El Protegido | Aidan Gallagher ✔

15. Muerte en vida

Muerte en vida

Después unas semanas de estar dando vueltas por todo el continente, volvieron a Estados Unidos. Con la autorización del padre de Nicols Rose.

Aidan por su parte estuvo demasiado nervioso por volver. Sentir su cama, tocar sus guitarras de nuevo, que nunca pensó que podía extrañarlas a tal punto de pensar que ya no las volvería a ver. Era entendible por lo que sucedió en las semanas pasadas.

Incluso ya no era él mismo. Había cambiado demasiado, se había dado cuenta de muchas cosas y quería aprender otras más. Y una de esas cosas era pelear.

Aunque había simulado muchas de sus escenas de acción en la serie que protagonizo con sus otros compañeros; nada de eso era real y lo dabas golpes al aire simulando una pelea real.

Él quería aprender a pelear como Nicols Rose lo hacía.

-—¿Estás bien? —preguntó su compañera de viaje.

—No entiendo cómo lo haces —confesó él—. Estar tan tranquila después de todo.

—Uno se hace a la idea de que su vida será así... Al menos la mayoría de los agentes más jóvenes que conozco piensan así...

—¿Y tú?

—Quiero que está sea mi última misión. Ya no puedo seguir con esto, es tan inhumano algunas veces y yo no puedo, ya no.

Simulo comprender su situación, aunque por dentro no podía hacerlo. Sus vidas eran tan distintas que entenderse era mucho más difícil de lo que parecía.

—¿Y el matar? ¿Es difícil para ti?

—¿Lo sería para ti? —respondió con otra interrogante. La cuál podría confundirse con una pregunta capciosa.

—Si...

—Ahí está tu respuesta. Nunca es fácil matar, solo que uno se hace a la idea.

Para ella nunca fue fácil el hecho de quitar la vida, a pesar que cada segundo ella quería perderla en batalla. Lo cual nunca sucedió, hasta el día de ahora. Siempre pensó que en algún momento Elijah querría matarla, eso le parecía por supuesto una excelente idea.

—¿Tú has matado?

Hasta que llegó él.

Sus sentimientos hacían tan fuertes que la idea en su cabeza le parecía aterradora. Porque ya no quería morir, quería vivir, vivir para ella.

—No... —respondió ella—. Cuando tengo que disparar lo hago en lugar donde no pueda asesinar a la persona. Dejo que otro se encargue.

Pero estaría dispuesta a matar a Elijah, por ti. Pensó.

Cuando le dijo a Owen que mataría a Elijah no había dicho ninguna mentira, lo quería muerto. Quería poder respirar sin tener miedo de que sería la última vez que lo haría.

Su vida era una total desgracia. Y ella lo sabía mejor que nadie.

—¿Matarás a Elijah?

Entonces por su seguridad, tuvo que mentirle.

—No... —mintió—. No, si no es necesario —añadió diciendo un poco de verdad.

Asesinar a Elijah, era algo que deseaba su organización, más por el último año que les hizo pasar, en especial a Nicols Rose. Quien no podía dejar de pensar en aquellos momentos, momentos que hizo que su piel se estremeciera.

Pensar en Elijah era como pensar en su más oscuro ser. En aquella maquina que este mismo había creado, capaz de hacer lo necesario y no arrepentirse de lo que había logrado con sadismo y oscuridad completa. Pensar en él la hacia odiaré a sí misma por permitir tantas cosas, por dejar que esa inmensa oscuridad la absorbiera.