Sobrevivir... a eso había tenido que empezar a jugar en este mundo lleno de dobles sentidos y mentiras.
Había tenido que aprender a sobrevivir al miedo y a que todos quisieran acabar conmigo.
Me había hecho fuerte o al menos eso creía pero... ¿cómo...
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Advertencias, videntes y un amigo que me dice que me una a una guerra que no me interesa luchar. Sinceramente es demasiado para procesar así que lo he hecho de la forma más madura y adecuada posible, me he puesto como una cubata...
Lo sé... nadie aprobaría eso en una heroína que es lo que todos a excepción de mi se creen que soy pero como me importa bien poco lo que piensen lo hago igual, total, dudo que llegue a salir viva de toda esta mierda... prefiero morir siendo feliz y viviendo la vida que triste y deprimida porque me toca salvar a un montón de gente a la que no le importo nada.
Porque aunque nadie lo diga esa es la triste realidad de los que consideramos héroes, salvan a muchísimas personas pero a ninguna de ellas le importa realmente y el día en que cometa un error todo se va a la mierda y ya nadie lo quiere, supongo que otros pueden lidiar con eso pero yo lamento informaros de que no.
Podéis considerarme una mala persona por ello, la verdad es que no me importa, desde que llegué a aquí he descubierto que todos me juzgan, todos tienen opiniones de mi o me critican sin conocerme así que, ¿qué tiene de malo hacer lo que me apetezca?
El mundo es una mierda y yo también lo soy así que, seamos una mierda juntos, como dijo el rey león "vive y deja vivir"
...
Bueno... anoche no sé que hice pero tengo un dolor de cabeza que solo logra empeorar con los recuerdos fugaces que van llegando.
Estúpida, ayer lo pasaste en grande pero te recuerdo que tienes un reino que salvar y una guerra que ganar.
Vete a la mierda, conciencia, si no vas a ayudarme mejor cállate, anda
Yo al menos soy útil, ahora levántate y ve de una puta vez al castillo, sé mujer y enfrenta tus miedos
Lo que tu digas
Me levanté de la mesa de la taberna en la que estaba desayunando y preparé mis cosas para ir al castillo, envuelta en mi ya habitual ropa negra y tapada con una gruesa capa me acerqué a Ozul para irnos al castillo.
Galopar hasta allí me llevó casi un día completo pero después de la hora de la cena ya estaba entrando en la fortaleza amurallada que ellos llamaban castillo, un mozo de cuadras me dirigió hasta ellas y dejé a Ozul junto con el que según el mozo es su hermano.
-Dicen que estos caballos son capaces de sentir los vínculos de las personas y el de su hermano hace bastante que está inquieto, con un poco de suerte el suyo podrá calmarlo- me había dicho y yo simplemente le había dado una sonrisa a boca cerrada ante la idea de que alguien supiera que yo era la hermana de ese idiota
Una chica muy mona de unos 21 años me guio por los pasillos y como iba delante de mi aproveché para detallar su figura y físico.
Era alta y grácil, se movía como si flotara pero no desprendía esos aires de princesa de Laylah, era imponente y caminaba como si no le temiera a nada, como si supiera que podría con cualquiera que se le cruzara. Su cabello fucsia le llegaba hasta los hombros y cuando se dio la vuelta para indicarme que habíamos llegado pude ver sus ojos marrones y su nariz un poco torcida, me di cuenta de que dentro de este círculo social de caballeros, nobles, príncipes y demás era la primera persona no perfectamente bella.
-Mi nombre es Hexe, seré su asistente mientras esté aquí, si me disculpa me retiro, cualquier cosa que necesite solo debe llamarme, majestad-me dijo ella y cuando se dio la vuelta para irse la detuve por el codo
-Primero que nada, que ni se te ocurra llamarme majestad ni nada por el estilo, mejor tutéame y segundo que nada dudo que necesite un asistente, por no hablar que de que no creo que me quede por aquí demasiado tiempo, este sitio solo consigue me den ganas de atravesarme la garganta de lado a lado con unos me mis cuchillos, llámame Sam -dije yo estirando mi mano para que la estrechársela- en el improbable caso de que me quedara no necesito un asistente, necesito una amiga que resulta que de esas no tengo muchas- pareció dudarlo pero estiró su mano para estrechar la mía
-A mi tampoco me sobran amigas, Sam, pero puedo preguntar el por qué ese nombre cuando según tengo entendido te llamas Fayna
-Verás, Hexe, por estúpido que parezca todos los que usan ese nombre en estos momentos me han mentido o traicionado.
-A veces cuando creemos que lo sabemos todo no sabemos nada, es por eso, Sam, - dijo ella remarcando el nombre- que no debemos creer todo lo que vemos u oímos, en este sitio todo es muy distinto a lo que parece.- fue lo último que dijo Hexe antes de darme la espalda para marcharse por el mismo pasillo por el que habíamos llegado.
Después de quedarme sola pude empezar a escuchar las voces en la misma habitación que la última vez que estuve aquí y muchísimos pensamientos llegaron a mi cabeza, atormentando mis sentidos ralentizados por la resaca que no hacía más que nublarme la mente hasta el punto de no dejarme pensar con claridad.
¿A qué esperas? Tienes una deuda por cumplir y tu siempre las cumples
No espero a nada, solo dame un segundo tengo que mentalizarme de soportar a estos payasos.
¡Tienes miedo!
Claro qu-
-Me alegro de que hayas venido, Fayna- me dijo la irritante voz del principito
Juro que un día de estos lo despedazo mientras duerme por estar tan alegre siempre, me estresa
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Holaa
Otro capítulo por aquí, ¿les gustó? ¿qué creen que pase en esa reunión?
Sin más que decir si les gustó no olviden votar y comentar, ahora sí, se despide
