¿Una pesadilla? Él
¿Un sueño? Ella
¿O era al revés?
No lo sé, pero lo que si era seguro al verlos, era su obsesión por el otro.
Serás mía por todo la eternidad.
Aunque eso signifique que tenga que destrozarte y armarte a mi antojo una y otra vez.
Y...
Estoy atrapada en un cuarto oscuro, asfixiada y sometida a una eterna autodestrucción.
¿Realmente merezco esto?
¿Debería disculparme por desear las pesadillas y rechazar los sueños?
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25 de Diciembre, 07: 32 AM
Malcriada
Entre el blanco y el negro existen matices.
Entre los reyes del color...existe el gris.
No importa en qué orden natural —o sobrenatural—, lo analices, porque para encontrar al blanco en tu interior debías aclarar tu mente, fortalecer tu alma ante los fémenos del mal y sobre todo que los tonos de tu conciencia, brillen. Obligándolos a encontrar lo más sano dentro ti. Liberándote de las morbosidades —o famosos pecados—, hasta que todo sea luz, paso a paso, piel por piel, alma por alma, dolor por...sabiduría y tal vez, al final del túnel, con un esfuerzo digno para que la claridad reine en todo su blanco celestial y así, el famoso mundo de Dios te reciba con orgullo y un amor tan irreal e incondicional para los mortales.
Pero basta de los ángeles, paraísos sin engaños y dioses bondadosos, porque la verdad es tan oscura, que hasta tú has abierto este libro y no con la noble intención de ganarte el cielo.
¿Han escuchado la leyenda del lobo blanco y el negro? ¿De la lucha infinita del bien contra el mal?
Y como ustedes ya lo han previsto.
Nosotros no pertenecemos al bando de los honestos, héroes y sacrificios por amor.
Nosotros somos hijos del negro.
Para llegar hasta él. El color de la elegancia, villanía, muerte y penumbras.
Realmente aquí no importa cuando decidas perturbar tus pensamientos o el nivel de tu heroísmo, solo debes cometer un mínimo error para los fieles y ya eres nuestro. Y una vez has oscurecido los tonos hasta llegar al hueco más maligno de tu alma.
Serás libre.
Solo empieza, abre tu mente y deja que tus escalofríos se conviertan en el de los demás. Que tus miedos se arrodillen ante ti y el dolor...oh...el famoso dolor sea tu combustible para que la inspiración de mansiones de brujas, pasadizos malignos, y cementerios con muertos fuera de sus ataúdes obtengan su merecido sucesor.
Libérate a ti. A todos tus demonios internos para que asiera el lado oscuro exprese la muerte que existe pero que pocos la admiten.
Y esa era una de las situaciones irónicas de mi vida. Porque solo deberías prestar atención a la vestimenta característica del espectro que me crió para entender el chiste mal contado.
