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Querido diario.

Todo este tiempo fue como estar volando.

Y ahora la caída, fue más dura de lo que podría imaginar.

Las pesadillas aumentaron y en consecuencia las horas de sueño se redujeron.

Hoy rompí un espejo, no podía soportar mi reflejo.

Fue como volver al inicio.

Era como volver a sentir el dolor de ese día.

El sonido de una bala.

Las palabras que me marcaron.

El dolor que nunca se irá.

Durante años creí que ya había tocado fondo.

Pero me equivoqué.

Porque ahora sí que estoy tocando fondo.

Un Diario PerdidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora