The Only Exception (Camren)

parte 31 (HE VUELTO MALDITA SEA!)

Lauren despertó estando un poco confundida, aún sin estar consciente de la hermosa chica a su lado. Después de lo que había pasado la noche anterior, a penas pudieron llegar a casa antes del amanecer.
Camila se veía tan calmada y linda mientras dormía, Lauren sentía la necesidad de protegerla, como si ella fuera lo más valioso en el mundo. Aquella pequeña chica se había convertido básicamente en la persona más importante en su vida, todo lo que quería era su bienestar.
--¿Cuánto tiempo llevas mirándome?-- Camila acababa de despertar.
-- Lo siento eso fue aterrador-- dijo lauren sonrojada.
--Me gusta que me mires-- devolvió la menor entre bostezos
-- me gusta mirarte-- lauren acarició su mejilla por inercia.
--Tú me gustas-- expresó camila, mirándola a los ojos.
-- Te prepararé el desayuno -- ofreció la mayor sonrojada, levantandose de la cama.
-- ¿Necesitas ayuda bebé?-- la de ojos cafés intentó levantarse también.
-- No cielo, espera aquí. Te traeré el desayuno a la cama.-- tranquilizó la más alta.
--Eres tan linda... Casi haces que olvide lo dolorosa que es la vida.-- dijo camila miserablemente.
--Lamento todo por lo que estás pasando, desearía poder hacerte sentir mejor-- confesó la ojiverde.
--Sé que no es el momento, pero... Necesito sentir algo que no sea todo ese dolor.-- Definitivamente Camila había notado lo increíblemente sexy que lauren lucía.
--¿Enserio?-- Soltó Lauren insegura
--Te necesito tanto Lauren.--
Y eso fue todo lo que necesitó para que su novia se lanzara sobre ella.

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--Lamento molestarte, solo... Necesito aclarar esto.--
--¿Dinah? ¿Qué haces aquí?-- normani estaba muy confundida.
--No quiero que dejes de hablarme por esto-- La polinesia lucía realmente angustiada.
--Jamás haría eso-- tranquilizó la mayor. Invitándola a pasar.
--Anoche... Dijiste que estabas confundida-- su voz siendo casi un susurro.
--No de esa manera. Escucha, realmente eres hermosa y eres la persona más graciosa que he conocido, te quiero tanto, pero no de esa forma. Aún eres una niña y no creo que pueda haber algo entre nosotras.-- Explicó la mayor, temiendo lastimar a su amiga.
--No soy una niña-- debatió dinah.
--Tienes 16, lo lamento pero no hay manera en la que pueda verte como algo más que una amiga.-- Aclaró Normani.
--Son solo tres años Mani-- refutó la menor.
--No hagas eso porfavor.-- suplicó la morena.
--Me gusta que seamos amigas Dinah, quiero que sigamos teniendo eso.-- continuó.
--A mí también me gusta, pero también me gustas...-- susurró la polinesia.
--Solo tienes un crush conmigo, eso pasará. Estoy segura de que pronto conocerás a la chica adecuada para tí.-- consoló la mayor.
--No eres solo un crush, Mani eres hermosa, inteligente, tan divertida, me gusta mucho como eres y además... Eres tan ardiente. Realmente me gustas, pero supongo que es algo que no podrá ser.-- Aparentemente la polinesia se había resignado.
--¿Podemos ser amigas?-- consultó Normani.
--Porfavor-- respondió la más alta con una sonrisa y ambas se abrazaron.
--Pero...-- continuó la menor. --¿Por qué anoche dijiste que estabas confundida?--
--Mira, siempre he sabido que podrían o no gustarme las chicas. Para mí es algo natural. Afortunadamente crecí en una familia que nunca fue conservadora... Así que sabía que algo como esto podría pasar. Cuando me besaste, se sintió bien; no voy a mentir. Pero no seré esa persona que se mete con menores.
Estaba confundida porque no sabía si debía seguir cerca de tí... Ahora sé que sí, todo lo que puedo ofrecerte es mi amistad Dinah.-- dijo Normani esperando haber usado las palabras correctas.
--Eso es suficiente para mí.-- aceptó la polinesia con una enorme sonrisa.
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--¿Crees que deba acompañarla?-- Cuestionó Lauren, llena de dudas.
--No lo sé, creo que sería complicarlo más, a su papá no le gustará verte ahí, probablemente ni siquiera dejará que ella esté ahí.-- Explicó Normani.
--No quiero dejarla sola-- dijo la de ojos verdes temerosa.
--Lauren dudo que ella quiera exponente a eso. Sí su papá intentara hacerte algo, seguramente lo mataría.-- La mejor amiga de camila sabía muy bien de lo que hablaba.
--¿Y si le hace algo a ella?. Quiero estar ahí y poder defenderla.-- confesó lauren.
--Yo estaré ahí, jamás dejaría que le hagan daño, sabes que adoro a Mila-- tranquilizó la mayor.
--Está bien, pero yo las llevaré y esperaré afuera para traerlas de regreso.-- sentenció la más pequeña.
--No tengo problema con eso, ella estará felíz de tenerte cerca. La haces muy felíz-- confesó Normani entre sonrisas.
--¿Lo dices enserio?-- preguntó Lauren sonrojada.
--Por supuesto, ella está loca por tí, jamás la había visto así por alguien. A ella literalmente se le iluminan los ojos cuando habla de tí y siempre está sonriendo. Es como si todo lo demás dejara de importarle, porque te tiene a tí.-- respondió la más alta, emocionada por la felicidad de su mejor amiga.
--Ella también me hace muy felíz, adoro tenerla en mi vida-- Lauren estaba a punto de empezar a dar saltitos de emoción.
--No puedo creer que alguien que luce así, pueda ser tan tierna.-- señaló normani entre risas.
--¿Ya escuchaste mi voz de bebé?-- cuestionó la de ojos verdes orgullosa.
--Sí, grabaste un audio para que camila lo use como alarma. Lo increíble es que sí funciona.-- admitió la morena. --Ella despierta de muy buen humor.--
--Eso era solo para ella.-- musitó lauren.

