Capitulo 21

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Había amanecido y el resplandor del sol hacia brillar las pieles de aquellos dos cuerpos que yacían dormidos abrazados en la cama.

Mew fue el primero en despertar y lo primero que vio fue a su pequeño y tierno angel durmiendo acurrucadito en su pecho, era la imagen más hermosa que había visto, su pequeño ángel dormido con sus bellas y largas pestañas descansando sobre sus pómulos y haciendo una trompita con sus labios, era sumamente hermoso.

Mew acaricio la mejilla del menor impresionado con su belleza, era lo más hermoso del mundo y no se cansaría de aceptarlo nunca.

El pequeño ángel movió su naricita al sentir la luz del sol en su cara pero se relajo al sentir las caricias del mayor y se acercó más al tacto y casi ronroneo.

-Buenos días pequeño.- Dijo el mayor besando la nariz de su pequeño.

-Mmm hola.- Dijo el menor aún adormecido volviendo a cerrar sus ojitos y acomodarse en la almohada.- Volvamos a dormir por favor.- Dijo abrazando la cintura del mayor.

-Cariño, es hora de levantarnos, debemos desayunar y luego te llevaré a pasear ¿Te parece?.- Vio como el menor abría lentamente sus ojitos y se sentaba en la cama y hacia un puchero.

-Esta bien, pero luego quiero volver a dormir.- El menor intento levantarse pero un dolor en su espalda baja y piernas hizo que soltará un quejido de dolor que alertó a Mew.

-Mi niño ¿Que te pasa?.- Pregunto el mayor llegando hasta el ángel para abrazarlo.

-Me duele mi colita.- Dijo haciendo un puchero.

-Oh pequeño ¿Fui demasiado duro anoche?.- Pregunto besando su cabeza  y acariciándolo.

-Si, me duele todo.- Se hundió en su pecho respirando el aroma del mayor.

-Tranquilo mi amor, pronto se te quitará.- Dijo besando su cabeza.

Mew acariciaba el cabello de su amado mientras tarareaba una canción con su hermosa voz.

-Mew, tu voz es bellísima.- Dijo el pequeño cerrando los ojos para concentrarse en la armoniosa y delicada voz del demonio que sin saberlo le transmitía mucha paz.

-Me alegra que te guste porque mi canto es especialmente para ti mi pequeño ángel.- Mew lo apego más en su pecho desnudo brindandole de su calor corporal.

- Jamás creí que terminaría de esta manera.- El demonio lo miro confundido.

-¿Así como?.- Hablo el peliplata.

-Con un demonio, nunca creí que terminaría enamorado de un demonio, por años creí que quizás terminaría cansandome con un ángel y que sería padre de pequeños querubines volando por ahí.- Rió levemente y miro a los ojos al mayor.- Pero al conocerte y saber lo que hay más allá de mi mundo, todo lo que imaginé siempre solamente deje de imaginarlo y empecé a imaginar una nueva vida, junto a la persona que amo.- Se acercó a los labios de su amado y ambos se fundieron en un beso cálido y lleno de emociones de cada uno.

-Creo que encontré mi felicidad hace mucho y no me había dado cuenta.- Gulf acaricio la mejilla de Mew con amor.

-Te busque por tanto tiempo, mi pequeño, estaba a punto de rendirme pero un día se me ocurrió ver qué pasaba en el cielo y lo que me encontré fue la criatura más hermosa del universo.- Mew beso la nariz de su amado.- Un hermoso chico de alas blancas como la nieve y de corazón puro, y pensé “Es el mi razón de ser", fueron muchas lunas sin ti mi hermoso niño, pero hoy por fin estamos juntos y no dejaré que nada ni nadie nos separe.- Si esto era una promesa entonces era la promesa más hermosa que le habían dicho a Gulf.

Y es que para Mew, Gulf era su inspiración, su razón de sonreír y ser feliz y más que nada, su razón de creer que alguien podía amar a un ser tan maligno como el, Gulf era el ser más puro del universo y Mew era todo lo contrario a su pareja.

A Mew le gustaba hacer sufrir.

A Gulf le gustaban los girasoles.

A Mew le enseñaron a destruir todo a su paso.

A Gulf le enseñaron a proteger todo lo existente porque era un regalo.

Mew nunca recibió amor alguno.

Gulf era el más amado por todos.

Dos almas tan diferente pero a la vez tan iguales por una razón que tenian en común.

Uno necesitaba amor y saber que era y el otro necesitaba brindar amor y enseñar que era el sentimiento que por años había triunfado.

Ambos se necesitaban por igual, para ser felices, aunque Gulf siempre lo tuvo todo y personas que lo amaban siempre sentía aún algo de soledad pero al conocer a Mew eso cambio, todo el amor que Gulf conocia no era nada comparado con el amor que el demonio que lo tenía en brazos le brindaba.

Todo era diferente con Mew, porque Mew era todo lo que sin saberlo siempre había buscado y sin quererlo, lo había encontrado en el momento indicado.

-Hermoso, ¿Quieres ir a tener un pequeño paseo?.- Pregunto el mayor levantando la barbilla de su chico.

-¿A dónde iremos?.- Pregunto levantándose muy animado sin caer en cuenta que estaba desnudo, cosa que hizo que la mente de Mew se descontrolara y se imaginará cosas que no diría en voz alta.

-Pues iremos a dar un paseo al bosque, te gustara, hay un lugar muy especial que me gustaría mostrarte.- Dijo un muy nervioso Mew ya que al ver la imagen de la perfecta figura de Gulf, sin quererlo tuvo un pequeñito problema entre sus piernas.

-Ya quiero saber que es.- Dijo dando pequeños saltitos haciendo que la mente del mayor fuera un solo caos.

Mew solo asintió y vio al menor ir al baño casi corriendo y cuando quedó solo en la habitación suspiro y levanto la sábana con la que estaba tapado y pudo ver a su amiguito muy despierto.

-Mierda, debo aprender a controlarte.- Dijo viendo su erección pero sonrió.- No cabe duda que por fin encontramos a nuestro chico.- Sonrió y fue hacia el otro baño de la habitación para darse una ducha fría y bajar el calor de su cuerpo.










Mew no controla a su amiguito xd.


Bueno, hola a todos, si soy yo, estoy viva todavía y ya volví.

No tenía inspiración banda, pido perdón pero ya volví a actualizar UwU.

Los quiero.

El Ángel y el DemonioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora