Ya había pasado un tiempo desde el incidente de Kao el cual había sobrevivido gracias a que Gulf intervino en aquel pequeño “castigo" que Mew le había dado, Mew pensaba matar al ángel pero por preticion de Gulf que le puso ojitos de perrito atropellado no pudo resistisce a esos ojitos color miel y al tierno puchero que el menor le había hecho así que derrotado dejo que Kao regresara al reino de los ángeles fallando en la misión.
-¿Cómo mierda es posible que no hayas podido traer a mí hijo?, Era una maldita misión de lo más fácil del mundo- dijo Zee furioso porque su más fiel y mejor soldado habia fallado en la misión.
-¿Misión fácil dice?, Perdoneme majestad pero casi muero de no aver sido por su hijo yo no estaría aquí contándole esto- dijo el moreno que estaba recostado en la cama mientras sus heridas curaban.- Oh y por cierto el demonio dijo, que si alguien se interponia en su camino lo mataría porque no dejaría que nadie se acercara a Gulf-. Dijo esto y Zee salió de la habitación hechando fuego.
Reino del inframundo.
Mew y Gulf estaban en el jardín del castillo teniendo un picnic pasándola bien hablando muy amenamente sobre temas sin sentido pero cualquier cosa por no dejar morir la conversación y en tonces quedaron un momento de silencio que fue rompido por una de parte del demonio.
-Te gustaría que diéramos un paseo por el cielo- pregunto viendo como el ángel lo miraba confundido.- Ah, me refiero a que si quieres extender un poco las alas, ya sabes volar.- y fue cuando el pequeño ángel comprendió a que se refería Mew.
-Me encantaría, aunque hace mucho no vuelo en mí hogar no me permitían volar por los cielos, siempre debía tener mis alas ocultas- y era cierto al pequeño Gulf no se le permitía volar, ya que sus padres lo regalaban pero al lindo ángel le encantaba romper las reglas y siempre que se escapaba de su casa era para extender un poco sus alas, amaba sentir el aire en la cara amaba volar porque se sentía libre por un momento se sentía feliz.
Con ayuda de Mew, Gulf se levantó del suelo y extendió sus hermosas alas color blanco como la nieve.
-Wow- el demonio quedó embobado por la belleza que podrían las alas del ángel definitivamente se veía aún más hermoso.-Eres tan hermoso pequeño.- dijo el demonio haciendo que el menor se sonrojara y agradeciera con una sonrisa tímida.
-Gr~gracias, mis padres dijeron que mis alas eran las más hermosas del reino y que por eso debía mantenerlas ocultas- dijo en ángel con un deje de tristeza ya que no le gustaba ocultar su verdadero ser.
Mew se quedó pensando por un momento, ¿Que clase de padres tenía Gulf? Esa pregunta rondaba por su cabeza pero la dejo de lado al ver cómo el pequeño ángel se elevaba un poco empezando a volar aunque apenas había separado su pies de la tierra.
-¿Y tú?, ¿No me enseñarás tus alas?- pregunto el menor esperando paciente por una respuesta.
-Oh claro lo siento me quedé pensando en algo- dijo un poco avergonzado cosa que hizo que una tierna risita brotará de los labios del menor.
Rápidamente Mew extendió sus alas, y el menor quedó embelesado al ver el color negro de las alas del demonio, eran muy hermosas ya que la luz de el sol daba en las alas negras del demonio haciendo que se vieran de un tono brillante con un toque de gris.
-Wow, tus alas son hermosas, ¿Pu~puedo tocarlas?- pregunto nervioso y jugando con su manitas cosa que hacía verlo aún más tierno.
-Claro, puedes tocarlas cuando quieras- acercó su ala izquierda al menor que con algo de nervios empezó a acariciar las suaves alas del mayor quedando asombrado sintiendo una suavidad que nunca había sentido.
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El Ángel y el Demonio
RomanceMew Suppasit, rey y dios del inframundo se enamoró de Gulf Kanawut un bellísimo ángel hijo del rey Zee y rey de los cielo. Mew secuestra a Gulf y poco a poco el Ángel estará sintiendo cosas por el pero su padre se entera e intenta separarlos. No ad...