Una Dominicana en Nueva York

Capítulo XVI.

Narra Diana

Para superar momentos dolorosos en tu vida, necesitas de algunos pasos a seguir, uno de ello es enfrentar cara a cara el problema, me costaba hablar con él, me dolía verlo frente a mi con esa sonrisa radiante, me costaba verlo y encontrarlo mas guapo y varonil que hace varios meses atrás, pero sabía que lo que más me dolía era verlo esforzarse para recuperar algo que no se si hace rato ya se fue o de eso trato de convencerme.

_____ Bien Roldan, te escuchare, pero no hoy____ Ya esta noche he tenido muchas emociones y me siento cansada emocionalmente_____ Te estaré enviando un mensaje por correo electrónico de cuando, donde y a qué hora. ______ Dicho esto, me dispuse a caminar para salir de la piscina. Empecé a ver por todos lados una manera de salir dignamente, pero no encontraba como hacerlo sin que en el intento no se me vea todo con este diminuto vestido. Sentí la sensación de que tomo mi mano y jalo de ella, su rostro estaba tenso eso hacia que resaltara más su barbilla, sabía que no era la respuesta que el esperaba, pero necesitaba tomar un espacio o lo perdonaría antes de escucharlo.

_____ Puedes salir por aquí____ Me dijo al dejarme frente a unos escalones _____ Gracias_____ fue lo único que le dije, empecé a salir, pero me di cuenta de que él estaba pendiente a cada movimiento, como si temiera a que me fuera a caer. _____ Por cierto, ¿tienes el mismo correo verdad? _____ La pregunta lo saco de onda un rato, al parecer no esperaba que hablase en serio. Tardo unos minutos en contestar y luego asintió.

_____ Pasa una linda noche mi Bela. ________ "Mi Bela" apodo que recibí de su parte hace tiempo ______ Tu por igual pelotero.

Unos pasos se escuchaban cerca, gire la cabeza en su dirección, y ahí estaban ellas, caminando hacia mí, hay que admitir que se veían bien guapas mis primas, pensamiento que hace que sobre en mí una sonrisa inmediata, camine hacia ellas, nos miramos por un rato, esas miradas que dicen mucho, esas miradas que reconfortan sin necesidad de hablar, unidas en medio abrazo caminamos todas juntas, se sentía tan bien no pasar por esto sola, ellas son el soporte que necesitaba.

La fiesta se veía muy bien, pero no era lo que necesitábamos justo en este momento, nos fuimos sin despedirnos de nadie, había llamado a Edgar para que nos fuera a recoger, estando todas en su carro con la música a todo lo que da y las ventanas abajo empezamos a cantar a todo pulmón "30 de febrero de Ha-ash"

_____ ¿De verdad están bien? ___ Pregunto otra vez Edgar, la respuesta era misma, ___ Estamos perfectamente bien.

Antes de llegar al departamento hicimos una parada en Walmart, esta noche era apta para helado, vino y muchas chuchis (comida chatarra o papitas). Las personas nos miraban extraños, no los culpo la vestimenta que teníamos no era típica para ir de compras.

Edgar nos dejo en la puerta del departamento, insistió en pasar, pero esta noche solo nos pertenece a nosotras y para ser honestas ya no estaba tan cómoda con que Edgar me pregunte si estaba bien o si ya había visto a Roldan cada cinco segundos no encontraba sentido a tanta insistencia, pero es mi amigo y se que quiere lo mejor para mí.

Aun con los vestidos puestos encendimos la radio y armamos nuestra propia fiesta en la sala, las gemelas sirvieron el vino en las copas, al estar todas juntas brindamos, brindamos por todo, por nada, por nosotras.

Narra Cris

Después de ver como Lalo le pegaba a Roldan, las gemelas y yo sabíamos que era hora de ir con ella. Estaba muy preocupada por como ella se estuviese sintiendo en estos momentos, pero al llegar con ella verla calmada, verla tan fuerte, verla así me indica que ya no necesita ser rescatada por nadie, pero no nos iremos a ningún lado, por que seremos ese soporte que se muy bien que necesita, ese soporte que nos pidió con esa mirada al encontrarnos frete a la piscina.