Michele —No digas boberías—evadí el tema totalmente—otra botella Marissa—. —Siempre evadiendo el amor, seguramente ya te la follaste, ¿o no?—. —Amaneciste muy preguntona—reí y bebí el licor que me había traído. —¡Sara!—mi madre gritando—no sabía que ibas a venir hoy, estoy muy contenta de verte, ¿o no?Miki —Salud—ignore y levante mi vaso con licor amargo, mi madre lo noto y rodo los ojos —Déjalo Paula, vamos a ver los jardines que tanto me haz contado— —Stefan es excelente jardinero—platicaban mientras se iban alejando —Miki—Lia.. que todas mis exs se han juntado aquí para hacerme la vida imposible —Ahora tu—dirigí mi mirada a Lia que venía acompañada de una chica que juró haber visto antes. Se veía bastante bien, no podría negarlo
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Ella es una amiga, se llama Carla—la chica sonrió sin quitarme la mirada de encima —Hola—conteste amable—¿te he visto antes? —Si, en la tienda de ropa interior—sonrió coqueta —Oh, amiga de Hayley—tome más licor —No.. realmente—contestó nervios algo que Lia noto y la golpeó con su codo—digo.. si —Como sea, salud—sonreí y salí de ahí, la vibra era incómoda
Lia —¿Eres tonta?—susurre para que Michele no escuchara —¡Me pone bastante nerviosa!— —A todo mundo querida pero debemos ser más inteligentes que el—la mire mal—. —¿Crees que pueda fijarse en mi?— —Claro, debemos quitarle ese lugar a Hayley lo más pronto posible—la tome del brazo— ve a buscarlo. Corre
Carla
Busque a Michele, por toda la casa pero no le encontraba. Parecía acosadora detrás de su presa, hasta que pude ver humo salir de una habitación. Entre y estaba él fumando en su escritorio, era malditamente sexy —¡Oh! Perdona creí que era el baño—mentí—. —No te preocupes—dejo el cigarrillo en el cenicero—la siguiente puerta—contesto sin importarle mi presencia— Mierda, ¡no! Debía hacer algo al respecto ¡ahora! —Tu casa es hermosa—dije mirando las paredes adornadas con cuadros carísimos. —Gracias, mi casa es tu casa—contesto obviamente por cortesía—. —¿siempre eres así?—pregunte seductora sentándome en su escritorio. —¿Como?—ni siquiera me miro —Misterioso—conteste y note su cara de burla hacia mi respuesta —¿Que necesitas, Carla?—pregunto directamente —¿Yo?...— —Más que claro que estás aquí por un propósito, no soy idiota.—río y apagó su cigarrillo— —Venía a presentarme nada más contigo, que eres el anfitrión— —Claro, claro. Pues me presento, Michele Morrone—levanto su mano para estrecharla, algo que tome rápidamente. Dios sus manos eran rasposas por las pesas pero era tan sexy —Hola.. Carla Will—conteste nerviosa— —Pues gusto—contestó Michele, note que seguía tomando su mano. El río y se apartó—espero tu estancia sea buena, cualquier cosa puedes decirle a mi o Mario es mi mano derecha—dicho esto se marcho dejándome sola y completamente nerviosa
Hayley
Stefan me besaba el cuello, se sentía bien. Pero me sentía total una zorra al hacer eso después de lo qué pasó con Michele —Mira, estos son nuestros girasoles—la voz de Paula hizo que mi corazón saltara al mil por hora y me alejará rápido de Stefan—voy por nuestro gran jardinero— —Tengo que esconderme, ¡ya!—Stefan tomo rápido su camisa
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Escóndete aquí, no salgas para nada. Paula no entra a mi cuarto personal jamás— dicho esto salió para recibirla —Stefan!—pegue mi oído para escuchar la platica —Hola Sara! Que gusto verte, ¿que te trae por aquí?— ¿Sara? ¿Quien será? —Miki y sus cenas elegantes, dime que vendrás— —Claro, me llegó la invitación—contestó Stefan— —Haz hecho un gran trabajo en los jardines, todo ha cambiado tanto desde que deje de vivir aquí—contestó esta chica misteriosa ¿Vivía aquí? Y si la raptaron igual que a mi.. —Hemos mejorado—contestó Stefan —Vamos Sara, debemos alistarnos. Como lo viejos tiempos—contesto Paula, dicho esto se escucho como salían de ahí. Sin pensarlo salí, torpemente podrían haberme visto ahí —¿Quien es ella?—pregunte mirando a Stefan—Dime! —Es Sara Hernes—contestó—. —Eso no me dice nada, ¿quien es?, ¿por que vivía aquí?—eleve un poco mi voz—¿también la rapto? —Para nada, ella era la esposa de Michele—contestó y mi quijada casi de cae de la impresión, ¿había estado casado? —¿Que?—me senté— pero.. ¿qué pasó?— —Espera, creo que tengo una foto—dijo mientras buscaba en sus cajones—aquí está, ten.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Se veían felices—dije mientras veía la fotografía— —Más que eso, eran la pareja perfecta—contestó— Algo en mi se movía, no me sentía cómoda viendo esto. Sabiendo que ella estaba aquí.. —¿pero?..— —Sara lo dejo— —¿Por que?—pregunte aún más curiosa— —Michele no puede tener hijos—soltó— —¿Que?— —El que ella lo dejara desencadenó su ira, sacó lo peor de él—paró de contarme— vaya —Quiero saber más..— —No por hoy. Debes alistarte—beso mi frente— y yo llevar las flores.
Hayley
Llegue a mi habitación, no sabía que usar hoy. El hecho de que ella estuviera aquí me hacia sentir un poco incómoda. —Así que tú eres Hayley.—Sara... —Hola.—voltee a verla, era hermosa.— —Linda habitación, también fue mía un tiempo—contestó tocando las paredes —Eran muy unidos—solté de golpe sin pensarlo —Más que eso—sonrió—éramos perfectos —Pero lo dejaste ir—¡contrólate Hayley! Sara me miro, su mirada había cambiado totalmente. —Tu no sabes de que mierda hablas— —¿Todo bien?—Mario interrumpió nuestra discusión —Si, Mario—contestó Sara— —El sr Morrone me pidió que estén listas en una hora—dicho esto de retiro y Sara detrás de el Maldita sea. Comencé a aventar todo lo que había cerca de mi —La ultima vez que hiciste eso alguien salió lastimado—Miki.... —Hola..—sonreí al verlo y corrí a abrazarlo—. —Ouch—me aleje un poco—tranquila no es nada. Sigue un poco fresca—. —Me siento una tonta al haberte lastimado— —No pasa nada, estoy bien—tomo mi mentón y me dio un beso corto en los labios— —No esperaba eso—susurré cerca de él— —Alístate, vino tu amiga por cierto—se acercó al marco de la puerta para irse— —Espera.. ¿una amiga?— —Carla.—
