Capitulo 4

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Viernes 13 de julio 2018

Habían ya pasado unos días desde que hablé con Mia, aprendí más de ella, sobre cómo era y que le gustaba, hoy iremos al karaoke de Patrick, el primo de Matteo, quien felizmente acepto abrir el karaoke este viernes.

-¿Estas nervioso? - preguntó Matteo desde el otro lado del teléfono.

-Claro que no.- mentí

-No te creo- respondió

- No necesito que me creas- afirmé

-Como quieras, solo te informo que te conozco y sé que estas nervioso en estos momentos.

- ¿Y si lo estuviera qué?

-Viste, sabía que estabas nervioso y eso demuestra que te importa la chica o te tomarías esto a la ligera, la conoces hace menos de una semana y ya cambiaste- dijo en tono divertido provocando que ruede los ojos.

Admito que Matteo tiene razón, aunque no es que yo cambie a propósito, es algo inconsciente el querer que todo salga bien con respecto a la chica de la feria.

-Llamaste para decirme algo que ya sé o dirás algo más- espeté, si estaba nervioso Matteo me puso el doble.

Últimamente mis nervios eran más grandes sin razón alguna, no solía ponerme nervioso con casi nada y ahora me pongo nervioso por casi todo.

-Relájate solo llamaba para decir suerte- dijo tratando de calmarme.

-Bueno gracias y si eso es todo te cuelgo, debo ir salir de una vez si quiero llegar puntual.

-Está bien señor puntualidad, adiós.

-Adiós- me despedí.

Corté la llamada para arrancar la moto y dirigirme a casa de Mia, en el camino pienso en como saldrán las cosas, habían dos posibilidades: A Mia le agradaba el lugar y la salida haciendo que salgamos más seguido y sigamos hablando o Mia termina odiándome y nunca más me habla .

Eran las 5:00 pm cuando llegue a su casa y estaba tocando la puerta de Mia esperando no haberme equivocado de lugar.

-Alex! - saludó Mia con una sonrisa y algo de sorpresa, supongo que no esperaba que fuera tan puntual.

-Te ves muy linda- opiné al verla.

-Te lo agradezco, tu igual te ves bien.

-Gracias, bueno si ya estas lista podemos ir al karaoke.

-Ma! ¡ya me voy! - gritó adentro de la casa para avisar que ya estaba saliendo de casa.

Ambos subimos a la moto y Mia se sujetó un poco fuerte, supuse que era porque tenía miedo de caerse o de que yo maneje como un demente, por lo que le hable para que se calmara.

-Tranquila no dejare que nada te pase mientras estés conmigo.

-Gracias- dijo un poco más calmada -No es que quiera desconfiar de ti como conductor ni nada, pero podías ir un poco más despacio- pidió.

-Claro- acepte su petición.

Baje un poco la velocidad, a pesar de que no me gustaba manejar lento no quisiera que Mia se sienta mal o incomoda.

-Gracias.

Luego de eso ninguno dijo nada en el camino, y aún faltaba mucho para llegar así que decidí romper el silencio.

- ¿Por qué querías ir al karaoke?

-No lo sé, jamás he ido a uno y quisiera intentarlo ¿y tú?

-Lo mismo, aunque nunca he ido a uno no porque no pueda, sino que no me agradaba mucho la idea de cantar delante de muchos desconocidos y más si cantaba solo.

La Chica De La FeriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora