Capítulo 1

1.2K 105 11
                                    


MALDITA LESIÓN

Shoto salía molesto de la que era la oficina del director Nezu, ¿La razón? Debía hacer de niñera para uno de sus estudiantes de estudios generales

¿Tanto había caído su vida? 

Hace apenas unos meses, él se encontraba en misiones secretas, y siendo el héroe que siempre había querido ser: uno capaz de estar en el ranking sin utilizar su lado izquierdo. Pero ahora, ahora lo había perdido todo, las noticias en el periódico y la televisión anunciaban que se debía a una lesión sufrida en su último combate, pero las cosas eran diferentes, una estúpida lesión no podría incapacitarlo, pero, si tuviera que culpar a alguien, se culparía a sí mismo, o mejor aún, a su padre, pues era el resultado de un juego con genes lo que lo había colocado en aquella posición.

Suspiró tratando de calmarse, era culpa de su padre, saber eso era suficiente para poder seguir con su maldita vida.

Llegó al salón de clases. En ese momento era la hora del almuerzo, por lo que sería normal encontrar aquel salón vacío, pero no era así, dentro estaba aquel estudiante al que debía cuidar: Izuku Midoriya.

Claro que debía estar ahí, el maldito niño nunca salía, nunca socializaba ni hacía nada para cambiar su situación, siempre tenía que estar ahí.

Midoriya estaba en su puesto leyendo un libro, quizás no era el libro más interesante del mundo, pues solamente se trataba de una biografía de All Might, su héroe preferido, que a pesar de ya conocer la historia publica de su vida, siempre amaba poder leer más esperando encontrar algún dato nuevo.

— Midoriya — Le llamó el más alto

— ¿Todoroki sensei? — El menor estaba algo sorprendido, por lo que sabía, aquel profesor de cabello dispar, no solía entablar conversación con ninguno de los estudiantes a menos que estuvieran en problemas — ¿Sucede algo?

— Seré directo — Todoroki tomó asiento en la banca delante del asiento del chico — Se me ha ordenado averiguar lo que pasa contigo

Claro... era lógico que fuera una orden, era un alivio saber que no estaba en problemas, pero saber que le hablaban por alguna orden del director, no se sentía mejor.

— ¿Averiguar de qué? — Preguntó con inocencia

— Tu madre ha presentado una queja — Bueno, eso sí que no se lo esperaba. Su madre no le había dicho nada sobre ir a quejarse — Dice que algunas noches llegas a casa con tus ropas rotas o sucias, pero sin ningún rasguño

Oh... todo ese tiempo el de rizos creyó que su madre no se percataba de aquello ya que él metía a lavar su ropa y se encargaba de remendarla, pero bueno, suponía que era difícil ocultarle algo a su madre ¿no?

Pero bien, ahora ¿Qué podría decir? Era bastante obvio que la verdad era algo que realmente no podía decir.

— Eso es porque... — Izuku soltó las primeras palabras de la oración sin haber terminado de pensar en alguna excusa — porque...

Todoroki espero unos segundos esperando la razón, pero después de 30 segundos de silencio, asumió que el pecoso solo estaba tomando el tiempo que podía para inventar alguna excusa, bueno, su plan de esperar la verdad en su primer intento, había fracasado.

Todoroki suspiró agotado no solo de la situación del chico, sino de todas las preocupaciones que venía cargando desde hacía meses, pero, por ahora, parecía ser que ser directo no había sido buena idea.

Izuku comenzó a temblar en su sitio, tenía los ojos apretados en lo que parecía ser una expresión que reprimía lagrimas o sollozos.

— No te presiones ¿De acuerdo? No es como si te fuera a hacer algo por no saber la respuesta — Todoroki prefirió detenerse ante aquel acto del menor, de alguna forma le había recordado algo del pasado

InmoralDonde viven las historias. Descúbrelo ahora