EXTRA 0.2

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Mundo alternó.

Pov: Navier.

Hace días llegué al palacio después de que el emperador Sovieshu me rescatará de una muerte segura.

El hombre cree que soy una beta, sin embargo, estaba equivocado porque realmente yo soy una Alfa, pero es mejor que siga creyendo que soy beta.

En una hermosa mañana me encontraba caminando por el bello jardín del palacio ya que estar encerrada en aquella lujosa habitación me tenía aburrida. En mi recorrido me tope con una mujer realmente hermosa, tenía el cabello ondulado y blanco como la nieve, su piel parecía de porcelana y su cara era como la de una fina muñeca.

-¿Quien eres?.

Cuestionó la pequeña mujer delante de mi.

-¿Ah?.

No había escuchado bien su pregunta debido a que me había perdido en la belleza que irradiaba.

-¿Eres la mujer que trajo el emperador?.

En cuanto escuché esa pregunta yo no supe que responder.

-¿Que? ¿Acaso eres muda?.

La mujer alzó una de sus cejas con una expresión de seriedad.

-No, no lo soy.

Respondí algo apenada.

-Entonces responde.

Tome un poco de aire y después lo deje salir poco a poco.

-Mi nombre es Navier, y si, soy la mujer que el emperador trajo al palacio.

Aquella mujer solo asintio con la cabeza y después se pasó a retirarse.

-¡E-espera!.

La sujete del vestido, pero probablemente la jale muy fuerte pues este se desgarro un poco.

-¡Que insolente!.

De la nada apareció una mujer de cabello rojizo y después golpeo con dureza mi mano para que soltará el vestido de la mujer peliblanca.

-Me sorprende que una roñosa como tú se atreva a tocar a la emperatriz.

En cuanto escucho eso mis ojos se abrieron grandes por la impresión.

-¿Emperatriz. . .?.

La hermosa mujer que resultó ser la emperatriz se acercó a mi y sujeto mi mano que fue golpeada para comenzar a sobarla.

-Laura, te dije no usará la violencia con otros.

Yo no pude evitar sonrojarme al tenerla tan cercas.

"Huele muy bien."

Pensé mientras la mujer de nombre Laura trataba de justificar su acción.

-Sera mejor que vuelvas al palacio.

Tras ese comentario la emperatriz soltó mi mano y después se retiró con Laura dejándome sola en aquel jardín.

-Vaya...

Aquella fue la primera vez que la ví.

Muchas veces pasaba mi tiempo con el emperador o sola, pero existían ocasiones en las que podía observar a la emperatriz a lo lejos.

Esa era la mejor parte del día.

En esta ocasión me encontraba caminando por el jardín con la esperanza de volverme a encontrar con la emperatriz, pero un aroma familiar me hizo detenerme.

-Este aroma. . .

Embobada por el exquisito aroma de gardenias comencé a caminar hacia la dirección en la que provenía. Camine y camine hasta que llegue a un montón de arbustos.

"¿Que es este sentimiento?."

Coloqué mi mano sobre mi pecho ya que mi corazón comenzó a latir como un loco. De pronto comencé a sentir mucho calor y entonces comprendí que era lo que ocurría.

-Hay un omega en celo.

Mire los arbustos mientras tragaba saliva de forma ruidosa.

"Será mejor que me vaya..."

Estaba apunto de retirarme cuando de entre los arbustos salió la emperatriz.

-No te vayas...

Murmuró mientras se abalanzaba hacia a mi. Aquello fue tan inesperado que no pude mantener el equilibrio y caí.

-¡E-espera!.

Trate de hacer que reaccionara, pero ella no parecía escucharme, simplemente se lanzo a atacar mi boca.

Al principio me resistí, pero ya fuera por su dulce aroma o por la suavidad de sus labios fue lo que me hizo corresponder de a poco el beso.
Para ser ella una omega tan pequeña me tenía acorralada y era quien estaba teniendo las riendas de esa situación.

Pronto la falta de aire se hizo presente y trate de separarme del beso para recuperar el aliento, pero la emperatriz no me lo permitió, está lo que hizo fue profundizar más el beso.

Ya no sabía si lo que quería era continuar el beso o chupar mi alma.

Cómo pude coloqué mis manos sobre sus hombros y la aleje de mi, una vez que lo logré di una gran bocanada de aire.

-¿Quien te dijo que podías separarte?.

Cuestionó con tono serio.

-Yo... Lo lamento...

Respiraba de forma agitada mientras desviaba mi mirada hacia otra parte.

-¿En serio lo lamentas?.

Pregunto a lo que yo asenti con la cabeza.

-Yo no soy una mujer que crea en las palabras... Tendrás que hacer algo por mi para que pueda perdonarte.

Yo la miré y sin dudar pregunté.

-¿Que es lo que tengo que hacer?.

En cuanto ví la sonrisa que se formó en sus labios automáticamente me arrepentí de mi decisión.

-Por lo que veo eres una alfa...

Bajo su mano por mi abdomen hasta llegar a mi entrepierna la cual apretó.

-Y una dotada al parecer.

No pude evitar soltar un jadeo al sentir aquel apretón.

-Creo que ya te haz dado cuenta de que estoy en celo, ¿No?.

Me encontraba muy avergonzada como para responder.

-Te he echo una pregunta, responde.

Solamente asenti con la cabeza.

-Dime... Aquello que haces con mi esposo...

La emperatriz me sujeto del mentón para obligarme a verla.

-¿Te gustaría hacerlo conmigo?.

Continuará.

¡Hola!
A pasado un tiempo, ¿No es así?
Quiero disculparme por la inactividad, pero es que la universidad absorbe la mayor parte de mi tiempo, pero trataré de actualizar cada cierto tiempo, pues, ya casi se acerca el final de este bello fanfic.

Gracias por la espera y espero que hayan disfrutado del extra, nos vemos. ♥️

Posdata:
No estudien una carrera en el área de salud.

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⏰ Última actualización: Nov 25, 2023 ⏰

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Quiero ser tu amante •||Rashta x Navier||•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora