La noche era fría y silenciosa, los árboles se movían a causa del fuerte viento que hacia en el lugar pequeñas gotas estaban cayendo y algunos relámpagos se veían en el cielo. En una pequeña cueva estaban escondidos dos chicos tratando de hacer el menor ruido posible, fuera de ahí, recargado en un árbol, se encontraba otro contando con sus ojos tapados y más adelante, detrás de un gran tronco habían otros dos que se reían en silencio.
— Ciento cuarenta y nueve, ciento cincuenta — el chico se destapó los ojos y volteó a ver a todos lados para tratar de encontrar a sus amigos. Duró unos quince minutos buscando hasta que escuchó una leve risa, con una sonrisa camino hasta la cueva y en un inesperado momento se agachó, sorprendiendo a los que estaban ahí dentro. Corrió de nuevo hasta el árbol antes de que ellos lo alcanzaran — ¡Hansol y Chan quedan atrapados! — Seungcheol gritó para que todos escucharan
— ¡No es justo, por tu culpa nos atraparon! — le gritó Hansol a Chan, quien aún seguía riéndose — No pensé que te daría tanta risa el chiste del perro llamado pegamento
— El chiste fue tan malo pero tú contándolo dio mucha risa — dijo Chan mientras tocaba su estómago que le empezó a doler de tanto reírse
Y gracias a que Seungcheol se entretuvo viéndolos no sintió cuando Joshua y Samuel corrieron tras él para poder tocar el árbol y salvar a los cuatro, Seungcheol reaccionó un poco antes que ellos y alcanzó a tocar el tronco lanzándose.
— Woah que buenos reflejos — dijo Samuel mientras lo ayudaba a pararse
— Está comenzando a llover más fuerte, hay que tener cuidado con el piso porque hay mucha piedras y pueden caerse — Joshua llegó hasta ellos mientras se sacudía la ropa llena de tierra
Sin querer mientras iban platicando de distintas cosas y jugando a perseguirse habían llegado al muro que dividía los dos lados, Chan se acercó a él y puso su mano en la dura rama que formaba parte de este, se quedó un rato más ahí hasta que escuchó unos leves murmullos, volteó a ver a sus amigos para ver si eran ellos pero los vio un poco más atrás así que descartó la idea de que fueran ellos, de repente sintió como un pequeño golpe era dado justo donde su mano estaba puesta, de no ser porque las ramas estaban muy enredadas y pegadas podría ver que es lo qué hay del otro lado, sin hacer tanto escándalo sacó sus alas negras y se acercó de la manera más rápida a sus amigos, con señas les pidió que se acercaran a la vez que les pedía no hacer ruido.
— ¿Qué pasa, por qué estás así? — Samuel se acercó a él junto con los otros tres
— Shhh, hay alguien detrás — apuntó en donde estaba hace unos minutos — Pensé que había sido mi imaginación pero golpearon las ramas — susurró mientras con mucho cuidado se acercaban
Los cinco pusieron sus orejas pegadas para oír más y efectivamente pudieron escuchar un par de voces, no lograban escuchar muy bien que era lo que decían ni tampoco quienes eran pero con el hecho de que estuvieran muy cerca de su territorio se pusieron nerviosos, en un descuido Joshua se acercó más y sin querer aventó una rama con su cuerpo, Hansol en un movimiento involuntario abrió su mano y la guió hasta la rama, evitando que se cayera aunque gracias a eso su chispa morada salió, tanto ellos como las voces del otro lado se quedaron callados, Seungcheol vio a ambos con sus ojos bien abiertos.
— Si ellos vieron eso estamos fritos — susurro Samuel mientras veía a un Hansol en shock
— Claro que lo vieron tonto, aish todo hacemos mal, hay que irnos — sin esperar más tiempo salieron corriendo en dirección a la casa de Seungcheol
Por curiosidad, Chan volvió a abrir sus alas y elevarse a una distancia considerable para poder ver qué era lo que estaba de aquel lado pero se llevó una gran sorpresa al toparse con unos ojos viéndolo directamente, rápidamente volvió a bajar para alcanzar a los chicos y refugiarse. Si algún día llegaran a entrar seguramente sería por su culpa.
[....]
— ¿Estamos de acuerdo que todos vimos eso? — un Jun agitado preguntó mientras apuntaba hacia la calle
Sus acompañantes seguían tratando de recuperar aire ya que habían corrido mucho.
— No se que rayos pasó pero debemos averiguar qué fue eso — Jihoon se paró a un lado de Jun mientras tocaba su pecho — ¿Cómo es que nunca supe de ese gran muro que divide la mitad del bosque?
— Yo sabía de su existencia ya que mi mamá no me deja cruzar hacia allá, es la regla número uno cuando salgo de casa — les Seungkwan mientras se echaba aire con la mano
— Será mejor irnos — Jun camino hasta la casa de Jeonghan quien fue el que les propuso ir a conocer el famoso bosque encantado donde Seungkwan vivía
Jeonghan, quien no había hablando en todo este tiempo, seguía pensando en aquella extraña escena que vio frente a sus ojos, ¿un chico con alas? Le parecía irreal tal cosa, a su mente solo llegó la imagen de la famosa Maléfica y fue ahí donde su pequeña cabeza hizo clic, chicos volando y extraños colores saliendo de la nada. Volteó a ver por última vez aquel misterioso bosque donde la luz del día no llegaba para después apartar su vista y correr hacia sus amigos.
Sus amigos se fueron unas dos horas después de que llegaran de su travesía, ahora Jeonghan se encontraba cenando junto a sus padres en un gran comedor que tenían, como siempre todos estaban en silencio y solo se escuchaban los cubiertos chocar con el vidrio de las vajillas, Jeonghan se encontraba en un debate mental sobre si contarles a sus padres lo visto o solo quedarse callado.
— ¿Qué hay detrás del muro? — la primera oración dicha en la mesa fue por él, volteó a ver a sus padres esperando una respuesta pero solo observaba cómo entre ellos se miraban
— Es algo que no necesitas saber — su padre volteó a verlo mientras le sonreía — Ahora come
— ¿Por qué no debería saberlo? ¿Esconden algo? — volvió a preguntarles mientras alzaba una de sus cejas
— Jeonghan hijo, son cosas que no tienen porque atormentarte, no hay nada del otro lado — su madre intervino en la conversación
— Mienten, ustedes y yo sabemos lo qué hay del otro lado, así que no intenten mentirme —
— Y según tu, ¿qué hay ahí? — su padre volvió a verlo mientras dejaba de comer y cruzaba sus brazos
Jeonghan no sabía con exactitud qué había ahí y tampoco podía decirles que vio un chico volando y una rama siendo detenida por lo que parecía ser una extraña cosa morada así que dijo lo primero que se le vino a la mente.
— Maléfica está ahí —
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jijijiiji oigan entiéndame mi cerebro como q batalla pokito para conectar ambos lados pero poco a poco iré mezclándolos y así 💞
Espero les guste este capítulo me partí el craneo para q quedara lo mjr posible mua:*
