CLC: Cought in the trap

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Hace no mucho tiempo mi madre volvió a comprometerse después de haber pasado viuda casi 9 años, lo peor de todo es que yo nunca me entere de eso hasta el ultimo momento en el que mamá me ordeno ir empacando mis cosas cuanto antes pues nos mudaríamos mas cerca de Seúl donde su ahora prometido vivía junto con sus 6 hijas. Su prometido nos pidió que sólo empacáramos nuestra ropa y objetos personales y el luego se encargaría de llevar todo lo demás en la mudanza, así lo hice aunque a duras penas. En verdad no quería irme y dejar atrás a mi grupo de amigas, esas que me costo casi media vida en conseguir debido a mi gran problema de inseguridad (que desde tiempos inmemorables no me deja tranquila) Prometimos seguir en contacto pero no seria lo mismo, ya me conocían, seguramente nos distanciemos a la mitad del año o algo así. Tiendo a alejarme de ciertas personas en cuanto conozco otras, no se si me di a entender, ya se que soy algo extraña.

En fin, de camino allá mamá contó que el señor Choi y ella se habían conocido en uno de sus tantos viajes de trabajo fuera de la ciudad y que desde entonces no dejaron de hablarse, supongo que Cupido hizo de las suyas en alguno de sus encuentros y flecho a mi madre con aquel hombre. Por lo que pude entender, antes de quedarme dormida, es que aun estaban planeando la boda y que deseaban casarse frente a la torre Eiffel (presiento que ese es solo capricho de mi mamá, pero bueno ya que) Me coloque los audífonos y subí el volumen de la música, con el riesgo de quedar sorda, para por fin desconectarme del mundo, a pesar de no haber hecho mucho me sentía agotada, ya no supe si mamá siguió contándome sobre su prometido o no se que pero lo ultimo que escuche fue "ojalá tu también encuentres un hombre como el algún día" JA que buen chiste madre, ya me hacia falta reírme.

Debido a mi pequeña siesta el viaje se me hizo demasiado rápido, ya para cuando acorde me mamá me sacudía de lado a lado con fuerza queriendo despertarme avisando que ya habíamos llegado. Con pereza restregué mis ojos para quitar todo rastro de somnolencia o de lo contrarío mamá se enfadaría por ir dormida, la ultima vez qué pasó me caí de las escaleras y ella ni siquiera me ayudo, solo me reclamo que por que camino como zombie, lastimosamente acabe con un esguince en el tobillo pero al menos pude faltar a clases una semana. Me quite los audífonos y baje del auto siguiendo a mamá, en la puerta de la casa nos esperaba ya quien yo suponía era el señor Choi y al parecer acerté ya que se acerco sonriente a mamá y se besaron en frente mío.... Ok esta bien, entiendo que se amen y todo eso pero al menos pudieron habérmelo dicho! Yo también merecía saber, después de todo el iba a ser el esposo de mamá

-Ejem...- dije discretamente apoyándome sobre la puerta del auto cruzándome de brazos y mirando atentamente a ver que mas pasaba

Mamá se sobresalto y se separo de golpe y con unos nervios muy notorios nos presento. Yo solo me limite a hacer una reverencia por respeto, todavía no se gana mi confianza al 100% sin embargo por eso no significaba que iba a tratarlo borde, no soy maleducada (o al menos no tanto) Con ayuda suya bajamos las cosas del auto y entramos a la gran casa, que en todo este rato no había notado lo enorme que era. De verdad parecía esas que se suelen ver en las películas: con jardines verdes, ventanales enormes, etc. Parecía una casa de ensueño, quizás vivir aquí no sea tan malo después de todo.

Entre detrás de mi mamá con algo de nervios pues entre tanta elegancia tenia cierto miedo de cometer algún error por accidente y que alguien se vaya a enojar conmigo. Apenas entre había mucho silencio y me sentía en una biblioteca estricta, ni siquiera me atrevía a dar un hondo respiro por temor de que se rompa el silencio y algo malo pase. El señor Choi se acerco al borde de la escalera y llamo a las que creo que son sus hijas, ahora si acepto que me puse mas nerviosa que de costumbre, él nos dijo que por mientras podíamos poner nuestras cosas en la sala pero yo me negué a soltarlas, de alguna u otra forma me sentía segura abrazando mi mochila. Con pasos lentos me acerque a mi mamá sin dejar de mirar a las escaleras, al poco tiempo escuche los pasos resonar por un pasillo hasta ir bajando las escaleras. Una detrás de la otra en fila con sonrisas pintadas de oreja a oreja

Female idols X fem readerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora