_No seas!

QUE???

Al final fueron directo hacia el sonorense, México ya estaba imaginado lo peor una nueva grieta, un pedo con los vecinos de arriba.

Tan centrado se encontraba que no noto que ya habían llegado, al portón de la hacienda del sonorense, su guardia quien era el piloto lo miró confundido, esperaba respuesta alguna de su copiloto pero nada, pasaba la mano frente a los ojos del mexicano mientras la movía de un lado a otro.

Así que dirigió su mano a uno de los muslos del mexicano.

Por otro lado Sonora se encontraba nervioso a más no poder, su hogar estaba en condiciones horribles, los sillones que tanto presumía.. desgarrados, sus libreros bien ordenados con zarpasos, quería llorar de la frustración, ni hablar de su cocina la comida regada en todas partes.

-Ahora que le servire a mi padre y sus acompañantes-

(dijo mientras miraba a los culpables de esta masacre.)

Ellos solo lo miraban con ojos de cachorros, quería pero no podía enojarse con ellos, en efecto los culpables eran las mascotas del amado México.

Retrocedamos unos días atrás México le había pedido a Sonora que cuidara a sus bendiciones en lo que regresaba de China, Sonora no pensó mucho en las consecuencias de su desicion, tampoco noto que sus hermanos no querían cuidar a las bendis por lo pinchi desmadrosas que eran.

(Ya las habían cuidado antes algunos terminaron peor  que otros).

Para ellos las bendis de México eran desastrosos cuando se despedía de estas, solo recibían órdenes de México y de algunos otros estados con los que habían convivido desde su nacimiento, pero igual se las pelaban enterita y eso que no estaba cuidando a todas las bendis.

Volvamos con México

BAAAM•
-Era puro pedo wey-
gritó el mexicano voltiando hacia la ventana para percatarse del felino que golpeaba la puerta del carro.

-Jats'uts-
dijo el mexicano, bajando del auto para luego dedicarse a acariciar a su pequeña bestia.

-Tan rápido te olvidas de mi, no te bastó con eso para dejarme con las ganas-

Un pequeño inconveniente interrumpió su momento

-Actuare como si no hubiera escuchado esa mierda-
dijo Sonora con raspones por sus brazos y piernas.

-Que paso hijo?-

-Que no pasó jefe.... mejor se lo muestro-

Entraron a la mansión del sonorense, y encontraron un desastre, felinos mordiendo algunos cojines, otros dando zarpazos al suelo un total desastre....

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