Quiero ser tu amante •||Rashta x Navier||•

Capítulo 14

Nuestro secreto.

Pov: Navier

Al sentir el fresco de la mañana yo me apegue a Rashta, algo que me hizo sentir extrañada así que abrí un poco mis ojos y pude observar a ella recostada aún lado de mi con una dulce sonrisa.

Me encontraba desorientada.

Cuando le puse más atención me di cuenta de que se encontraba desnuda algo que me sobresalto pero que también me hizo recordar.

No sabía que decir, no tenía palabras, todo lo que ocurrió en la noche fue magnífico no podía quejarme de eso y no podía decir que estuvo mal porque eso sería mentir.

Simplemente me quedé en silencio.

-Buenos días.......Navier

Rashta acarició dulcemente mi mejilla mientras dejaba un corto beso sobre mis labios haciendo que todo mi interior se calmará.

-¿Cómo durmió?

Ella comenzó acariciar mi cabello como si fuera mi pareja y realmente una parte de mi deseaba que lo fuera.

-Dormi bien apesar de dormir aquí en el césped ¿tu cómo dormiste?

Rashta colocó su mano sobre su cadera con una ligera sonrisa.

-Yo igual dormir bien aunque ahora me duele mi cadera nunca creí que la emperatriz tuviera algo tan grande entre su entrepierna

Al escuchar aquello mi rostro volvió a tornarse rojo y con molestia golpeé suavemente el hombro de Rashta a lo que ella reaccionó con una risita burlona.

-Ya, ya no se ponga de esa manera mi emperatriz

Yo desvíe mi mirada con el ceño levemente fruncido, estaba quejándome aunque más bien parecía que estaba haciendo un puchero.

-Sabes Navier ayer no te pude decir algo importante y es que......

Rashta fue interrumpida por la voz de unos guardias los cuales estaban cercas del escondite.

-¿Crees que le sucedió algo ala emperatriz?

Pregunto uno de los guardias a lo que el otro le respondió.

-No tengo idea pero se dice que la emperatriz fue secuestrada junto con lady Rashta

Rashta al escuchar aquello quiso reírse pero yo le cubrí la boca con mis manos para que no revelará nuestro escondite.

-Sera mejor encontrarlas rápido el emperador se estaba volviendo loco junto con todo el palacio

Cuando ambos guardias se fueron aleje mi mano de la boca de Rashta para luego ponerme de pie.

-Sera mejor arreglarnos para presentarnos en el palacio antes de que comience un desastre

Hablé con una voz sería tomando mi ropa del suelo observé como débilmente Rashta se ponía de pie y se acercaba a mi.

-¿Que es lo que vamos a decir mi emperatriz? ¿Que excusa daremos? Además usted dejo mi piel con sus marcas y yo también hice lo mismo con la suya

Me quedé en silencio, Rashta tenía razón en ese momento comencé a lamentarme, ¿Cómo pude ser tan tonta? Debido al éxtasis me deje llevar demasiado ahora debía enfrentar las consecuencias de eso.

-No sé estrece mi emperatriz, empecemos a vestirnos y mientras hacemos eso pensamos en una solución

Rashta me regaló una dulce sonrisa y comenzó ayudarme a vestirme y yo le regrese ese favor al ayudarla a vestirse observando las marcas que yo dejé sobre todo su cuerpo. Cuando ambas estuvimos listas la observé fijamente con una expresión de preocupación.

-Tengo una solución

Rashta tomo mi cabello y lo acomodo sobre mis hombros de tal manera de que pudiera cubrir mi cuello para de esa forma ocultar las marcas.

-Primero debe ir usted a su habitación después yo la buscaré, ya que sería muy sospechoso si nos ven alas dos juntas llegar de la nada

Yo asentí con la cabeza, tome un poco de aire y lo deje salir para después salir de aquel escondite dirigiendo mi mirada hacia mi alrededor.

"Esta sólo"

Pensé con alivio mientras comencé a caminar de forma rápida a mi habitación no deseaba toparme con alguien en este momento ya que verían mi vestido arrugado, mi cabello desarreglado y el claro aroma de Rashta sobre mi además de las marcas que está dejo sobre mi piel.

"Falta poco....."

Casi que querría correr hacia mi habitación ya que por suerte no me había topado con nadie y si me tardaba más tiempo sentía que en cualquier momento alguien aparecería.

-¡Mi reina!

Escuché la voz del príncipe Heinrey a lo lejos a lo que yo me detuve en seco y giré mi cabeza ala dirección en la que el se aproximaba.

-¡No tengo tiempo ahora!

Grite y corrí a mi habitación por suerte ya estaba cerca así que al llegar a esta entre de golpe y cerré la puerta tras de mi, sentía que mi corazón quería explotar por la adrenalina que había sentido en ese momento.

"Al menos ya estoy aquí"

Suspire con alivió y me encerré en mi habitación para que nadie pudiera entrar. Cuando ya me sentí más calmada me dirigí a mi baño y una vez que estuve dentro me comencé a desvestir para darme un relajante baño por mi cuenta.

"Acabo de tener mi primera vez......con la amante del emperador y en el jardín del palacio"

Solté una leve risita debido a que eso se escuchaba ridículo aunque fuera cierto, pero para ser sincera no me arrepiento de nada todo fue muy especial y agradable, ella se entregó a mi y yo a ella. Nuestros cuerpos se unieron en uno solo y además la adrenalina de ser descubiertas por alguien y de saber que ese acto entre mujeres era incluso penado con la muerte hacia que todo fuera mucho mejor.

-Me pregunto que fue lo que me habrá querido decir.......

Alcé mi mirada al techo del baño cerrando mis ojos sin dejar de sonreír sentía una alegría y emoción que no tenía comparación.

Realmente me sentía muy feliz.

Pero esa felicidad se vio amargada debido a los gritos que se escuchaban del otro lado de la puerta de mi habitación.

-Debo dar una buena excusa......

Salí de la bañera y tome una toalla para de esa manera enredarla sobre mi cuerpo y así salir del baño dirigiendo mi mirada llena de molestia ala puerta.

-Un momento por favor necesito vestirme

Dije en una voz sería mientras me acercaba a mi gran clóset del cual saque el primer atuendo que encontré el cual era bastante sencillo a comparación del resto de mis atuendos.

-¡Emperatriz! ¡¿Se encuentra bien?! Por favor abra la puerta

Dijo Laura con insistencia mientras yo trataba de vestirme de manera rápida sin apartar mi mirada de la puerta.

-Si estoy bien por favor esperen ya dije que debo vestirme.......

Cuando termine de vestirme deje la toalla sobre el suelo y me acerque ala puerta con el cabello aún mojado. Esperaba que a Rashta le estuviera llendo mucho mejor que a mí.

Continuará.