☸ •𝔗𝔯𝔦𝔭𝔞𝔰 𝑦 𝔊𝔬𝔩𝔬𝔰𝔦𝔫𝔞𝔰• ☸

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¿Por qué nos enamoramos de lo que nos puede matar?

Porque el amor no seria divertido sin un poco de sangre adornándonos la piel.

Y ella quedaba jodidamente sabrosa con pequeñas dosis en su cuerpo.

-P.G

23 de diciembre

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23 de diciembre

17:15

- ¡Dios! ¡Sí! ¡Estás tan mojadita! -Gimió ronco con la frente sudando junto a su boca babeando por mí- Córrete para mí.

La voz de mi entrenador, agitada, con su cuerpo transpirado, pantalón y boxers abajo con su pene erecto, acorralándome en una de las habitaciones en donde guardaban las armas para defensa personal. Armas filosas adornaban las paredes, desde katanas hasta cuchillos de bolsillo. Mi pantalón a la altura de los tobillos con el botón roto. Las manos del hombre de color apretaban mi cintura con lujuria mientras sus dedos me masturbaban. Mi cintura estaba amarrada a la barra de acero para que no me mueva.

Pequeñas perversiones que me gustan ,pero no el entrenador.

Mis gemidos falsos abarcaban la habitación, que de vez en cuando se oían los niños correteando por los pasillos del establecimiento festejando su patéticamente fiestita.

-Córrete para mí, princesa -pidió con una voz ronca pero terriblemente asquerosa para mi.

Giré los ojos con mi cara enterrada en su cuello,

-Dios, no aguanto -gimió metiendo sus dedos aún más en mi interior. Haciéndome sentir absolutamente nada.

Separó mis piernas. Agarró su miembro con su mano y lo posicionó en mi entrada, acariciando con la punta cada parte de mí, me tense.

Mis ojos viajaron a la pared detrás de mí abriéndose más de lo normal, donde mi espalda yacía apoyada.

No. Ya no quiero.

Terminará mal.

La pared.

Eso está flojo.

- ¡Patt, no!- grité para detener su violenta penetración pero hizo oídos sordos.

-No, no. Necesito follart...

El ruido de las armas cayendo me hizo pegarme a la pared apenas por culpa de la soga en mi cintura.

Pero no bastó, ante su movimiento brusco, un arma cayó del muro cortándome el interior de mi muslo. La sangre no tardó en bañar el suelo, los ojos marrones del entrenador me miraron asustados, retrocedió con su verga perdiendo la erección.

Toque con mis dedos la sangre mezclada con mis flujos, los mire para luego volver al entrenador que yacía petrificado mirando detrás de mí. Mi respiración se aceleró, mi cuerpo se congeló, haciendo que lentamente me pegue a la pared sintiendo como el terror comenzó a abrazarme.

Payaso Gótico (+21) ~ Dark Wishes IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora