𝔏𝔞 ℌ𝔦𝔧𝔞 𝔡𝔢𝔩 𝔖𝔬𝔪𝔟𝔯𝔢𝔯𝔢𝔯𝔬 (ℭ𝔥𝔦𝔰𝔥𝔦𝔶𝔞 𝔵 𝔏𝔢𝔠𝔱𝔬𝔯𝔞)

♠️❤ℭ𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬 7♣️♦️

El Brazalete

El tiempo pasó y con él, los días, cuando salía aveces estaba con Kuina conversando sobre los juegos en los que participamos o hablando tonterías, hasta ahora ninguna se preocupó en preguntar sobre el pasado de la otra, en cuanto a Niragi, por suerte los mandaban a juegos lejos, cuando regresaban yo iba de salida, sí había regresado a jugar casi todos los días. Papá como un buen padre celoso, no me enviaba a ningún juego con Chishiya o trataba de que no tengamos que jugar entre nosotros ¿quizás? Me gusta pensar que es por la segunda opción así que estaba realmente agradecida por ello.

Hoy era una de las muchas veces que me encontraba en el balcón viendo a los demás divertirse, me gustaba porque afuera no se ponían... ¿Románticos? El punto es que no tenían sexo, otra vez sentía que me observaban de vez en cuando, cosa que ya se me había hecho costumbre.

-____(tn) hola, ¿cómo estás? Me preocupé cuando no te vi abajo, luego recordé que me dijiste que cuando no bajas simplemente observas desde aquí.- Golpeo Kuina antes de entrar y yo le sonreí.

-Hola Kuina, estoy bien gracias ¿y tu?- Baje de la barandilla en la que estaba sentada.

-Estoy muy bien, gracias también por preguntar.- Se acercó y se sentó en una de las sillas que allí había.

-¿Quieres algo que tomar?- Ofrecí.

-No, gracias. Realmente le caíste muy bien al sombrerero, ¿no?- Dijo mirando sorprendida el pequeño refrigerador que estaba en una esquina.

-Oh, bueno, supongo que es normal, soy su hija.- Sonreí tranquilamente y ella me miro aún más sorprendida.

-¿Eres hija del sombrerero? No se parecen en nada, tu eres muy bonita y más sería, él es.. Muy descontrolado y poco atractivo.- Dijo dejando caer su cigarrillo falso y yo reí un poco.

-Bueno creo que salí a mi madre, no la conocí pero es lo que dicen y comienzo a creerlo.- Expliqué.

-No llegaron juntos, ¿no? Debiste preocuparte cuando él desapareció.- Suspiro un poco más controlada de su sorpresa.

-De hecho.. Yo... Bueno, verás, yo no vivía con él. Cuando era una bebé me dio a una vieja amiga suya porque no podía cuidarme, mis abuelos lo echaron de la casa conmigo cuando mi madre murió. La mujer que ahora es mi madre y él mantenían contacto pero papá no quería verme, según dice, le daba mucho miedo que lo rechazará, que creyera que me abandonó porque no me quería.- Reí un poco y la mire.

-Eso es bueno, a mi si no me quería mi padre.- Sonrío nostálgica.-Me fui de casa para no soportar sus maltratos, cuando murió ni siquiera me enteré, pero no me arrepiento de no haber ido a su funeral, me enteré que murió por mi madre, ella está hospitalizada, ella siempre me amo y yo la abandoné.- Su sonrisa se borró y suspiro tomando el cigarrillo falso para mostrarme.-En el mundo real no podría haber dejado de fumar, pero debo regresar porque no puede ir al baño sin mí.- Explicó.

-Espero que logres salir, yo quisiera pero si es solo uno quien puede salir, dejaría que esa seas tu.- Le sonreí amablemente a lo que ella me regreso el gesto.

-Dime, ¿no estás incómoda aquí?- Miro alrededor hasta que se quedó mirando a un punto más alto y sonrío.

-¿Esta habitación te la dio Chishiya?- La miré curiosa.

-Me acostumbre a sentir que me observan.. Pero, ¿qué tiene que ver Chishiya?- Pregunté sentándome frente a ella.

-Bueno porque creo saber quien te observa, están peleados, ¿no? Chishiya es muy orgulloso, no esperes a que sea él quien se disculpe.- Me hizo un gesto con la cabeza para que voltear hacia arriba, supongo que a la azotea.