Capitulo XXV Parte I

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Emma recordaba perfectamente el día que se había enamorado de Lance, estaba en su entrenamiento de futbol femenino, estaba sudando demasiado, agotada de tanto correr, sintiendo que sus pulmones iban a desvanecerse si no tomaba un trago de agua. Cuando el entrenamiento se termino, fue corriendo a su bolso y estuvo cerca de gritar al no encontrar una botella, cuando alguien se le acerca extendiendo una de color roja, alza los ojos encontrándose con un par de ojos color miel y una sonrisa. Lance era bastante reconocido en la escuela como capitán de Lacrosse, pero pocas veces habían cruzado mas que una mirada en el pasillo.

Y desde ese momento, ambos comenzaron a pasar mas tiempo juntos. 

Su primera cita fue demasiado cliché, pero eso no importaba porque le gustaba estar con Lance, era atento con ella, había estrechado sus manos y entrelazado sus dedos. Había pagado las entradas y la rodeo con su brazo en las películas, se robaron un beso en la oscuridad y la acompaño a la puerta de su casa. Y ahí comenzó a cambiar todo. 

Lance era tan atento con la madre de la chica, haciéndose amigo de su mejor amiga de la niñez, que no se dio cuenta en que momento comenzó a distanciarse del resto del grupo. No noto en que momento dejo el deporte que tanto le gustaba porque Lance se lo dijo, no supo en que momento comenzó a usar mas faldas porque dijo que le quedaba mejor que los shorts, tampoco se dió cuenta que empezó a ser mas amiga de las chicas de las porristas que en sus propias compañeras de futbol con la que actualmente no se cruzan ni miradas en los pasillos. 

Se convirtió en el pequeño y hermoso trofeo de Lance, pero nunca se dio cuenta. La noche que ocurrio lo del video, ella se vio tan cegada en sus palabras, que cuando tuvo conciencia se sintió tan estupida "Es Murphy, es tu mejor amiga Murphy la que conoces desde los cuatro años, ¿enserio crees que se meteria con alguien como Lance?". Y aunque en el primer empujón o en el primer arranque de ira, Emma no hizo nada, no fue hasta que la cosa se puso demasiado grave que corrio a los brazos de aquella amiga de la infancia. 

Sabía que no merecía huir a los brazos de Mackenna, ni que ella se los recibiera abiertos. Pero ahi estaba, la pelirroja consolándola, abrazándola ofreciéndole un hombro donde podía llorar, ella tuvo que ser esa amiga cuando sucedió lo del video. Y la verdad, es que nunca le alcanzaría los perdones para Mackenna, y muchos menos para Sadie y Sawyer, los amigos de los que se fue distanciando cuando comenzó a salir con Lance. 

Tardaría en que Sadie volviera a querer ser su amiga, pero lo estaba consiguiendo de a poco, tenía que trabajar demasiado duro y lo haría. Sawyer era otra historia, con Sawyer su corazón no dolía de una terrible forma cuando rebotaba en su pecho, su tacto era cálido y cuidador, y la quería, pero ella nunca lo notó. Pero no se cerraría a volver a amar, no se cerraría a alejarse de sus amigos, no quería cometer ese mismo terrible error. 

Lance hizo todo un espectáculo en la escuela, cuando Connell Johansson aparecio para defender al grupo, y Emma lo observó en silencio. Era atractivo, debía admitirlo, con ese aura de misterio y sonrisas coquetas. Y aunque se sentía sumamente agradecida de que la haya ayudado con Lance, sabía que mucho tenía que ver con que el castaño empujo a Murphy. Y en los ojos del rubio se vio aquella determinación "nadie va a lastimar a Murphy". 

Y los tres se metieron en problemas, y todo paso tan rápido que no tuvo tiempo de agradecerle. 

La ciudad había sido decorada especialmente para Halloween aquel año, donde todos se esforzaban para hacer la casa mas aterradora, donde los adolescentes y niños buscaban con anticipación sus disfraces. Los niños algo aterrador, los adolescentes por lo general algo sexy. Y en Halloween era algo como una tradición meterse en la casa Benson de noche, excepto ese Halloween, porque la casa Benson ya tenía nuevo dueños.

Twisted Lies| [Secrets #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora