❝¿De verdad crees que te dejaría?❞
❝Eres mi vida, pero si no quieres permanecer a mi lado, estás en todo tu derecho de alejarte❞
❝Eres un idiota, Sasuke, jamás te dejaré, te amo❞
Yuichiro podía sentir a los clones tras de ella, a una distancia prudente, pero aún así le estaban provocando nervios, eran cerca de dos y le estaban dando alcance.
Sospeso unos segundos en sí acabar con aquellos o seguir escapando.
Según lo que recordaba de Orochimaru, los clones de sombra recopilaban todo lo que veían como si se tratara de una cámara, memorias que iban directo a quien los creó, los clones de sombra eran una copia sólida, sólo una persona con gran cantidad de chakra podía mantenerlos, es decir, una persona potencialmente peligrosa.
Acomodo bien la capa a manera de que su cara no fuera visible, volteo y con su katana, a una velocidad impresionante, se deshizo de los clones.
Sucedió algo extraño.
Yuichiro soltó un jadeo cuando de pronto, apareció en un lugar lleno de pilares de roca, reconocía ese lugar, solo ella podía llegar ahí, no pudo evitar sentir algo de temor.
No cualquier persona tenía ninjutsu espacio-temporal, sólo oponentes formidables.
Tensó sus hombros y sacó su katana, además de activar su mangekyo sharingan.
—Yuichiro.
Volteó con lentitud, observo al enmascarado, le daba cierta sensación de familiaridad por su cabello.
—¿Quien eres?
—¿No me recuerdas?
—¿Debería? —lo apuntó con su katana —Habla ya.
—Mejor... Voy a mostrártelo.
Lo último que la azabache logró ver, fue el destello escarlata proveniente del interior de aquella máscara naranja.
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