❝¿De verdad crees que te dejaría?❞
❝Eres mi vida, pero si no quieres permanecer a mi lado, estás en todo tu derecho de alejarte❞
❝Eres un idiota, Sasuke, jamás te dejaré, te amo❞
El azabache tomó silenciosamente las llaves que Naruto había dicho que estarían en la planta justo a un lado de la entrada.
Abrió la puerta y cerró tras de si.
Trago saliva inaudiblemente, inhalo profundamente y pudo sentir el olor de Yuichiro. Un sutil aroma a lavanda mezclado con árbol de té envolvía el ambiente.
Caminó a paso lento, sabía donde estaba ella por su chakra.
Subió al segundo piso, pudo ver una figura recargada en el marco de la puerta al balcón.
—¿Yuu?
Ella no contestó.
Si, estaba dormida.
Ya era de noche y el aire estaba fresco, Sasuke deseó que no pescara un resfriado.
Encontró rápidamente la habitación de Yuichiro, agradeció haber aceptado las insistencias de aquel cabeza hueca sobre aceptar un brazo hecho de células de Hashirama. Con el mayor cuidado del mundo, la tomó en brazos.
Ella se acurrucó.
Sasuke entró a la habitación de Yuichiro y la dejó sobre la cama, se percató de que ella lo había sujetado por la capa.
—No te vayas... —murmuró la chica en cuanto dejó de sentir aquella calidez.
—¿Te desperté? Lo siento.
Esa respuesta fue suficiente para hacer abrir los ojos de golpe a Yuichiro, ella se sentó rápidamente casi golpeando al contrario, por suerte alcanzó a retroceder.
—¿Sasuke? ¡Sasuke! —exclamó tirándose sobre él.
—¿Que paso con tu orgullo que tanto protegias? —cuestionó tomándola por las mejillas, ella tenía los ojos cristalizados.
—Kakashi-sama me lo sacó a coscorrones —respondio con una risilla temblorosa.
El azabache no pudo evitar reír.
—¿Así de cercanos se volvieron?
—Yo solo seguía a Sakura-san, ella dijo que quería traerme con ella por mi conocimiento en otras hierbas que ella desconoce, tenemos distintos métodos para sanar, estábamos en el hospital o fuera de él, pero siempre nos topabamos con Naruto-san o Kakashi-sama.
Sasuke depositó un casto beso sobre la frente de Yuu, ella estaba colgada de su cuello.
—¿Me extrañaste mucho?
—Mucho —murmuró.
Al parecer de Sasuke, Yuichiro estaba actuando realmente diferente a la Yuichiro usual de semblante casi siempre serio, esta, parecía un cachorro.
Y le gustaba aún más saber que aquella mujer de fachada tan fría frente a los demás, era tan dulce con él, acarició la mejilla de la chica con sus pulgares, ella lo miró fijamente.
—¿Sabes que soy muy impaciente?
—Si.
—Tardaste mucho en aparecer por aquí, Uchiha Sasuke.
—No volveré a irme ¿Tú te quedaras a mí lado?
—Por supuesto —jaló por la capa a Sasuke, este cedió rápidamente, intencionalmente lo hizo quedar entre sus piernas.
—Primero debo ducharme.
Yuichiro bufó soltandose, cayó directo a la cama.
—Esta en esa puerta de ahí —la señaló —¿Tienes ropa?
—Si —respondió.
Yuichiro pensó rápidamente que al día siguiente, habría ofertas, afortunadamente.
—¿Ni un beso de reencuentro? —preguntó, casi quejándose la azabache.
Sasuke sonrió a medias, se puso sobre ella y la besó con lentitud.
Sus labios hicieron un leve ruido al separarse.
—¿Contenta?
—Solo apresurate a-
—¡Sasuke-teme! —se escuchó afuera de la casa.
—Yo le abro —musito Yuichiro parándose de un salto con una leve sonrisa.
Sasuke la observo salir con una pequeña sonrisa.
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