El Rey Arruinado

Parte 26: Niebla blanca

La Reina Sangrienta se había hecho presente ante la tripulación de Gangplank, que incluía a los campeones Diana y Shen a bordo.

"¿Qué quieres?"

"Diana... solo quiero que su majestad tenga un mágico reencuentro..."

"¿Reencuentro?"

"Sí, en la historia de amor más bella que..."

El espectro esquivó una bala de cañón que fue lanzada por la matarife de la tripulación, la llamada Varona.

"Estoy harta ya de oír lo mismo, ¿vale?"

"Todo el mundo se considera un crítico hoy en día..."

"Márchate" - le advirtió Diana - "No quiero emplear el poder de la luna contra ti..."

"¿El poder de la luna?"

Un aura tan roja como la sangre empezó a rodear a la reina.

"Yo soy el poder de la luna roja... y tú no entiendes el peligro que eso es..."

"Me encantaría veros romperos la madre" - dijo Gangplank - "¿Pero has venido hasta aquí solo para matarnos?"

"No, piajoso"

"¿Cómo me has llamado?"

"No soy la típica madre que pega a los amigos de su hijo... o enemigos... para eso están ellos..."

"¿Ellos?" - repitió Shen extrañado

El barco empezó a temblar y una oleada de niebla negra surgió del mar.

En plena cubierta apareció un pianista tocando música, al lateral derecho una especie de ente hecho de pergaminos escalando...

"Ya casi... llego..."

"Esto me inspira..."

"¡Oh! Una historia de la era de la piratería..."

La Cronista Fantasma hizo su aparición llenando todo de niebla y un enorme tronco con una niña pequeña encima se acercaba desde las costas.

"¡Es hora de jugar! ¡De jugar!"

"Ten cuidado, niña..."

"¡Aburrido!"

El espectro que le hablaba era un anciano rodeado de velas.

"Tú diviértete, niñita... id a jugar con ellos..."

"Maldita bruja..."

"Me gustaría quedarme a corregir tu actitud, pero quiero estar en primera fila cuando cierta pareja se reencuentre..."

"¡Capitán! ¡El árbol se acerca!"

"¡Disparale! ¡Rex!"

"Nos vemos en otro momento, Diana"

El espectro de rojo se marchó mientras la tripulación y los centinelas enfrentaban a los diversos espectros convocados.

En su trayectoria la Reina pudo notar algo parecido a un fragmento de alma.

"¿Otro fragmento? Pero eso es... imposible..."

Karthus, ¿cuántos fragmentos son en total?

Unos diez... contando el que obtendré pronto y el de Yorick...

"Entonces... ¿por qué noto la presencia del rey e Isolde?"

La Reina buscó por los alrededores hasta ver una especie de brillo azulado. Definitivamente era un alma, pero tomaba la forma de...

¿De una niña de pelo azul?

Y no solo eso, también había una especie de niebla blanca rodeándola, surgida junto al brillante fulgor que la invocó.

"Oh... uooohhh..." - se sorprendía la niña - "¡Piernas!"

"........"

"Uuuhh... ¡noto el aire! ¡aire de verdad!"

"........"

"Ahora solo tengo que encontrar a..."

Pero al intentar dar su primer paso la niña se tropezó y cayó al suelo, hundiendo su cara en la arena de la playa.

Esto le pareció algo triste al espectro rojizo, que se le acercó.

"Niña... ¿qué haces aquí?"

"¡Mmfffmmff!"

"Espera un momento"

Con alzar un poco la mano logró levantar a la niña con sus poderes.

"Muchas gracias, esto es nuevo para mi..."

"¿Andar?"

"¡Sí!"

"Niñita eres... ¿eres una muñeca?"

"¡No! ¡Soy una niña de verdad!"

"........"

"Pero antes era una muñeca... de verdad"

"Bueno, al menos eres mona"

"Gracias..." - se sonrojó un poco - "Usted también tiene un vestido muy bonito..."

"Gracias, son ropas de reina"

"¡Guau! ¡De reina! ¡¿En serio?!"

"Me estás cayendo bien... ¿cómo te llamas?"

"Gwendoline"

"Un nombre precioso"

"Señorita, ¿cuál es su nombre?"

"Mi nombre..."

Poca gente se había tomado la molestia de preguntarle su nombre y frente a ¿quién eres tú? era evidente que prefería dar su título.

"Zorina..."

"Es encantador"

"Gracias..." - emitió una leve sornisa - "Niñita, dijiste que necesitabas encontrar a alguien..."

"¡Sí! ¡Tengo que encontrar a Viego!"

"¿A Viego?"

"Sí... ¿cree que podría ayudarme?"

"Has tenido suerte, tu hada madrina va a solucionar eso..."