"A Love In Nevada࿐MC"

V

Deimoss abría lentamente sus ojos, sentía una terrible cantidad de dolor. Al abrir por completo sus ojos, vió al frente suyo a Doc, quien sostenía un iPad con su mano izquierda; esté, con su dedo índice, presionó algo en la pantalla del aparato, las cadenas que atravesaban el cuerpo de Deimoss desaparecieron, dejando unos sangrantes hoyos en su piel.

-Doc...¿Dó-dónde está Sanford? - preguntó Deimoss, con dificultad. El pedazo de piedra que usaba de mandíbula no le dejaba hablar muy bien.

Doc sólo lo ignoro, se dirigió a su camioneta para sacar un pequeño botiquín.

-Eso dolió demasiado...fue terrible!

Doc saco unas vendas y una jeringa que contenía el líquido de adrenalina, empezó a vendar las heridas de Deimoss mientras lo escuchaba relatar todo lo que le pasó en el purgatorio. Cuando terminó, tomó la jeringa entre sus dedos y le inyectó aquel líquido blanco en el pecho, haciendo a Deimoss temblar bruscamente por unos segundos, parecía que aquellos hoyos en su piel habían desaparecido. Ambos se subieron a la camioneta y fueron en dirección al edificio de la organización A.A.H.W.

Meanwhile in Nevada

Sanford y Hank salieron como pudieron de aquel agujero que Auditor había provocado en el suelo luego de combinarse por accidente con el payaso Tricky, habían estado peleando con pequeños y ágiles esqueletos que habían salido del cuerpo de Auditor, estos no dudaban en atacar a Sanford y Hank. Sanford, en media pelea, no podía dejar de pensar en Deimoss; había quedado estupefacto luego de ver el cuerpo muerto de su pareja tirado en el suelo, tenía múltiples agujeros gracias a las balas que había recibido después de que el ahora Mag Hank, lo haya usado de escudo contra los agentes luego de salir del laboratorio.

Cuando salieron, Mag Hank tomó con su mano a Sanford, quien ahora era relativamente pequeño, puesto a que Hank había aumentado de tamaño al recibir ese cuerpo nuevo. Comenzaron a correr en dirección a los secos pastizales.

Doc manejaba tan rápido como podía, Deimoss asomaba parte de su cuerpo por la ventana y, con una arma de fuego, le disparaba al carro que manejaba detrás de ellos, estaban disparandoles a la distancia, por suerte, Deimoss alcanzó a darle con dos balas a las llantas, haciendo que ese carro enemigo derrapara y se golpeara contra algunas grandes piedras. Al parecer, los agentes que estaba dentro del carro resultaron heridos por eso.

Mag Hank notó a la distancia la camioneta, empezó a correr lo más rápido que pudo hacia esta, ya había dejado medio muerto al payaso Tricky combinado con el Auditor, realmente, ya no le importaba, quería salir de ahí de una vez por todas.

-¡DEIMOSS! - cuando ya estaban a unos pocos metros de la camioneta, Sanford, quien aún estaba entre la mano de Hank, notó a Deimoss; sintió una inmensa cantidad de alegría al verlo, aunque claro, luego de ver aquellas piedras en su mandíbula y manos su sonrisa se borró.

Por fin, después de tanto correr, habían llegado a la camioneta. Hank bajó con delicadeza a Sanford de su mano para ponerlo en el suelo. Deimoss salió de golpe de la camioneta para dirigirse hacia estos dos.

-Sanford, por fin estás conmigo! - dijo Deimoss feliz, dándole un gran abrazo a Sanford, quien aún estaba confundido por el nuevo aspecto que tenía. Era raro.

Una explosión en el alejado edificio de la organización enemiga interrumpió todo; al escucharlo, todos entraron veloces a la camioneta, Doc aceleró y fueron en dirección a la guarida.

Un rato después, llegaron a la guarida. Doc llevó a Hank a su "consultorio" para darle una pequeña examinación a su nuevo cuerpo, dejando a Deimoss y Sanford solos afuera de la guarida.

-Sanford, no sabes lo mucho que me alegra ver... - Deimoss fue interrumpido por un abrazo de parte del nombrado.

Deimoss se sorprendió al sentir algo húmedo en su hombro, Sanford había empezado a llorar recargado sobre él. Las cálidas lágrimas caían directamente en las telas de la ropa de Deimoss, esté no sabía cómo reaccionar.

-O-oye no llores, ¿Qué te pasa?

-Eres imbécil?! ¡En serio, pensé que te había perdido!

Deimoss sólo suspiró y le correspondió el abrazo, sus manos de piedra raspaban un poco contra la piel de Sanford pero parecía no importarle. Seguía llorando en silencio sobre su hombro, a pesar de que Deimoss no sabía muy bien cómo consolarlo, hacía lo que podía para que dejase de llorar.

Y así duraron unos cuantos minutos. Luego, fueron juntos adentro de la guarida para que Doc revisará la mandíbula y manos de Deimoss. Por otro lado, dijo que ese cuerpo no sería permanente para Hank.