TERCERA Y ÚLTIMA PARTE DE "DON'T LET ME GO".
Quería libertad sin saber el costo de ella.
Ya no importa nada, solo quiero permanecer a tu lado, pero si tu vida llega a correr riesgo, no dudes por ningún momento que yo no intentaré salvarte.
No inte...
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Alice junto a Dan observaba el panorama lo suficientemente cerca para el momento en el que entrarán en acción. Había guerreros del Imperio con equipos de maniobras y de acuerdo a sus amigos y Dan; los tenían porque en menos de un año supieron utilizarlos de una forma excelente.
Las explosiones por transformación de titanes ocurrieron, para algunos los primeros que veían con sus propios ojos, titanes inteligentes. Alice observó al titán acorazado y a la titán femenino sin ningún interés por llevar a cabo el plan que tenían.
—Alice—murmuró Dan tratando de hacerla reaccionar.
Todo aquel con equipo de maniobras atacaban a los titanes de Marley. Si Alice aparecía al menos un poco menos de la mitad detendría su ataque.
Pero entrar en pleno campo de fuego era peligro a toda costa, no quería morir, no ahora, no aún que no había asegurado el futuro para su familia y amigos.
La situación se veía cada vez peor, Dan le gritaba a Alice para que saliera y ayudara a tomar el bote volador y transportar a los Azumabito junto a los mecánicos del Imperio.
Ver de nuevo a los titanes de nuevo le recordaban a su pasado de recluta, cuando solo era Alice Idomani de Stohess, miembro de la Legión de Reconocimiento.
Sacó sus cuchillas de su equipo de maniobras tridimensional y disparó hacia el edifico más cercano.
No fue la desesperación y gritos de su guerrera que la hicieron reaccionar, fue ella misma.
Un sentimiento, dentro de ella la obligó a seguir su parte del plan, en lo más profundo de su corazón, Alice también quería evitar el retumbar.
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Uno de los guerreros de la Luna se acercó con la lanza relámpago por detrás de Annie, preparándose para disparar contra su mano que cubría su nuca. Ella lo vio tarde por el rabillo del ojo, le sería imposible detenerlo.
Alguien más lo hizo por ella, pasó veloz como una bala rebanando el cuerpo de aquel guerrero en dos en un solo corte tan limpio, digno de alguien con experiencia con el equipo de maniobras. Se balanceó con su equipo de maniobras hacia uno de los edificios en ruinas, blandió sus cuchillas una vez que estuvo sobre este y volteó ligeramente a ella.
Alice había salvado a Annie de ser asesinada.
Ante su presencia algunos con equipos de maniobras derraparon sobre los escombrosos techos de aquel puerto, los demás obviamente eldianos siguieron atacando a los titanes.
—¡Les ordeno protegerme a mí y a esos dos titanes!—gritó Alice alto para los guerreros.
Sus planes se vieron afectados cuando comenzó a sentir dolor en el pecho y el cosquilleo en su ojo apareció, aquel sentimiento horrible que solo una cosa la podía hacer sentir.
