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XVIII - El baile de los condenados

CAPÍTULO 19 - El baile de los condenados

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La fiesta de fin de año de los soldados y doctores de Kamala siempre fue privada, y se realizó en medio del Bosque Feller, a al menos 200 km de la ciudad más cercana.

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La asociación de científicos y sus militares - todos OVAS y por ende de razas diferenciadas - siempre se mantuvieron alejados de los gobiernos y las milicias estatales. Su existencia era un mito, y lo poco que se sabía de ellos, estaba lejos de ser la realidad. No eran científicos locos haciendo experimentos, ni la NASA escondiendo información sobre el resto de la galaxia, eran especialistas que habían logrado contactar con otros seres inteligentes y que se mantuvieron en silencio durante décadas.

La ambición los llevó a esconder todos los avances tecnológicos obtenidos. Jamás quisieron compartir las habilidades del líquido OVA proveniente de la Luna. Escondieron a los niños, continuaron con sus investigaciones clandestinamente, y crearon una de las organizaciones más peligrosas del mundo - e incluso de la galaxia Artemi - ya que ni siquiera los desconocidos de la Luna podían dar con ellos.

Por esto, y por el complejo de superioridad que cargaban, las fiestas y reuniones eran exclusivas. Jungkook era consciente de esto, ya que Sunmi le había hablado sobre la historia de los niños OVAS en la Tierra.



Es la primera vez que Jungkook y Jimin asistirán juntos a una fiesta, pues el omega fue solo durante los primeros años. Cansado de sentirse desplazado y acosado, había decidido no ir más.

Jungkook elije un traje de gala negro y una camisa roja obsequiada por sus hijos, Jimin, en cambio, opta por el blanco en su totalidad. Por debajo del saco, una fina remera de encaje lo hace lucir sensual pero refinado a la vez. No suelen salir y apartarse de sus obligaciones - de todas maneras, sus jefes no se lo permiten - pero están listos para dar que hablar y volcarse en el ojo de la tormenta. Saben que están siendo vigilados y que por alguna razón desconocida, aún no han sido apresados y separados de los niños.

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— Recuérdame porqué estamos aquí - Jimin habla en voz baja y sujeta el saco de Jungkook. Siente la mirada de todos los soldados en el salón e incluso percibe la envidia de muchos de ellos.

Quieren apartarlo de su alfa y tomarlo allí mismo, pero también siente lo mismo de parte de los doctores omegas, con su mirada libidinosa sobre el cuerpo ejemplar de Jungkook. A Jimin le hierve la sangre y se molesta... no está dispuesto a compartir.

— Estamos aquí porque nos han invitado a pesar de todo. Quieren ver nuestro comportamiento de cerca... pero no pueden matarnos, porque nuestras habilidades significan una gran pérdida para el avance científico de las alteraciones humanas - Jimin responde rápido y seguro, logrando divisar a su amigo Felix a le lejos — Oh Kook... no le hemos pagado lo suficiente a Seokjin y a Taemin para cuidar de los niños.

Bromea, ya que su amigo se ha quedado en casa por nada de dinero. La presencia de Taemin es la verdadera sorpresa, al preferir la felicidad de Beomgyu antes que la suya. Quiere que su hijo sea amigo de los Jeon, aunque sean otros OVAS, y aunque el padre de éstos le haya roto el corazón.

Caminan entre la gente y deciden utilizar sus poderes con discreción. Jungkook fracciona su mente pero no mueve nada con ella, mientras que Jimin percibe, examina, y programa. No puede hacer mucho, después de todo sus guantes están en su lugar y no ha tocado a nadie. Al menos puede asegurarse de que Jessica y Jaehyun los están observando, aunque han decidido dejarlos tranquilos por el momento.