☪⃟Hเʝσ ∂ε ℓα ℓᴜɳα🌙

Capítulo 21 ¿Qué pasaría si yo?... 🌿

El mundo que ellos veían estaba tan podrido como las tinieblas que eliminaban, a veces maldecian tener aquellos ojos que les permitían ver la verdad a través de las mentiras, era como ver sombras oscuras con sonrisas falsas, algo desagradable, pero aún así ellos querían salvar aquel mundo podrido ante sus ojos, su misión era protegerlo.

Oberon había regresado al bosque otoñal junto a Arturia, pues quería ver como seguían las cosas haya, fue recibido por las hadas, los caballeros y sacerdotes que se habían quedado a vivir ahí.

Sin duda las hadas lo adoraban, se le acercaban con gentileza, alegres por ver a su rey de nuevo, también recibían a la joven de cabello rubio, pues la habían visto crecer en aquel lugar durante todo ese tiempo, seres que desconocían lo que ocurría haya fuera, era como si vivieran en una burbuja donde Oberon los mantenía a salvo.

Ignorantes de la verdad, de lo que se avecina, de la oscuridad que estaba devorando aquel mundo, Oberon ya tenía un plan, sin duda y sin importar qué daría todo de sí para que funcionará, dejaría que aquel ser sin cuerpo físico lo creará y así por fin acabar con él, ya que como su madre le había dicho una ves este tuviese un cuerpo físico su ser por completo estaría en este, volviéndose un ser capaz de morir.

Era un plan que tuvo que pensar demasiado, pues no tenía que haber fallas, se sacrificaría así mismo para esto, deseaba más que nada que ese mundo siguiera en pie para Arturia, sin importar que ella tuviera que estar en aquel mundo sin él.

De alguna manera su sonrisa brillante había desaparecido teniendo siempre una expresión triste, aún salía a eliminar mors, iba y venía a veces a compañado por Arturia y algunas no, dependía de la situación, además de que el no quería que ella se arriesgara demasiado. Durante uno de sus viajes en el que fue solo para eliminar mors en una ciudadela algo lejana, terminó salvando a una niña, esta al ser huérfana se aferro a Oberon por más que este le dijo que buscará irse a otro lugar, ya que el no quería cargar con una niña pequeña y que pudiera morir por algún descuido de él, al ser una niña pequeña no la veía como a otras personas, de alguna manera se la termino llevando consigo en su viaje, por lo que tardo más en volver al bosque otoñal, eso tenía muy preocupada a Arturia ya que pensó que algo malo le había pasado a Oberon.

Después de varios días Oberon pudo regresar al bosque, llevaba a la menor, quien reía a carcajadas pues Oberon iba jugando con ella, Arturia lo vio llegar y le extraño verlo con una niña, su aspecto le llamo la atención pues los humanos no tenían el cabello platinado, ni ojos de un color como morado claro.

Arturia - ¿De donde sacaste a esta niña? - se acercó a él en cuanto lo vio

Oberon - La salve de unos mors y es huérfana, se aferro a mi demasiado y pues decidí traerla al bosque conmigo, aquí ella estará a salvo - explicó

Arturia - Pero no es humana, ¿o si? - miro a la pequeña fijamente

Oberon - Creo que no... En estos días que he estado con ella e observado que parece más una muñeca viviente o algo así - dijo mientras bajaba a la menor - Nursery porque no vas a jugar con las hadas, ve con ellas están en este bosque, diles que te mande yo - sonrió amablemente

Nursery - Esta bien - salio corriendo en dirección al bosque iba contenta

Oberon - Bueno ahora que se fue... Leí unos libros mientras venia de camino para acá, y al parecer hay objetos que pueden tomar una forma humanoide, en este caso Nursery es uno, se les conoce como objetos malditos que poseen magia, así que pensé que ella era uno, la primera ves que la vi pensé que era una niña humana, pero no se veía como los humanos que solemos ver, no había ninguna sombra repugnante en ella, eso al principio se me hizo algo extraño, pero una ves leí aquello en unos libros lo supe - explicó mientras su apariencia cambiaba

Arturia - Ya veo, yo también pensé que era una niña humana, pero al verla bien su cabello y ojos hace que fuera imposible que lo fuera - miró en dirección a donde la pequeña había ido

Oberon - Al principio no quise traerla conmigo, pero... Sentí que no podía dejarla sola haya a fuera y menos con todo lo que esta pasando - tenía de nuevo aquella expresión triste

Oberon noto como venía a gran velocidad o al menos la más rápida posible para un humano, era Sir Laian que se notaba que iba directo a donde ellos estaban.

Sir Laian - ¡Su majestad!, ¿en que momento usted tuvo una hija? - preguntó

Oberon - ¿Hija? - ladeo la cabeza extrañado y recordó de inmediato a Nursery - Yo no tengo ninguna hija

Sir Laian - Pero vi a una pequeña de cabello platinado y ojos como morados correr en el bosque con las hadas - explicó

Oberon - Nursery es un objeto maldito, ni siquiera es humana y no es mi hija, así que tranquilo - sonrió levemente

Sir Laian - Ah... Ya veo... Lo siento su majestad pensé por un momento que usted... Bueno... De verdad lo siento - dijo apenado, quería que un agujero en la tierra lo tragara ahí mismo

Arturia - Ja ja ja pensó que era tu hija, su cara fue graciosa parecía asustado y sorprendido - río a a carcajadas, estaba evitando reír pero la situación había sido tan cómica que no pudo evitarlo

Sir Laian - No seaasí princesa...

Oberon - He de decir que Arturia tiene razón ja ja ja - río

Sir Laian miro con cierta sorpresa al rey, pues desde hace algo de tiempo ya no lo había visto reír o sonreír de esa manera, le alegro el verlo con ánimos de nuevo, después de eso regresaron al centro del bosque en donde Nursery estaba con las hadas, se veía feliz jugando con estas, al caer la noche todos se reunieron para cenar, la menor había ido con Oberon para cenar, se sentó en su regazo y Oberon la alimento como si fuera el padre de la menor.

Todos habían notado con anterioridad que Oberon solía ser demasiado amable con los niños, y con Nursery no era la excepción, para la hora de dormir Arturia le leyo una historia, Oberon observo aquello desde la distancia, sonrío al ver aquello.

Arturia se veía feliz junto con la pequeña, y es ahí cuando pensó que moriría sin nunca haber tenido una familia, sin saber lo que es amar, pero en el fondo no le dolía tener que desaparecer por un bien mayor, y ahora tenía tres razones por las cuales salvar aquel mundo, por Arturia, por Nursery y por las hadas del bosque, porque es lo que el más quería en el mundo.