Musa: IV

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Viernes por fin. Después de una larga noche haciendo una casi infinita cantidad de tareas, había llegado el día que Deimos tanto esperaba; el día en el que vería a aquel talentoso joven que tanto llamaba su atención. Estaba impaciente.

Hacía garabatos en su cuaderno sin darse cuenta. Estaba totalmente perdido entre los nervios. Era raro, al menos para él.

[...]

Después de un lapso de 5 horas, el cantar de la campana inundó toda la escuela. Ya podían salir a receso.

Deimos guardo sus cosas en su sucia y vieja mochila y fue rápido a la cafetería.

Ahí estaba Deimos, sentado en una de las mesas al fondo mientras veía directo a la entrada, esperando a que Sanford apareciera y así fue, prendiendo un lindo sentimiento de felicidad en su pecho. Agitó su mano derecha al aire, dandole señal a Sanford.

—Hola, Deimos —, saludó Sanford amablemente. —Me da gusto verte.

—Sí, a mí igual.

Al principio, había un incómodo silencio entre ellos. "Debo iniciar una charla con él, ¿No?"

—Y ¿Cuál es tu álbum favorito de RadioHead? La otra vez no me dijiste eso —. Preguntó Deimos.

—Bueno...todos son geniales para mí, pero me gusta más Kid A.

Así inició una amistosa charla entre ellos sobre el mismo tema de la vez en el autobús. Sanford parecía feliz hablando del tema, algo que le gustaba al contrario.

Luego de un rato hablando, Hank y Doc se acercaron a la mesa.

—¿Y éste? ¿Quién es? —. Preguntó Doc, no muy amistoso que digamos.

—Soy Deimos, es un gusto conocerlos —. Deimoss notó como Hank no apartaba su vista de él.

—¿Por qué eres tan...bajito? —. Preguntó Hank, tratando de no caer en sus propias palabras.

Deimos le dió una cara enfadada en respuesta; siempre le molestaban con su estatura, y aunque estaba un poco acostumbrado, aún le fastidiaba.

Ahora, los 4 chicos estaban juntos hasta al fondo sólo platicando. Parecían llevarse bien, la charla iba bien y era entretenido.

[...]

Ya había llegado la hora de salida. Deimos y Sanford caminaban juntos.

—Oye, disculpa lo que Hank te había dicho esta mañana. Es un poco raro, alguna veces —. Mencionó Sanford. Obviamente se ahogaba la risa al recordarlo.

—Neh, no hay problema. Siempre me dicen esas cosas —. Deimoss le dió un pequeño golpe en el hombro a Sanford al notar como se ahogaba la risa. Todo un tonto.







Feliz día del Madness, gente linda <3.

&quot;A Love In Nevada࿐MC&quot;Donde viven las historias. Descúbrelo ahora