Cap. 9 - ¡SHOWTIME! BEBÉ-

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¡Ay, ay, ay! Me duele, dice un adolorido Carlos, le destapan la cara y con su vista un poco borrosa empieza a ver el lugar y se ubica en el cuarto de sus padres, contando alrededor como 6 personas.

Quitándose lo que le ataban sus manos, se le acerca ROMEO y le pregunta:

ROMEO: ¡Bueno! Ya estamos aquí, dónde está la caja fuerte -mirándolo a los ojos con cara de pocos amigos-

CARLOS: ¡Momento, momento!, que tus hombres como que me tratan como un rehén, cuando no lo soy... Aquí esta - se dirige a una pared, apartando una nevera tipo ejecutivo que tenía sus padres en su habitación.

El ambiente se podría cortar con un bisturí, se respiraba mucha tensión.

Carlos visualizó la caja y procedió a digitar la calve y la abrió... Tal y como él sabía, había dinero en efectivo, dólares y euros, una pistola, documentos y alguna que otras joyas de la familia...

CARLOS: ¡Aquí esta! - lo dijo con tono de avaricia-

En ese lapsus de segundo, dos delincuentes, tomaron del brazo a Carlos y los apartaron, la cara de confusión el chico era visible.

CARLOS: ¿Qué pasa?, ¿Qué pasa?

ROMEO: Que ya hiciste tu trabajo, ahora entramos nosotros.

CARLOS: ¡Qué!, ¡Qué! ¡Pero que carajos! ¡Eso es mío!

ROMEO: Shhh, shhh, Shhh, apártalo y ponlo en la esquina y tápale la boca, habla mucho.

Mientras que Carlos estaba viendo cómo se desviaba el plan, su cara era de descomposición, los delincuentes vaciaron todo de la caja de seguridad, quedo como cuando llego... SIN NDA.

La habitación estaba completamente desordenada, no se conformaban con lo que había en la caja de seguridad, si no que se llevaban todo lo que podían. Carlos estaba en el suelo en una esquina con una mezcla de frustración y rabia, y escucha a lo lejos una voz que le sonaba medio familiar pero no lograba ubicar, los escuchaba ¡Va sin contratiempos, hay que acelerar el paso! -su cara (Carlos) era de desconcierto y se preguntaba, ¿De quién era esa voz?

Mi Mejor EnemigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora