⟨⟨ ThorkInktober 2021 ⟩⟩

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Día 10: Cosquillas.

—¡Oye, ese muñeco verde está haciendo trampa! —acusa Loki.

Thor echa un vistazo lejos de su cerveza y le pide los auriculares. El cretino que esté del otro lado escuchará los buenos argumentos de Thor para que deje de jugar sucio en línea. Nadie intenta estafar a Loki y se sale con la suya, no si Thor tiene algo que decir.

—Escúchame bien Murder56, deja de ser un pedazo de.... —Su lenguaje terrestre es algo amplio luego de tantos años en el lugar.

Loki le agradece cuando el asunto está solucionado y continúa con su juego. Thor revuelve el pelo oscuro de Loki en una amorosa caricia antes de marcharse a preparar la cena para ambos.

Hace mucho tiempo, Thor perdió a su madre y, poco después, a su padre; luego estuvo a punto de perder a Loki también. Afortunadamente, Loki acertó la daga en el cuello de Thanos mientras que Banner en su versión verde-enojado y algunos osados asgardianos en la nave se enfrentaron a los aliados del titán loco.

La mayoría de los tripulantes de aquella nave a la deriva sobrevivieron gracias al valor y al trabajo en equipo. Gracias al valor y astucia de Loki, en realidad. Thor aún puede recordar todo y suspirar de alivio, porque por suerte él no perdió a su... esposo.

—Loki, es hora de cenar —avisa Thor.

Pero Loki, con la lengua apretada entre sus labios y los ojos fijos en la pantalla, no le presta atención. Thor se recarga en el marco de la puerta y espera. Mala elección. El Dios del Engaño no se percata de su presencia en ningún momento, incluso luego de quince minutos de espera no hay respuesta del pelinegro.

Thor decide actuar. Se acerca hasta el sitio de su marido y le quita los auriculares de su cabeza, Loki reclama por la interrupción mientras le frunce el ceño. Thor lo toma desprevenido al hacerle cosquillas en sus costados. El pelinegro se retuerce bajo su toque y chilla sus risas, pidiéndole que pare; el rubio sabe que lamentará esto más tarde, cuando Loki reclame su venganza. Pero, bah...

—¡Para! —ordena entre risas, retorciéndose más y más —. ¡Thor, ya, para!

Thor se ríe, tomando en sus brazos al pelinegro antes de sentarlo en un espacio libre sobre la mesa del computador y retomar su castigo. Loki se retuerce estrepitosamente, riendo, llorando y suplicando piedad ahora. Sus caderas rozan las de Thor al contonearse, lo que produce una estimulante caricia en ambos miembros. Thor encierra el rostro de Loki entre sus manos para besarlo apasionadamente cuando la fricción en su pene se vuelve incandescente.

Loki gime en su boca, moviendo más su pelvis contra la erección de Thor. Él comienza a buscar en su cajón de los condones y el lubricante. Desnuda el cuerpo entero de Loki y él ayuda a Thor con su propia ropa, retomando la urgencia de sus besos y caricias después. Luego, Thor aplica una modesta cantidad de lubricante sobre sus gruesos dedos e inicia su camino dentro de Loki.

Loki gime al sentirlo deslizarse en su apretado agujero, pero se relaja con cada respiración y cada beso que comparte con Thor. Cuando tiene dos dedos hasta el fondo, Loki se vuelve un dios muy necesitado. Pide un tercer dedo dentro de sí, empujando más lejos, donde se localiza su próstata. Thor se lo da inmediatamente, porque él cumple cualquier deseo de su esposo.

Luego Loki se inclina y se tumba completamente en la superficie, extendiendo las piernas delante de Thor. Escucha un silbido bajo saliendo de la boca del rubio y el condón deslizándose sobre su erección. Presiona la cabeza de su pene contra su entrada húmeda y Loki levanta los pies, colocándolos en el borde del escritorio, estirándose todavía más. Thor se apoya contra el ardiente cuerpo de Loki, empujando lentamente. Resulta enloquecedor y hace lloriquear a Loki cuando Thor está completamente dentro de él.

—¡Santas Nornas! —jadea Thor, cubriendo el pecho de su esposo con besos delicados, esperando a que Loki se acostumbre a la intrusión.

Loki exhala varias veces con fuerza, controlándose a sí mismo antes de gemir.

—Muévete. Muévete ahora —dice él, tomando el rubio rostro de Thor y arrastrándolo hasta su boca.

Loki puede verlo mientras su polla se desliza dentro y fuera de él. Thor se lame los labios como si la vista le resultara estimulante. A pesar de que llevan bastantes años de casados, puede ver el deseo de Thor por él, su piel enrojecida y cada vez más sudorosa mientras golpea su culo, y Loki ama cada segundo.

Thor lo recuesta completamente en el escritorio, haciéndolo encorvar y besándolo con imprudente abandono. Loki hunde sus uñas en los omóplatos del rubio, queriendo marcar el hermoso cuerpo de Thor, y él suelta un gruñido salvaje mientras empuja con más fuerza. Thor levanta las largas piernas de Loki, enganchándolas sobre sus hombros, y el pelinegro gime ruidosamente. La fuerza de sus empujes largos y profundos llevan a Loki hacia el borde del escritorio, así que él estira la mano y se sujeta para quedarse en ese lugar.

—¡Ah, Thor! Justo ahí, oh, justo ahí —grita, corcoveando ligeramente ante el placer.

Thor continua con su ritmo, incluso hace girar sus caderas para encestar estocadas más potentes y profundas, haciendo que el mundo de Loki se reduzca al temblor que recorre su cuerpo entero.

El Dios del Trueno envuelve sus dedos alrededor de la erección goteante de Loki y comienza a moverla mientras él continúa sus implacables movimientos dentro de su esposo. Loki gime tan fuerte que está seguro de que la gente sobreviviente de afuera puede escucharlo. Arquea su cuerpo, incluso su cabeza golpea contra el duro escritorio de madera, y sus piernas se aprietan sobre los hombros de Thor.

—Muéstrame, bebé. Vamos, muéstrame —sisea Thor. Él está tan cerca, sólo esperando que el clímax golpee a Loki y se corra mientras le aprieta su polla.

Loki grita, arqueándose en el aire mientras todo su cuerpo entra en erupción. Continúa gritando mientras todos los nervios de su cuerpo se iluminan como si hubiese sido alcanzado por un rayo. Irónico que su esposo sea el Dios del Trueno.

Apenas puede mantener los verdes ojos abiertos, pero vale el esfuerzo ver el cuerpo de Thor ponerse rígido, cuando encuentra su propio orgasmo. El rubio tiene la cara enrojecida y no le es fácil recuperar el aliento, sin embargo, no se aparta de Loki después. En cambio, mantienen un intercambio justo de besos sencillos, pero significativos. Caricias aquí y allá y muchas miradas de amor completamente satisfechas.

—Al final, el sol volvió a brillar sobre nosotros, ¿no? —pregunta Thor entre sonrisas.

Loki se ríe ligeramente, lo que provoca espasmos en el agujero caliente de Loki y, por consiguiente, el pene de Thor es estrangulado. Ambos jadean contra sus rostros.

—La cena puede esperar otro rato —espeta Thor antes de tomar la boca hambrienta de Loki.