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--¿Segura no quieres que te acompañe?-- Preguntó lauren preocupada.
--No, estaré bien. No quiero que él te agreda o algo.-- Camila intentó tranquilizar a su novia.
--Estaré aquí esperando, si me necesitas solo llámame e iré por tí.-- Informó la ojiverde y besó la frente de la más pequeña.
Camila y Normani salieron del auto de Lauren y se dirigieron al cementerio.
En cuanto su padre las vio, empezó a gritar como loco, prácticamente se lanzó sobre ella, sin dejar de insultarla y culpándola de todo. Era obvio que su hija no era bienvenida. Pero Camila no fue por él, ella solo quería despedirse de su hermano, al menos verlo por última vez.
Después de ignorar a su padre, Camila se acercó al ataúd que aún estaba en la superficie, mientras Normani lo enfrentaba para que deje en paz a su amiga.
Sofi se acercó a ella buscando un abrazo, mas él no se lo permitió, exigiendo que Camila y Normani se fueran del lugar, su mamá no intervino.
Camila no tenía fuerzas para otra pelea, solo quería que esa pesadilla terminara, quería dormir y no despertar jamás, sentía como su vida seguía cayéndose a pedazos.

Normani condujo de regreso, mientras Camila se durmió sobre el regazo de Lauren, habían sido momentos muy difíciles para ella. Merecía algo de paz.

--Cariño... Ya llegamos-- dijo Lauren entre susurros.
--llevala en brazos, no despertará.-- sugirió Normani.
--No soy tan fuerte-- Se quejó la menor.
--Si despierta en tus brazos tendrás puntos extras.-- recalcó Normani levantando una ceja.
--mmm okay, pero necesitaré algo de ayuda.-- Expresó Lauren.
--Bien, te ayudaré.-- Cedió la mayor bajando del auto.
Lauren la llevó en brazos hasta la cama, pero el sueño de su novia era tan profundo que no despertó.
Ella se acostó a su lado y después de admirarla también se durmió.

--Hola cariño, ya regresé.-- La puerta se abrió, mostrando a Mike.
--¿Quién es esa chica?--
--Papá, puedo explicarlo...--