Avatar, una nueva era (SA 2º)

Capítulo VIII

Yue:

- Paciencia Tenzin, ya llegaré a eso - con eso mi tío solo se enojó más, pero él lo ignoró y siguió hablando con Korra - como habrás escuchado, formé una fuerza especial para acabar de una vez con la revolución y quiero que te unas a ella.

- ¿En serio?

- ¿Qué? - preguntamos tío Tenzin, Kuzon y yo.

- Necesito a alguien que pueda atacar a Amon directamente, alguien que no tema enfrentar el peligro... y ese alguien eres tú.

-¿Unirme a su fuerza especial? No puedo - dijo aún más desanimada a lo que todos la vimos sorprendidos.

- Debo admitir que me sorprendiste, pensé que te gustaría la idea de unirte a mí para detener a Amón.

- Yo también - dijo tío Tenzin, allí Korra me vio pidiendo ayuda.

- Korra vino a la ciudad para terminar su entrenamiento como Avatar con mi tío - dije intentando sonar respetuosa - creo que lo mejor es que se concentre en ello.

- Y es por eso que esta oportunidad es perfecta, estaría adquiriendo experiencia mientras cumple su deber de Avatar con la Ciudad.

- Ser el Avatar es más que perseguir a delincuentes, Concejal Tarrlok - dijo Kuzon apoyándonos - además Korra ya te dio su respuesta.

- Ya escuchaste a Korra y a mis sobrinos, así que es hora de que te vayas.

- De acuerdo - dijo poniéndose de pie para dirigirse a Korra - pero no me voy a dar por vencido aún, sabrás de mí pronto... ha sido todo un placer Avatar Korra, Príncipes del Fuego.

- Concejal Tarrlok - dijimos a modo de respeto mientras se dirigía a la salida.

- Adiós hombre de las colitas - se despidió Ikki a lo que sonreí victoriosa antes de ver a Kuzon preocupada.

***

Era un nuevo día y estaba haciéndole a Korra una demostración de aire hasta que llegó Bolin con Pabu, su mascota.

- Hola compañera de equipo, saludos princesa Yue - dijo lo último haciendo una reverencia.

- Hola Bolin - dijo Korra desanimada.

- Hola... y Bolin, sigue tratándome como lo has hecho hasta ahora.

- Claro, por cierto no las vi en toda la semana... ni para entrenar ni para sermonear a Mako.

- Sí, lo lamento mucho.

- Bueno está bien, de todas formas quedaremos fuera del torneo porque el dinero no nos caerá del cielo para mañana - dijo antes ve abrir los ojos como platos - un momento... ¡Yue! ¡Eres una Princesa del Fuego!

- ¿Y?

- Y que Kuzon y tú pueden pagar nuestra inscripción.

- No - dijo una voz y vimos a mi hermano - no podemos hacer eso.

- ¡¿Qué?!

- Solo no podemos y punto - dijo molesto antes de irse.

- Perdónalo Bolin, estuvo así desde la revelación de los Igualitarios... y no podemos darles el dinero porque al ser Nómadas Aire, tenemos que desprendernos de nuestros lazos terrenales y eso incluye el dinero de la familia de mi padre.

- ¿Quién inventó esas reglas? - preguntó siendo dramático.

- Los monjes, obviamente - dije viendo en dirección a donde Kuzon se fue - fue un gusto verte Bolin.

***

No vi a mi hermano en la cena y en casi todo el día. Cuando estaba por darme por vencida con él, lo vi irse al risco, suspiré frustrada antes de ir con él.