Su historia.

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A la mañana siguiente, Avery se quedó dormida y llegó a la segunda clase entrando por la puerta grande, con el pelo echo jirones en un moño despeinado, unos vaqueros negros con rotos y una camiseta vieja y los libros sobre sus brazos y se sentó sin dirigirme la mirada y así estuvimos las próximas horas, pero no iba a durar, yo no podía mantéeme alejado de ella, ni ella de mi, tenía que hablar con ella, intentar ser amable, aunque me costase, ni por muchos amigos que tenga, nadie cambiara esto, no pueden cambiarme, ni cambiarlo. Al salir de las últimas clases de por la tarde, la llamo porque si y se queda petrificada, solo puede mirarme con esos ojos que me van a a robar el corazón, porque yo lo sé, pero no digo nada...
—Hola Av, ¿que tal te ha ido desde la última vez?
—Buenas tardes, Carson, he estado bastante liada con las asignaturas y poniéndome al día y aprendidome mis horarios y todo, es todo un tremendo lío.
—Siempre eres tan... así ?
—Me gusta ser ordenada, no tiene nada de malo
—Perdona por haber sigo tan grosero contigo, se que no te creerás nada de mi, pero podemos...
—¿Qué? ¿Ser amigos? Carson, ya me estaba yendo muy bien todo, solo quiero que tú no me hagas daño, que el chico guay se cuele en mi vida y lo trastorne todo.
Como hacía con sus deditos guay entre comillas y como sabía que no podía contener la risa con ella, yo tuve razón y ella lo sabe, asique doy mi siguiente golpe.
—Eres mi imán, no me puedo mantener separado de ti
Solo se queda callada y me mira, los labios, la cara, los ojos, los brazos y se que ella siente lo mismo que yo, ¿pero que pasa si no puede ser? ¿Qué será de mi?
—Tú no eres el mío Carson, estabas muy equivocado, me puedo mantener muy alejada de ti, porque solo me haces daño y me tratas mal, mientras a la gente de tu alrededor son como personas especiales,  yo soy...
Me acerco a ella y no se puede mover, solo me mira con desesperación porque quiere que de el siguiente paso, pero no lo voy a hacer,  intenta alejarse y le agarro de la muñeca, no con fuerza, sino con determinación, para que sepa que si ella se va, no me queda nada, esta vaciando todo lo malo que tengo por dentro y me está convirtiendo en lo que quiero ser por ella, lo que ella se merece. Solo puedo hacerlo por ella.

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