Descendants | seventeen | ♕

O9

Una semana pasó después de la fiesta de la familia de Joshua, los chicos no habían vuelto a verse, aún no encontraban la manera de poder juntarse sin estar en peligro.

Un Joshua contento salía de su casa, hoy los chicos y él irían a la universidad para ver un show de talentos y divertirse un poco, también les habían dicho que podían practicar los suyos, era una actividad para que se conocieran mejor a sí mismos. Volviendo a Joshua, iba caminando por las calles de su ciudad, aún era temprano así que iba a pasos lentos mientras escuchaba música, llegó hasta la esquina de la calle que estaba frente a la otra acera que conectaba al muro, paró un momento para que los carros pasaran y después él, estaba tan concentrado en ver a los autos que no sintió una presencia a su lado hasta que esta tocó su hombro, dio un pequeño brinco del susto y volteó a ver a la persona, sorprendiéndose al instante.

— ¿Jeonghan? — su cara cambió a una de confusión

— Hola Joshua, ¿qué tal? — el anteriormente nombrado sonrió

— Todo bien, ¿cómo has estado? — Joshua retiró los audífonos de sus oídos para prestarle atención

— He estado bien, ya sabes, un poco ocupado con la escuela y la ciudad pero todo en orden —

— Me alegra que estes bien, ¿ibas a algún lado? — dijo mientras veía como cargaba una pequeña mochila, tal vez iba a su escuela, pensó

— Acabo de salir de mis clases, ¿y tú? — volteó a ver hacia donde Joshua tenía intenciones de ir — ¿Cruzarás? — apuntó hacia enfrente

— Si, mi escuela está allá así que esta es mi rutina todos los días — rió un poco

— Suena interesante, de hecho ayer estaba pensando en cuanto quiero ver a los chicos, solo nos conocimos un día pero me agradaron tanto que los extraño — Jeonghan también soltó una pequeña risa

Joshua se quedó pensando un poco sus palabras, volteó a ver su reloj y se dio cuenta que faltaba poco para que el timbre sonara, volvió su vista a Jeonghan y lo vio perdido mirando la gran estructura que tenían frente a ellos.

— ¿Te gustaría venir? — preguntó atrayendo su atención

— ¿Te refieres a... cruzar? ¿Yo? — dijo Jeonghan mientras se apuntaba sorprendido

— Si, solo si quieres, tal vez así puedas ver a los chicos — le respondió con su bonita sonrisa

Jeonghan lo pensó un poco pero no le dio tantas vueltas al asunto y asintió — Me encantaría —

Joshua volteó a ver a la calle, los carros ya no estaban pasando así que aprovechó para tomar la mano de Jeonghan y tirar de él para ambos cruzar, antes de entrar Joshua volteó a ver a Jeonghan mientras lo examinaba y ver si no levantaba ninguna sospecha, Jeonghan se puso un poco nervioso al sentir la mirada de Joshua en él y no pudo evitar sonrojarse cuando peinó un poco su cabello y colocó un mechón tras su oreja, este le sonrió y el también, volvió a sentir el jalón en su mano para ahora si entrar. Lo primero que vio fue un nublado bosque con muchas ramas y un característico olor a tierra mojada, era muy distinto a donde el vivía ya que siempre estaba rodeado del sol y un olor a flores, siguió a Joshua mientras seguía viendo su alrededor, no había tanta gente por ahí y tampoco lo tomaban en cuenta, frente a sus ojos vio una enorme propiedad color café obscuro, volteó a ver a Joshua y este le volvió a sonreír para entrar, Jeonghan también entró, ambos siguieron caminando hasta llegar dentro de esta, donde pudo ver a más gente.

— Bienvenido a mi escuela Han — escuchó a Joshua decir, sin duda era totalmente diferente a la suya, para él era impresionante ver a toda esa gente sacando cosas luminosas de su cuerpo, quería creer que estaba en un sueño pero la realidad era esa, todos ahí eran mágicos y por un momento se sintió pequeño