Capítulo 4

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06/Junio/2019

¿Qué hora es? Maldita alarma ya deja de sonar y maldición tengo que ir a clases. Con mucha flojera me dirigí al baño y al salir de la ducha me puse una venda para tapar la cortada y me puse a limpiar la sangre. Cuando al fin la pude quitar me fui abajo para desayunar.

Ni me di cuenta que me dormí. Y lo peor es que me duele todo el cuerpo por dormir en el piso. Que bueno que sonó la alarma porque si no se me hubiera hecho tarde otra vez. En lo que desayunaba veía las noticias en la sala de estar y estaban anunciando otro asesinato, ¿Qué diablos esta pasando últimamente?

Es raro que hoy no he sentido que me ven o que me estén siguiendo , tal vez todo me lo habré imaginado.

Llegando a la escuela tenemos que pasar obligatoriamente por los guardias de seguridad para que nos revisen. Que flojera ¿hasta cuándo estaremos haciendo esto?

Hay como unos dos chicos adelante de mi, literalmente te pasan por esa cosa que detecta metales o lo que está en el aeropuerto, también pasan la mochila en donde pueden ver qué tienes adentro y ya después de pasar por último te pasan una cosa rara por todo el cuerpo. Cómo si todo lo demás no fuera suficiente tenemos que pasar la credencial del colegio en una máquina y está cuando pones tu credencial revisa tus huellas dactilares, tu pupila y al final te pinchan el dedo para asegurarse de que si seas tú.

Después de mil años ya pude pasar, debo revisar mi horario para saber en qué salón y qué clase me toca hoy. Todos los días cambian los horarios, nosotros no tenemos un mismo horario a comparación de las otras escuelas, genial mi día no puede estar mejor, me toca Física.

¿Para que mierda necesito la Física en mi vida? Si yo voy a terminar heredando la empresa de mi padre, además de que soy un asco en esta materia; según yo si la entiendo, pero a la maestra le encanta reprobarme y prefiere pasar a los que no hacen absolutamente nada. No sé sobre qué está hablando la maestra porque no estoy poniendo atención, pero lo poco que escuche fue algo de la cinemática.

Además de que no ayuda mucho que una compañera esté pregunté y pregunté la misma jodida cosa, la cual le han explicado un montón de veces pero ella sigue sin entender. ¿Qué no le da vergüenza? Si yo estuviera en su lugar ya me hubiera callado en el primer momento en que me explico la maestra y aunque no le hubiera entendido le diría que sí entendí para que siguiera con la clase.

Y así se pasó toda la clase preguntando y preguntando, la pobre maestra ya estaba con una cara de "ya cállate por favor". Pero además de ella estaba el típico chico que cree que sabe todo o cómo la mayoría de los adolescentes lo llamamos "el chico castroso" que cada dos segundos tenía información sumamente interesante para poder aportar en la clase, en este momento está hablando y a mi me dan ganas de decirle -cabrón ya cállate- y creo que la maestra piensa lo mismo porque lo está mirando con una sonrisa demasiado fingida.

Están unos ejercicios en el pizarrón que se supone que los tenemos que responder y el que los termine puede ir saliendo. Yo nomás los apunte porque Uno. Sinceramente no entendí nada, Dos. La maestra ya se quiere ir a coger con el profe de Literatura en el baño de la sala de maestros o en la sala si es que no hay nadie ¿y cómo yo se eso?, bueno porque siempre que faltan veinte minutos para que acabe la clase, le llega un mensaje en el cual se le escapa una sonrisa y a los diez minutos nos deja salir.

Estaba mentalmente riéndome de la maestra cuando escuchó unos golpes en la ventana del salón, son Noah y Dani. Noah me saludaba mientras Dani estaba resolviendo los ejercicios del pizarrón porque sabe que batallo en eso, al terminar el primero me mostró el cuaderno y yo empecé a copiarlo y así transcurrió lo mismo con el segundo y el tercero; al estar copiando el cuarto la maestra ya nos dejó salir. Se le notaba que ya tenía prisa por ir a coger.

Por desgracia yo fui el que me enteré de eso y ¿Cómo me enteré? Estaba un día sin ganas de vivir (lo normal) dirigiéndome a mi siguiente clase la cual era más y nada menos que Física, por lo cual yo tenía que pasar por ahí (la sala de maestros). Cuando iba pasando escucho un sonido y no eran susurros o voces hablando, era un sonido que conocemos bien nosotros los hombres y cómo el buen chismoso que soy pegue mi oreja a la puerta y enseguida reconocí la voz de mi maestra (y cómo no reconocer esa voz si esta en mis peores pesadillas) y ¡madre mía! ¡Parecía que estaban matando a la pobre mujer! Alejé mi oreja de la puerta y avancé unos cuantos metros y me puse mis audífonos (claro sin la música encendida) para no levantar sospechas de que los había escuchado. Unos minutos después la puerta se abrió y fingí que se me desabrocharon las cintas, volteé y vi que era el profe de Literatura. Al llegar al salón obviamente no estaba la maestra, ella llegó como unos 15 minutos después.

– ¿La maestra siempre los deja salir temprano? —preguntó Dani—.

– Si —respondimos Noah y yo al unísono—.

– Siempre hace eso —agregué, mientras checaba mi teléfono para ver cuál era mi siguiente clase—. ¿Qué clase tienen?

– Yo arte, creo —comentó Noah algo confundido viendo su teléfono—.

– ¿Y tú Dani?

– F-filosofía —mencionó sin voltearme a ver y rascándose la nariz—.
– ¿Y tú JJ?

– Filosofía —volteé a ver de reojo a Dani y noté que estaba algo nervioso—.

– Esperen si tengo Filosofía con ustedes  —festejó viendo su teléfono—.

– ¿Por qué a mi no me deja salir temprano esa maestra?

– Porque supongo que a esa hora no coge con el profe de Literatura

– Creo que depende la hora libre que tengan ambos

– Y ¿cómo saben lo del profe y la maestra?

– Me dijo Jacob

– Yo fui el desafortunado que se enteró de ello, fue horrible, no dormí en semanas

– JJ, ¿Qué te pasó en la mano? —mierda, normalmente esto me lo preguntaría Daniel, pero creo que aún sigue incómodo por lo de ayer—.

– Nada, bueno se me cayó un vaso y cuando estaba recogiendo los pedazos, por accidente me corte con uno de ellos  —me encogí de hombros para quitarle importancia—.

Espero a ver sonado convincente, se que está mal mentirles, pero no les voy a decir que hice el juego yo solo.

Normalmente nos dan como un "descanso" de diez minutos, los cuales la mayoría los ocupamos para ir de un salón a otro.

Al llegar al salón nos sentamos en nuestros respectivos lugares, Dani y yo juntos y Noah con una chica.

Obviamente no estaba poniendo atención a la clase así que me puse a dibujar en el cuaderno. A mitad de la clase no se porque me volteé a mirar la ventana cuando veo que van pasando el director, un señor muy elegante, un chico pelirrojo y una chica con el pelo azulado. Cruce miradas con ambos, la chica me sonrió y el pelirrojo simplemente bufó y puso los ojos en blanco.

▕⃝⃤⁩⁩ 9¾ ⚯͛ ⌁☍ ❾¾ ▕⃝⃤⁩⁩ 9¾ ⚯͛ ⌁☍ ❾¾ ▕⃝⃤⁩⁩

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Bueno esto es todo por mi parte gracias por leer esto, se te quiere mucho :3

Si no fue mucho suspenso hoy, pero ya se acerca lo bueno 🤭

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