Por amarte así

Capitulo 20

—Ya voy a comentar sobre ellos— decía el señor —Por otro lado y muy bien escondidos estaban los hombres lobos, licántropos sumamente fuertes, rápidos e inteligentes—

—Te falto decir guapos— decía Richard riendo

—Y por supuesto guapos– dijo el señor riendo —Estos licántropos no eran conocidos por los humanos por qué son seres reservados, les gusta vivir en las sombras, sólo salían cuando iban a defender a alguien, no salían por cosas insignificantes, también tenían una doble vida, una en la mañana como personas normales y en la noche cuando había luna llena se convertían en lobos, su deber en ese momento era proteger a su manada y también la vida humana. Pero este secreto de los hombres lobos no duró mucho, ellos vivían cerca de una aldea en España asi que ellos se enteraban del terror que los humanos le tenían a los vampiros, un día el futuro líder de los hombres lobos salió a hacer su guardia como de costumbre y a lo lejos escuchó los gritos de varias personas no tardó en correr hacia ellos, al llegar varios vampiros estaban matando humanos, el comenzó a defenderlos y mató a la mayoría de los vampiros, sólo dos vampiros quedaron, una mujer de piel morena y ojos rojos y otro joven de piel blanca y ojos azules, este último era algo raro, ya que sus ojos tenían el mismo color que el de un humano— cuando el señor describió su aspecto de inmediato pensé en Priyanka y René, ellos tienen esos rasgos —Ambos al ver que estaban solos corrieron y el lobo quedó victorioso, durante algunos meses las personas de esa aldea estaban tranquilas, y veían al lobo como un ser divino, decían que había sido mandado por Dios para acabar con los vampiros.
El lobo seguía haciendo guardia hasta que otra vez escuchó los gritos de una persona, un olor putrefacto entro en sus fosas nasales y sabía que ellos habían regresado, como se lo imaginaba ahí estaban, un hombre alto, piel muy pálida y pelo castaño estaba matando a una mujer, el lobo sin pensarlo se le fue encima, fue una batalla algo fuerte, ambos eran líderes y tenían más o menos la misma fuerza, la pelea acabó—

—¿Y quien ganó?— pregunté curiosa

—Ninguno, ambos no se mataron, el lobo no quería matarlo, ni el vampiro a él, tenían humanidad todavía, desde ese día hubo una gran amistad entre ellos e hicieron un acuerdo, los vampiros sólo podían cazar cuando el humano le pidiera que lo convirtiera, y el lobo podía matar al vampiro cuando este caze sin ninguna razón, los años pasaron y la amistad aún seguía hasta que... apareció una mujer, muy linda, era humana y llegó a vivir a la aldea, el hombre lobo se enamoró de ella y el vampiro también, ambos amaban a la misma mujer, y ahí fue cuando todo se rompió, ambos amigos se peleaban por ella, la llenaban de halagos y regalos, pero al final la chica eligió al vampiro, y ya desde esos momentos los vampiros y los hombres lobos no se llevan—

—¡Qué increíble historia!— decía Erick —No sabía que se odiaban por culpa de una mujer—

—La historia no solo queda ahí, desgraciadamente a los hombres lobos los acusaron injustamente— Hanna

—¿Por que?—

—Por culpa de una vampira— decía Hanna con mucho enojo,

—Hanna no comiences, estamos hablando tranquilamente— decía el señor

Erick y yo regresamos a nuestra casa y lo abracé y comencé a llorar, seguía sin entender ¿por qué vi esas cosas cuando me caí?.

—Erick pasa algo pero no te lo puedo comentar por el momento, cuando sepa bien lo qué pasa te lo diré— dije subiendo rápido a mi habitación

Al día siguiente madrugamos para ir a la escuela.

—*Tn* no hay nadie todavía, no se por que me hiciste despertarme muy pronto— decía Erick bostezando

Obviamente me desperté muy pronto por que sabía que Christopher estaría aquí y podría interrogarlo.

Mire a Erick y este estaba dormido en el asiento, aproveché para bajar del auto y camine hasta las canchas, Joel y René estaban jugando con un balón de Basketball y Christopher sólo los miraba desde las gradas.

—Tu y yo ¿por que estamos conectados?, ¿desde cuando nos conocemos?— dije aventándole la mochila pero sus reflejos fueron muy rápidos y la agarró de inmediato

—¿De que hablas?— Christopher

—No te hagas el loco, ¿hace cuanto nos conocemos?, ¿por que te quiero matar?—

—No se de que me hablas en verdad— decía Christopher mirando de nuevo hacia sus amigos

—¡Habla Christopher!—

Christopher se levantó muy rápido y me agarró muy fuerte de la muñeca —Te he dicho que no se NADA—

—Chris ya dile— Joel

—No le voy a decir nada, es mejor que ella no se entere de la verdad— Christopher

—Mejor dile ahora, podemos cambiar
el futuro— René

—No creo que se cambie, ¡¿que les pasa?!, ¡¿quieren que nos mate?!— decía Christopher

—Ok, si no le dices tú, le dijo yo— decía Joel —Mira *Tn* hace siglos...—

—Mejor le dijo yo, haber qué pasa— decía Christopher jalándome del brazo y llevándome a la cafetería —Aquí no hay nadie, así que no nos escucharán—

—Te escucho—

—Hace siglos, cuando vivía en España visitaba una aldea muy seguido, ahí fue cuando te conocí, eras una chica de apenas 17 años, recuerdo que sonreías y cantabas mientras hacías tus labores domésticos, me llamaste la atención y me acerqué a ti, ahora que lo pienso fue un error hacerlo, en ese momento te volviste mi debilidad, nos hicimos amigos y después fuimos novios, la pasamos bien la verdad— decía Christopher con una media sonrisa —Pero después pasó algo que cambio todo, nos volvimos rivales, desde ese momento nuestra historia quedó marcada hasta en los libros—

—¿En los libros?—

—Si, la gente comenzó a rumorar sobre la persona que se encargaba de matar demonios y monstruos, hablaban de Van Helsing, y también de su gran rival; el líder de los vampiros— decía Christopher viéndome —Debo de admitir que no era tan popular Van Helsing, de los vampiros ya tenían libros escritos pero de el no, hasta 1897 fue cuando el escritor Bram Stoker escuchó el rumor sobre ellos y decidió hacer el libro Drácula, en esa historia contó sobre su rivalidad y desde ahí más historias de ellos se fueron haciendo, tú apellido Van Helsing no es por casualidad, tú eres la caza monstruos de la que durante años se habla en libros y películas—

—No te creo— decía muy confundida

—Pues comienza a creerlo, tú eres la gran cazadora, y yo soy el conde
Drácula— Christopher

—¿Por que somos rivales?, ¿por que siempre tenemos que coincidir?— dije pero Christopher ya no estaba, el no aclaró del todo mis dudas, sólo sabía como lo conocí hace siglos y qué tal vez he reencarnado durante mucho tiempo.