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Adán

Después de no saber nada de Axel, por fin hoy regresaría a casa como tenia acordado, saliendo de mi oficina lo vería en casa y tendríamos una cena para hablar sobre papá.

Termino de revisar un informe de transporte ya que gracias a mi padre, se a parado la mayoría de las exportaciones. Y eso no tiene felices a algunos clientes del bajo mundo, y la tensión entre todos está en aumento.

Todo comienza a complicarse o eso es lo que yo siento, y ahora con Elian cada vez metiéndose en todo esto me estresa, —mal momento en que se te ocurrió salir con el Maca—pienso mientras pasó mi mano por el cabello.

Después de la llamada de mamá me he encontrado más inquieto que nunca, una parte de mi no cree que sea ella y solo se trate de otra persona tratando de distraerme.

Él no tener casi nada me molesta mucho, cuanto tiempo y aún no he podido encontrarlo, hasta he dudado de mi capacidad, creo que no soy como siempre pensé, el que solucionaba todo.

Soy un fracaso..

El  tiempo transcurre demasiado rápido a mi parecer, cuando me doy cuenta el sol se ha comenzado a ocultar, dejando un atardecer demasiado colorido, pintando mi lugar de tonos naranjas.

La puerta de mi oficina se habré y la sonrisa genuina de Marla, me causa ternura, hoy lleva un conjunto morado, que contornea sus grandes piernas, y su pequeña blusa realza su gusto, la tomaría ahorita mismo de las caderas y la cogería sobre la meza, pero  ahora no es el momento, ya que mi hermano me espera en casa.

—Es hora de irnos guapo— Su voz llena toda la oficina.

Asiento con un movimiento de cabeza, tomo mis pertenencias y camino hacia ella, posó mi mano sobre su cintura jalando su cuerpo con el mío, le doy un beso corto en los labios y caminamos para el estacionamiento.

Ya estando en el auto ella enciende el radio y contesta su celular para escuchar un poco de música, antes yo odiaba cualquier cosa que me distrajera al momento de manejar, pero como alguien alguna vez me dijo tengo que relajarme.

Al entrar por la vereda para llegar a casa, a la distancia observo el carro de Axel, y puedo sentir un poco de paz, no sé qué haría si vuelvo a perder otro hermano.

Bajamos del auto y entramos en casa, cuelgo las llaves del auto, camino por la casa mientras con la mirada busco a Axel, pero como he de esperar seguro se encuentra con Carolina en su habitación.

Llego hasta la puerta y toco para anunciar que he llegado, y que dejen de hacer lo que hagan, pero no recibo respuesta, así que habrá la puerta de un tirón.

Me encuentro a Axel sentado a la orilla de su cama, con la mirada baja, no le ha importado mi presencia ya que no se ha movido, no se como actuar en este tipo de situaciones, la ultima vez que lo vi de esa manera fue después de la muerte de Aidan, tomo asiento a su lado, esperando a que diga cualquier cosa.

Pasaron minutos en los cuales yo me tense, el silencio de había vuelto muy incomodo, se recargo en mi hombro, pose una mano para abrazarlo.

-¿Que sucedió?- Pregunte calmado y con la voz suave para producir un aviente cómodo para el.

Axel

Horas atrás.

Habíamos pedido servicio a la habitación ya que Carolina no se encontraba bien, y las cosas entre ambos aún seguían tensas.

Deseo más oscuro [En proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora