11- Diferencias

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Narra Rei:
Julián: hermosa, estás bien? No llores por favor. - siento que sus lagrimas corren entren nosotros. Nunca la vi así. Cierro la puerta sin soltarla entre mis brazos. - por favor nena, decime qué te pasa.

Vera: - habla sin levantar la vista y con la capucha de su buzo puesta- me puedo quedar acá hoy?

Julián:- le doy un beso en la cabeza- obvio hermosa. Andá a acostarte, comiste, querés algo?

Vera: solo agua. - asiento y se pierde entrando a mi habitación.

Pienso unos segundos para intentar entender: sí llegó a su casa porque ahora lleva puesto un conjunto de algodón. No trae nada, ni su bolso, ni su computadora, así que debe haber salido apurada.

Vuelvo al dormitorio con la botella de agua y un vaso. Veo lo poco que traía en los bolsillos sobre la mesa de luz, el celular que lo puso a cargar con mi cargador, los cigarrillos y mi encendedor.

Julián: claro, acóstate del lado que ya estaba calentito- le hago burla y solo me saca la lengua mostrando su piercing. Busco una remera en mi placar, porque la verdad es que no soporto que me roce la piel. Me siento a su lado y suspiro buscando las palabras correctas- me vas a decir qué pasó?

Vera:- niega rápido con la cabeza- acostate - me ordena y lo pienso unos segundo, hasta que le hago caso, toma mi mano y la extiende para apoyarse encima. Yo solo dejo que me maneje como quiera.

Me rodea con su brazo libre y el otro está sobre mi pecho. Respiramos el mismo aire, no se si pueda soportar mucho más esto, me levanto un poco para llegar a su frente, le doy un beso y ahí me quedo.

La verdad es que tengo miedo tenerla tan cerca y dejarme llevar por el impulso arruinando todo lo que tenemos.

No se cuanto tiempo pasé metido en mis pensamiento, ella respira tranquila así que de a momento a mi también se me comienzan a cerrar los ojos.

Se sienta levemente, se saca el buzo y se queda con una remera corta blanca de una tela muy suave, dejando ver los lunares de sus brazos.

Intento apartar mi vista y se vuelve a acostar como estaba. Apoya parte de su pecho sobre el mío y ahora ya me empiezo a preocupar.

Subo mi mano por su espalda y compruebo lo que dudaba, no tiene un maldito corpiño. Escucho vibrar mi celular lo que agradezco porque necesito sacarme todo esto de la cabeza.

Mensaje de Lucas: Vera está en tu casa?

Lo veo unos segundo y no sé que responder. Escribo y borro varias veces y mi celular suena de nuevo.

Mensaje de Lucas: Cuidala hermano por favor.

Listo, si necesitaba algún recordatorio de la realidad no tardó en llegar. Ella es la novia de mi amigo y eso no va a cambiar. Suspiro, vuelvo mi celular a la mesa. La miro con sus ojos cerrados, recorro con mi dedo el lunar que tiene en el pómulo y sonríe.

Creo que nuestros cuerpos no entienden bien la realidad, porque la abrace más fuerte, ella hizo lo mismo conmigo y nos dormimos.

Narra Vera:

Flashback de hace unas horas.
Salgo de la casa de Juli en dirección a Palermo, no leí los mensaje de Lucas porque por lo qué alcancé a ver en la notificación eran reproches por los mismos temas de nuestras ultimas peleas. Comienza a llamar y atiendo a través del estéreo del auto.

Llamada con Lucas:
Lucas: porque no respondes mis mensajes?
Vera: estoy manejando en 10 minutos llego. Qué pasó?
Lucas: nada, pensé que estarías en casa cuando llegara.

Dímelo ReiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora