lejanía y miro al lobo de antes su sangre aún seguía corriendo y Jess no pudo evitar mirar sus manos y suspirar. - Vamos, hoy a sido una larga noche.