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Las cosas estaban muy aburridas en esa casa, llevaban 1 mes haciendo terapia y no pasaba nada.

Sinceramente, me alegraba (realmente no) de que todos allí fueran a mejor, pero ese no era mi plan y no quería que nadie lo destrozara.

Asique activé el plan B. Soltar a Kaira de la cárcel y que todo se desmadrara.

Solo me hicieron falta un par de llamaditas para que soltaran a Kaira de allí. Sus padres, aunque eran cazadores, tenían bastante dinero y sobre todo, un nombre en EEUU. Además de que una de mis fuentes más cercanas, era abogado e hizo de todo para que la sacaran.

Kaira no era consciente de lo que hacía, debido a que tiene trastorno bipolar y eso le hace no  poder pensar como una persona de su edad haría.

En cambio, había alguien en esa casa. Cuyo nombre no puedo decir. Que manejaba todos los hilos. Había incitado a Kaira a matar a Elin y, sus planes iban más allá.

No, Niels no era. Recluté a Niels justo cuando despertó de la muerte cerebral. Él no entraba en el plan, por eso me alegré de que sobreviviera.

El grupo de los HAVET era el que más roto estaba y, no solo era por todo lo sucedido. Llevaba roto mucho tiempo. Para ser exactos 1 año y medio. No todos los miembros eran tan fieles como parecían y, las puñaladas por la espalda eran el plato del día.

En la época en la que Elin empezó a separarse de su grupo, comenzaron a propagarse rumores de todo tipo sobre ella.

“Elin está saliendo con Gisli en realidad” “Elin tiene una enfermedad contagiosa” “Ellos odian a Elin”

Y no juzgo a la gente que propagó esos rumores, alguien con el coeficiente intelectual de un perezoso podía pensar eso. Pero era tan obvio lo que pasaba que no hacía falta ser cercano a ellos para entenderlo.

Angus, que no se llevaba mucho con la melliza de Gisli, empezó a hacer reuniones de grupo sin invitarla a ella. Eso, a ella no le gustó y empezó a aislarse.

Había mucha tensión en aquel grupo y nadie podía hacer nada.

2 semanas después, Elin se intentó suicidar. Durante un tiempo, nadie supo nada más de ella y, tampoco se preocuparon. En ese periodo de tiempo, pasaron todo tipo de cosas.

Niels se metió en problemas. Hackeo páginas que no debía y vio cosas que nadie podía ver.

Angus empezó a tener problemas con el alcohol. Además, conoció a una chica que nadie conocía (o si) y se enamoró de ella.

Kaira y Seren se hicieron muy amigas.

Brenda desaparecía.

Y Hans estaba saliendo con la súper pija.

Muchos problemas para tan pocos días. Y lo malo solo acababa de comenzar.

Cuando llegaron a la casa, Kaira y Seren hicieron como si no fueran amigas.

¿Pero quién era capaz de tragarse eso? Vale, vale. Estoy convencido de que ni si quiera lo habías pensado.

Porque esa es la gracia. Que todo os sorprenda. Y que cada persona tenga una opinión diferente.

Era el verano de 2013. Estaba en Dinamarca, como siempre.

En el orfanato no dejaban salir y, todos los niños nos quedábamos encerrados en las habitaciones.

Tenía la edad de estar viajando con mis amigos, de ligar y llegar tarde a casa. Pero, nada de eso pasó.

Tenía 16 años y mis amigos eran más bien escasos. Por no decir que, vivía en un orfanato y tenía 0 libertad.

Un día, vino una niña nueva. Tenía 10 años y no paraba de llorar.

Cuando una de las encargadas dejó su bolsa en la cama, la niña se escondió debajo de su cama sin parar de ahogarse en un profundo llanto.

Yo era uno de los más mayores de allí y supe perfectamente que hacer. Le di todo el tiempo del mundo.

A la mañana siguiente, Seren y yo estuvimos jugando con sus peluches.

Al final de día, ya éramos amigos.

Cuando ella tenía 13 la adoptaron. Para ese entonces, yo tenía 19 años y me fui a vivir cerca de ella.

En 3 años habíamos creado un vínculo demasiado fuerte.

No solo habían abandonado a Seren, sino que la habían maltratado desde que nació.

Sus primeros días de instituto fueron difíciles para ambos, acostumbrados a aprender juntos, tuvimos que adaptarnos a lo que estábamos viviendo.

Seren siempre me prometía un futuro juntos. No como pareja. Sino como familia.

Hasta que se metió en un grupo, los HAVET. Dejó de venir a mi casa los viernes, para irse con sus nuevos amigos.

Aunque Seren estuviera más contenta, sabía lo inestable que era y que en algún momento esa felicidad se convertiría en tristeza.

Mientras tanto, fui investigando a sus queridos amiguitos.

Eran tan fáciles de descifrar, que no me llevó mucho saber sus más profundos secretos.

Evidentemente, ella vino a mis brazos llorando como un bebé cuando pasaron un par de semanas. No me costó mucho tiempo contarle el plan, porque ella también tenía la misma manera de pensar que yo. Aunque su inestabilidad emocional me preocupaba demasiado. No podía dejar todo en sus manos, porque era probable que lo echara a perder.

Juntos hicimos un plan brillante. Que se fue a la mierda cuando el querido presidente anunció el cierre de los colegios “durante 15 días”.

Pero el querido director del instituto nos ayudó mucho con el plan. Obviamente no lo hizo queriendo.

Tendríamos a nuestros 12 corderitos en una casa encerrados, ¿podía haber algo mejor?

Sí, sí que lo había.

Seren había corrompido tanto a Kaira que mataría si ella se lo pedía. (¿Lo pillas?)

Todo salió a pedir de boca y en más o menos 3 semanas teníamos  2 muertes y una detenida.

No no no no, Hans no entraba en el plan. Pero sabía que acabaría pasando.

Su padre se suicidó hacía unos años y él no estaba bien psicológicamente. Si le juntas una muerte y una novia súper pija, te sale un suicidio.

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