21 - Doble turno (Parte 1)

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Y sin darme cuenta el tiempo trabajando para Héctor y Olga se esfumo. Intente recopilar toda la información que pude en una memoria USB, en especial con toda la información relevante de Ricardo y las incongruencias que nos relato anteriormente. 

Las noches junto a Barbara fueron lo mejor, realmente nos hicimos muy amigas en este ultimo tiempo que hasta casi pensé en la posibilidad de pedir unas semanitas mas de trabajo solo para estar junto a ella, pero me arrepentí, quiero seguir el plan de mi ama y no arruinarle nada de ello. 

Según Héctor, había hecho un excelente trabajo en muy poco tiempo y que de verdad, aunque aun no encontraba esa supuesta academia de sirvientas a la que le comento Marie para que me contratase, estaba muy satisfecho con lo realizado. Incluso que converso con Marie sobre extender el contrato pero que mis horarios ya estaban completos y el próximo cliente ya estaba tomado. 

Me hicieron una despedida entre algunos trabajadores y principalmente mis compañeras sirvientas del lugar, todo esto la noche anterior. 

-El lugar no será igual sin ti- Barbi estaba realmente desanimada

-No te pongas así, que me pones triste- Me baje de mi cama para abrazarle -Además, de seguro llegara alguien muy buena para ser tu pareja de trabajo. 

Barbara me devolvió el abrazo con la misma intensidad, se acurruco junto a mi apoyando su cabeza en mi hombro. 

-Tenemos que juntarnos cuando tenga vacaciones- Su petición sonaba mas una orden por si misma

-De acuerdo barbi, quizás ahí te presente a mi ama. De seguro la adoraras- Sus ojitos brillaron de alegría provocados por nuestra promesa a futuro

Nos acurrucamos tal gatitos y sonreímos. 

-Ya pero como es mi ultima noche no te puedo dejar sin un espectáculo para ti.

Lance la sabana para atrás y me quite lo poco de ropa que llevaba encima, quedando totalmente expuesta ante mi compañera. Le baile, acaricie, le hice un oral delicioso según ella y robando sus dedos, los use para tocarme. Ella se encontraba rojísima y empapada, pero lo que mas me importaba era ver a mi peculiar amiga feliz. 

Dicha mañana se sintió muy distinta, la rutina se inculco en mi rápidamente y ahora tomar mis cosas para irme era algo totalmente incomodo pero necesario. Con muchos abrazos y besos en la mejilla salí por aquella puerta, pasando por el jardín larguísimo. 

-Parece que no te querían soltar allí- Marie estaba esperándome en la esquina de la casa, toda emocionada me abalance a sus brazos. -Lo se sara, también te extrañe demasiado- No necesite soltar alguna palabra para demostrar como me sentía. 

Tras un bombardeo de besos nos subimos al auto que pidió mi ama. 

-Entonces ¿Otro trabajo, no?- Consulte un poco dudosa

-Exacto, no es un millonario como Héctor pero pagara por tus servicios esta semana- Comenzó a explicar Marie -Antes de Ricardo anduve con un hombre, nada serio, solo sexo pero muy intenso. Pero como Ricardo me daba buen sexo y además un tipo de relacion, acabe con dicho tipo, pero mis razones no le bastaron y cada semana me insiste en juntarnos. 

-¿Donde entro yo?

-Es sencillo, siendo sincera encuentro que eres una estupenda fuente de dinero, en especial si estas haciendo lo que te gusta- No podía negar a eso, la servidumbre me ha gustado desde que conocí a Marie. 

-Me alegro mucho poder ayudarle

-Y como ya conozco el nombre de la persona, la ubico pero quiero investigar un poco mas allá. Por lo tanto no tendre mucho tiempo para estar contigo, no quiero que estés aburrida en casa. Recuerde a este hombre, sumado a la idea de que necesitas un poco de "Cariñito", tu sabes a lo que me refiero- Levanto las cejas -¿Y que mejor que ganar dinero con ello? ¡Todos ganan!

Obedeciendo a la amanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora