Mi Historia [+18]

Capitulo: 5

Los chicos me habían estado enseñando las mejores calles de la ciudad, y donde se hacían las mejores fiestas, pero lo que mas me gustó de todo lo que me enseñaron fue la playa.

Era hermosisímas.

Ahora nos encontrabamos en una cafetería cerca de casa. Los chicos no paraban de mirar de arriba a bajo a todas las chicas que entraban a la cafeteria incluidas a las camareras. Ya entiendo por qué les gusta tanto esta cafetería.

En fin mujeriegos.

Una de las camareras jóvenes se nos acercó sonriente, con una libreta y un bolígrafo para anotar nuestros pedidos.

-Bienvenidos a Florida's coffee, ¿Qué deseáis pedir?-

-Yo te pido a ti guapa- dijo Izan intentando ligar pero parece que la chica no quiso caer en sus encantos.

-Yo pediré un batido de frutas- le pedí a la chica.

-Genial ¿y ustedes?- le preguntó a los demás.

Cada uno de los chicos pidió uno de esos batidos tan famosos que se preparan aquí. El mío estaba buenisimo y el de Jake también ya que me dió aprobar del suyo.

-Ahora vengo- dijo Eric de la nada y levantándose del asiento.

Los demás siguieron con su conversación de hamburguesas, pero yo seguí con la mirada de cada paso que Eric daba. Llegó donde se encontraban varias chicas, la que era rubia no paraba de coquetearle, de una manera un poco patética. Pero parece que lo consuguió, por que los dos se fueron al baño, deje de pensar en ellos, ya que no quería imaginarme lo que estarían apunto de hacer.

-Las hamburguesas con mostaza son mejores- dijo Izan defendiendo la mostaza.

-Pero con ketchup sabe mejor- le respondió Austin.

-Esta conversación es subrrealista- les dije apoyando la cabeza en la ventana que tenía al lado.

-Oye ¿y Eric?- preguntó Seth al percatarse que hace quince minutos que se fue con una chica al baño.

-Está con una rubia- le respondí sin ningún tipo de interés.

-Ese si que las tiene locas a todas- dijo mi hermano como si estuviese orgulloso de su mejor amigo.

-Claro que las tengo a todas locas hermano- dijo Eric apareciendo de nuevo en nuestro campo de visión.

-No lo creo- dije yo en un susurro mirando por la ventana, pero al parecer no lo dije lo suficiente bajito.

-Ya te daras cuenta que si las tengo a todas locas- dijo mirándome fijamente a los ojos con esa mirada color avellana.

-Lo que tú digas- le dije sin quitarle la mirada, esta vez no me iba a intimidar.

La camarera apareció y nos dijo la cantidad que debíamos pagar por nuestros pedidos.

Los chicos no me dejaron poner dinero, puesto que decían que ellos me invitarían como bienvenida.

Ahora nos encontrabamos en un parque de niños ya que a Seth y a Izan les hacia ilusión montarse en los toboganes.

-Son como niños chicos- le dije a Austin que iba conmigo al lado.

-Lo son, tienen un pequeño retraso- bromeó haciéndome reír.

Volví mi vista a Seth y a Izan, estos dos se estaban columpiando como auténtico infantiles. Los demás decidierón sentarse en unos de los bancos del parque.

-Tio mira a esa morena- le indicó Leo a mi hermano.

-Es mona- dijo mi hermano sin mucho interés en aquella chica.