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América

Salí de mi habitación, de «nuestra» habitación como al muy asqueroso le gusta llamarle, me asquea su forma de hacer que nada ha pasado y siempre hemos sido una pareja.

Aunque estos meses no los recuerdo a la perfección aún puedo recordar algunas partes borrosas pero no todo.

O solo lo quieres olvidar

Bajo las escaleras para llegar al salón de la casa, hace diez minutos Jack me había mandado a traer con una sirvienta para el desayuno.

Llevo puesto un vestido suelto color azul y una sandalia, y mi cabello cae por mi espalda, tardo en caminar porque sé que a él le molesta que tarde.

Hay que fastidiarlo un poco.

Sabía que hoy él saldría de casa por un largo tiempo y yo podría aprovechar el tiempo para entrar en su despacho y buscar información sobre él.

Llegue hasta el comedor y él sonrió al verme.

—¿Por qué has tardado tanto?—Pregunto al indicarme que me sentará.

—Lo mejor siempre tarda en llegar—Respondí con egocentrismo.

—Y lo sé, pero sabes que mi no me gusta que me hagan esperar cariño—Bufo.

—Estaremos hablando de lo que te gusta o no, nos vamos a tardar horas—Rodé los ojos con molestia.

—No lo hablaríamos si tú hicieras lo que hicieras lo que yo digo cuando yo digo—Sonrió.—Ahora hay que comer.

Le indico a Mari la encargada del servicio que subieran los platillos, dejo enfrente de nosotros un plato con varios platillos para que pudiéramos escoger y servirnos lo que nos apetecía. Cuando acabamos de comer él se despidió de mí, y después salió de la casa.

Estos meses me tratan de porte lo más correcta con él o eso yo trataba de hacer, así que ya no era necesario que él me encerrara en mi habitación.

Podía andar por la casa, pero siempre con vigilancia de Maria, la muy perra le informaba todo lo que hacía, antes no le contaba las beses que yo respiraba porque ya sería demasiado.

Me levanté de la sala donde ya llevaba unas horas leyendo un libro, para despistarla, ella todo ese rato se la pasó a mi lado, me dirijo para el pasillo que da al baño, y sabía que me seguiría.

—¿En serio ni al baño puedo ir sola?-Bufe molesta— Esta relación entre tú y yo es más controladores que nada.

—El señor me ha dado órdenes de vigilarla y no lo defraudaré.

Me importaba poco lo que él quería u ordenara.

—Claro si, y también te recuerdo que el señor te ha dicho que estás para atender y complacerme en lo que yo quiera.—El tono que use en mis palabras pareció molestarla.

—Y ahora lo que quiero es un trago y cuando salga del baño lo quiero listo y en la terraza.—finalice, y me dirijo al pasillo.

Me metí en el baño esperando que ella se dirigiera al bar de la casa, me fije que ya no se encontrará y salí en dirección del despacho.

Deseo más oscuro [En proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora