Donde Minho jura ser heterosexual y Seungmin intenta de todo para llevarlo a la cama. Pero... ¿Qué sucede cuando esté termina enamorándose y al lindo rubio no le interesa corresponderle?
Kim Seungmin era libre, no era de nadie y nunca lo sería, ¿o...
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Minho y Seungmin habían llegado desde hace un rato a la fiesta y claro qué el rubio no perdió el tiempo. ¿En qué estaba pensando Minho cuando creía que se iba a sentir asustado en una fiesta? Al contrario, ¡se iba a divertir lo más que podía! Y cómo era de esperarse, Seungmin llamó la atención de los demás con su divina figura y hermoso rostro.
Era tan perfecto que parecía irreal.
Minho quedó sorprendido al ver cómo el alcohol pasaba como agua por la garganta de Seungmin, pues esté no hacía absolutamente ningún gesto de molestia, ya se había tomado varios shots de tequila y ahora se encontraba bailando frente a Minho.
—¿No vas a bailar conmigo?—preguntó con un pucherito y él se negó—Entonces, ¿a qué vienes a las fiestas? ¿a quedarte sentado?
—Me estuviese divirtiendo más si no estuvieras aquí.
—Ah, ¿es eso?—dejó de bailar y sonrió—Por mi no hay problema, me voy.
Seungmin se dio la vuelta y se dirigió hacía donde se encontraban los demás bailando, se acercó a un chico muy guapo qué no le había quitado la mirada desde qué había llegado y comenzó a bailar con él.
—Te he visto mirándome toda la noche—se atrevió a decirle—¿Te gustó mucho no es así?
El chico se asombró ante aquello, pero sin dudarlo asintió. No iba a dejar ir una oportunidad cómo esa.
—No voy a negarlo—contestó con una sonrisa y colocó sus manos en la cintura del rubio—¿Cuál es tú nombre?
—Seungmin—le sonrió coquetamente.
—Soy Changbin.
A Minho no le había importado qué Seungmin se fuese, es más, una chica se encontraba sentada en sus piernas, pero al pasar los minutos y no ver a Seungmin comenzó a buscarlo con la mirada.
—¿Puedes levantarte?—le preguntó a la chica pelirroja.
—¿A dónde vas?
—Al baño—mintió.
—Bien, vuelve pronto, Min—se levantó y continuó hablando con los demás.
Minho buscó a Seungmin entre todas las personas qué estaban bailando y al parecer ahí no estaba, buscó en la cocina y tampoco. ¿Realmente se había ido de ahí?
—Qué suerte que se haya ido—se dijo a sí mismo y se dirigió hacía el baño. Y ahí, en el pasillo fue en donde se encontró a Seungmin demasiado cerca de otro chico.
Seungmin tenía su dedo índice en el rostro de Changbin, con movimientos de arriba hacía abajo le acariciaba la mejilla, mientras él mantenía sus manos sobre su cintura y le decía algo que al parecer le causaba tanta gracia a Seungmin.
—Ese estúpido chico—susurró Minho con enojo, no es qué le causará celos verlo, pero le daba un su jodido orgullo. Al parecer Seungmin era coqueto con todos y no solo con él.
