Comerte Entera | Keisuke Baji.

Tres

La Reunión

[T/n]

Después de que aquel chico se alejara junto con las personas que lo acompañaban, el gentío se aleja, Baji sigue de pie pero visiblemente enojado.

Chifuyu corre a su lado y se lo lleva del brazo, quería seguirle y apoyarlo, pero recuerdo lo que sucedió. No quiero ilusionarme sola nada más, dios, que molesto.

Le pregunto a Emma a qué hora es la reunión de la Toman y ella responde que casi siempre a las 7 de la noche.

Llegando a mi casa sola, me apuro a hacer mis deberes para salir lo más rápido posible.

Termino mis deberes y me dirijo a mi entrenamiento de kickboxing, mi entrenador me regaña por faltar pero aprendo nuevos movimientos.

Sudada y con mi ropa informal me doy cuenta que casi son las 7, pongo mi sudadera y mi mochila cruzada dirigiéndome al lugar donde Mikey me citó, no tengo idea de por qué quiere que vaya pero es mejor hacerle caso.

Llego a un templo antiguo donde hay un montón de hombres altos, musculosos, bajos, serios, de todo, cada uno de ellos porta el uniforme de la Toman.

Me acerco cada vez más adelante viendo a Mitsuya de pie, me saluda haciéndome señas para que me acerque y corro hacia él.

—Llegaste puntual —dice saludándome con beso en la mejilla—, ¿de dónde vienes?

—Oh, vengo de entrenar —sonrío enseñándole mis manos aún vendadas—, no calculé bien mi tiempo.

Mitsuya sonríe entendiendo la situación, observamos que todos los presentes se hacen a un lado dejando un pasillo en medio, adelante venía Mikey caminando con un rostro de enojo, atrás Draken con el mismo gesto de siempre.

Mikey me ve y me sonríe saludando con su mano, le devuelvo el gesto y sigue avanzando a la altura alta del templo antiguo, a mi lado se para Draken quien me rodea con su brazo y puedo notar que Baji viene llegando con curaciones en el rostro, detrás de él Chifuyu camina con la vista abajo junto con Takemichi.

Baji se sorprende de verme presente, lo saludo con mi mano sonriendo con incomodidad. Él corresponde el saludo sin sonreír, vuelve a mirar al frente a donde está Mikey quien está de espaldas.

—¿Qué sucede? —susurro a Draken.

Draken mira a Mikey brevemente para después mirarme a mi, se agacha a mi oído sin soltarme.

—Desde que se enteró de lo que pasó con Baji ha estado así y siendo sinceros no tengo ni idea de por qué te pidió que vinieras, eres una niñata aún.

Se separa de mí y lo miro feo, él se encoge de hombros sonriendo ligeramente.

—¡Toman! —grita Mikey dando la vuelta encarando a todos.

—¡Sí! —exclaman todos al unísono.

Draken suelta de mis hombros dirigiéndose a estar junto con Mikey, me mira desde arriba engreído haciéndome reír.

Giro mi atención a las personas presentes, son bastantes, no podría contarlas aunque quisiera.

Noto que Hanagaki Takemichi me mira atentamente, ladeo mi cabeza en forma de saludo, cuando me ve me saluda nervioso. A veces siento que no se comporta como un adolescente normal, no sé, hay algo extraño en él.

—Esta tarde, alguien se atrevió a desafiarnos, haciendo una declaración de guerra —habla Mikey con molestia— lastimaron a nuestro capitán de la primera división.