Capítulo 31: ¡Vacaciones! (Parte 2)

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Unos pocos segundos más tarde, se escuchó de nuevo el sonido de alguien bajando por las escaleras.

Por suerte, esta vez si eran las personas que estaba esperando.

La primera en aparecer fue Sindy, quien llevaba un trikini puesto.

Esto hacía que llevase la espalda completamente desnuda, y solo dos tiras unían la parte inferior con la superior, dejando el ombligo al descubierto.

Su pálida piel blanca y su figura imponente, resaltada por aquel bañador, me sorprendieron tanto que casi se me olvida hasta respirar.

Ella seguía llevando en el pelo el broche que le regalé, que le permitía estar debajo del sol.

—''¡Vamos! ¡Tú también tienes que venir!''.

—''¡P-Pero salir así...!''.

Ella parecía estar teniendo algún tipo de discusión para lograr que Nicole, que estaba avergonzada, bajase por las escaleras también.

Finalmente, ella logró ganar el forcejeo con su fuerza como Reina de los Vampiros de Oscuridad, y Nicole se mostró ante todos.

Ella llevaba un tankini, que se dividía en dos piezas: las braguitas y un top de bikini con una camiseta sin mangas que le cubría el estómago.

Aunque era la que menos mostraba de todas las mujeres con diferencia, de alguna forma también era la más linda de todas ellas.

—''¡P-Por favor, no me miréis!''.

Ella se cubrió la cara con las manos, pero nadie se estaba fijando en su cara exactamente.

Leo y Elohim salieron de entre el grupo de dioses y se pusieron cada uno a un lado para susurrarme en el oído.

—''Qué suerte tienes, chico. Asegúrate de hacerlas felices''.

Asentí a las palabras de Leo, y Elohim fue el siguiente en hacerme un comentario.

—''Espero que disfrutes de la habitación que he organizado con Imhotep...''.

¡Sabía que esto era un plan de ese Dios cabrón! Aunque honestamente, no puedo decir que me haya molestado...

Tal vez debería darle las gracias incluso, aunque por supuesto, no le daré el gusto a ese maldito alcahuete.

Ahora que ambas estaban abajo, Sindy se acercó a mí y me preguntó con cierta timidez.

—''¿Q-Qué tal? ¿Cómo nos queda?''.

Ellas parecían expectantes por mi respuesta, y yo estaba deseando contestar con una gran verdad.

—''Os veis genial''.

Sindy era una belleza del tipo sensual, mientras que Nicole era una belleza más bien linda y delicada.

Pero sin duda, ambas me alegraban la vista, por lo que, independientemente de su forma única, estaba encantado con las dos.

Sindy sonrió ante mi respuesta, mientras que Nicole se sonrojó aún más.

—''En ese caso, ¡Vamos a la playa!''-Gritó Sindy emocionada.

Ella me agarró del brazo a mí y a Nicole y salió corriendo directa hacia la costa.

Con la fuerza que tenía, ambos íbamos volando como si fuéramos muñecos de trapo, y con su velocidad, llegamos en un santiamén.

Nicole parecía más afectada por el viaje que yo, pero era normal. Ella no estaba acostumbrada a este tipo de velocidades.

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