Donde Minho jura ser heterosexual y Seungmin intenta de todo para llevarlo a la cama. Pero... ¿Qué sucede cuando esté termina enamorándose y al lindo rubio no le interesa corresponderle?
Kim Seungmin era libre, no era de nadie y nunca lo sería, ¿o...
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Seungmin llegó a su casa con una gran sonrisa, pero al ver a su madre llorando y con una botella de alcohol en la mano, enseguida esa sonrisa desapareció.
-Mamá, ¿estás bien?
«Qué tonto, claro que no lo está» se regañó mentalmente.
Se acercó hasta ella y le quitó la botella de las manos, realmente se veía mal.
-¿Qué pasa? ¿estas así por el divorcio?
-Estoy así porqué me he dado cuenta de soy una horrible madre-confesó.
-¿Eh?
-Lo soy, nunca tengo tiempo para ti, ni siquiera nos vemos desde hace semanas, no sé cómo te sientes, que es lo qué haces... y ahora, estoy bebiendo de nuevo, no hago nada más que hacer las cosas mal.
Era verdad, ella era una mala madre y Seungmin no podía mentir para consolarla.
-Si, lo eres.
-Lo siento tanto, hijo-habló con tristeza-He puesto a tú padre y él trabajo antes que a ti y no sabes cuanto me arrepiento.
-Entonces cambia.
A pesar de todo, Seungmin la quería y no podía negarlo, realmente les gustaría que su madre comenzará a dedicarle tiempo, a platicar con ella de vez en cuando, por más que quisiera convencerse de qué no lo necesitaba ni quería, la verdad era que si.
-¿Me darías una oportunidad de hacer las cosas diferentes?-lo miró y tomó su mano-Solo seremos tú y yo, haré lo posible por remediar mi ausencia.
-Está bien, mamá-trató de sonreírle, sentía un poco de orgullo, pero le hacía feliz por eso-Solo ten en cuenta, te va costar ganarte mi confianza.
-Lo sé, muchas gracias, Seungminnie-se limpió las lágrimas y le sonrió.
-Ahora, por favor deja de beber y ve a la cama-la ayudó a levantarse-Mañana tienes trabajo.
Ella asintió e comenzó a caminar para dirigirse a su habitación.
-Hey, mamá.
-¿Si?-se dio la vuelta.
-Si estás triste por la separación con papá puedes desahogarte conmigo-aseguró y ella asintió con una sonrisa.
Seungmin se dio una ducha, se colocó su pijama y se acostó en su cama, tenía el peluche que Min le había regalado entre las manos, así que tomó su celular para tomarse una foto y subirla a su historia de Instagram.
Minho no tardó en verla y sonreír, a Seungmin realmente le había gustado el peluchito, cosa que nunca se imaginó de él, tenía un lado tierno y sentimientos tan lindos que quería ir descubriendo poco a poco.
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