La Exorcista

Capitulo 13

Antes que nada, jamás pensé que esta escuela tendría tan siquiera azotea. El viento golpea mi piel y me hace cerrar los ojos ante su toque. Las luces de New York opacan el cielo por lo que no veo muchas estrellas, pero esto no es como la cumbre en donde no puedes ver ni el cielo. Ahora comprendo porque entierran a los muertos. Los sonidos de los autos, las personas pasando, una que otra ventisca, son lo que me relaja. Me concentro en mirar solo arriba, porque si miro abajo solo los mirare a ellos.

Mi celular indica que son las 10:09 pm aquí, así que me quedo a esperar unos minutos más. Hace una hora le dije a Carim que había estado investigando y que había descubierto cosas, él dijo lo mismo por lo que le aconseje que nos viéramos en un lugar solo para no ser molestados y el me sugirió este lugar. No se cómo se enteró que existía este sitio, pero la verdad es lo mejor que pudo haber dicho. 

─Es más fresco comparado hace unos momentos─ dice una voz demasiado familiar atrás de mí.

Volteo y levanto una ceja a Carim ─ ¿Tú crees? La verdad, es relajante.

Se encoje de hombros, camina hacia mi mientras busca en su chaqueta algo y me tiende una pequeña bolsa ─ M&M's

─Oh... hacía rato que no probaba de esos─ digo mientras acepto la jugosa cantidad de siete chocolates ─ Así que... ¿Ya habías venido? No sabía que existían escaleras que te llevaran aquí.

─Raven─ dice con una mueca ─Me trajo aquí un rato... no fue muy agradable.

Estoy tratando de reprimir las ganas de reír pero a cambio tengo una sonrisa nerviosa ─ No diré nada, pero en serio que tengo mucha curiosidad─ me limpio el poco dulce que queda en mis manos y me tranquilizo ─Como sea, entonces, soy todo oídos.

─Bueno, según Raven, no ha visto, escuchado, o sentido algo fuera de lo normal. Incluso me atrevo a decir que parece estar en su mejor forma. Sus prácticas son sorprendentes, los maestros la alaban, y por su manera de sonreír veo placer y satisfacción.

─Pero...

─Pero─ traga un chocolate ─ Su aura no está nada bien. Su verde debería ser profundo y suave, pero de repente se distorsiona el color, es como si se esfumara. Y se pone peor... ─ lo miro atenta, parece tomar aire ─Cuando trate de hablar de su prima desparecida o su familia, su aura se disparó como un volcán, pero de una tonalidad obscura y espesa. Y sus ojos, por un momento juro haberlos visto negros. Además, volvió a tocar esa canción.

Me alarme ─ ¿Qué...

─Estoy bien─ se apresura a decir ─Nada que no haya podido manejar. Pero su personalidad era distinta. Su sonrisa...─ parece ser que reflexiona sobre si decirlo o no ─Esa sonrisa era perversa ─ dice de una manera sombría.

Me dejo caer en la pared o mejor dicho barda de ladrillos. Cruzo mis brazos y vuelvo a mirar el cielo nocturno encima de mí reflexionando ─He hablado con los chicos del campus─ menciono ─Según muchos, la relación de Raven y Daphne no era muy buena que digamos... no las veían muy juntas que digamos. Y no porque Daphne no quisiera. Luego de su desaparición, muchos han escuchado en las noches una melodía. De repente no tienen fuerzas ni la voluntad de mantenerse en equilibrio ─entrecierro los ojos al tratar de ver más allá de las pequeñas estrellas visibles ─Todos son iguales. Es como si succionaran todo de ellos. Sin embargo, hoy en día las generaciones son amantes de no hacer nada, por lo que decidí ver más, así que di una vuelta en todo el campus para poder llegar a descubrir si algo más había.

─Porque siento que lo que estas a punto de decir no es nada bueno...

Me enderezo de golpe pero con un rostro inexpresivo ─Vi a un fantasma. El de una mujer para ser más clara. Esta mujer anteriormente era poeta. Al principio no le di tanta importancia, después de todo, los fantasmas, espectros y anomalías es algo ya común en la vida diaria...