IZUKU MIDORIYA
La misma tarde en que Izuku arregló las cosas con su amigo de la infancia, fue la misma tarde en la que el peliverde habló con su madre acerca de su don.
Una noticia bastante impactante para Inko, quien, desde que Izuku era niño, había cargado con la culpabilidad de no haberlo concebido con un quirk, pues, a pesar de que su hijo nunca habló con ella al respecto, ella no era tonta, ella era perfectamente capaz de notar aquellos sueños en su hijo; mismos que nunca trató de cumplir más allá de inscribirse al examen de ingreso al curso de héroes, que finalmente, no presentó. Todo bajo la excusa de que quizás, "eso no era para él". Algo que le rompió el corazón a su madre, quien hubiera preferido que su hijo hubiera tratado un poco más. Algo que la hizo culparse por nunca haberlo alentado debido a sus propios miedos. Algo que poco a poco, iba aumentando más peso a esa culpabilidad que ya cargaba.
Quizás, todo el tiempo que estuvo con Izuku, habría podido resumirse en todas esas culpas que de a poco, habían sumado lo que era hoy.
Una culpabilidad que por fin pudo quitarse cuando aquella enfermera de baja estatura, confirmó lo dicho por su hijo dos semanas después.
Izuku, tenía un don. Uno curativo.
¿Cómo es que Izuku lo supo?
¿Desde cuándo lo hacía?
¿Había curado ya a alguien?
Fueron varias las interrogantes que la peliverde realizaba a su hijo cada mañana, pero él, él simplemente desviaba la mirada y contestaba con una simple oración que ella no era capaz de entender.
"Creo que ya era hora de pelear con mi propia fuerza"
Decía en lugar de una contestación coherente.
Algo que después de algunos meses, Inko supo interpretar como terreno peligroso, pues su hijo, estaba aferrado con uñas y dientes, a no decir nada más de lo que ya había dicho.
Algo que ahora debía respetar.
Sí, ella podría contar con la información, pero ¿Saber que hacer después? Vaya que eso era lo complicado. Lo fue cuando su hijo, al fin le confió lo que pasaba con él. Lo fue cuando aun sin haber terminado de asimilarlo, Izuku se plantó frente a ella declarando con convicción que él, cambiaría al curso de héroes.
Por supuesto que aquello aterró a Inko. Su hijo, su querido, delicado y mukosei hijo, ahora anunciaba que se vería involucrado en una batalla entre el bien y el mal.
¿Acaso eso tenía sentido?
¿Acaso alguien había configurado la vida para que fuera a cámara rápida?
Vaya que Inko no terminaba de asimilar una cosa cuando de repente esa enfermera, tomaba a su hijo como su protegido.
¿Era en serio?
Daba miedo. Definitivamente, daba mucho miedo.
¿Izuku estaría bien? ¿Su pequeño estaría bien bajo el cuidado de aquella mujer?
Para bien de Inko, aquellas interrogantes tuvieron respuesta en cuanto Izuku ingresó al grupo 2A. Había sido Chiyo quien habló con la peliverde en aquella ocasión.
— Su hijo estará bien. — Le dijo una mañana soleada — Entiendo que quiera protegerlo con ese desespero, pero él, estará bien. Él seguirá protegiéndola, señora Midoriya
La madre del mencionado no tardó en ladear la cabeza en señal de confusión. Aun así, la siguiente oración dicha por la enfermera, calmó a la mujer. Al menos lo suficiente para comprender que nada la iba a separar de su hijo como venía temiendo.
ESTÁS LEYENDO
Inmoral
FanfictionShoto es un pro hero en la mejor etapa de su vida, casado con la también pro hero, Creati, y en el segundo puesto dentro del ranking de héroes, podría decirse que nada le falta. Sin embargo, aquello no dura, pues tras un accidente después de su ulti...